domingo, 27 de mayo de 2012

LEONARD COHEN - "The Complete Studio Albums Collection": ¿A Qué Esperas?

Hay artistas que crean leyenda, más por el ruido que hacen o hicieron a su alrededor, que por su calidad intrínseca. Otros crean leyenda por méritos propios, sin generar tanto revuelo, incluso manteniendo la humildad a lo largo de extensas carreras. A este segundo grupo corresponde LEONARD COHEN, y esta caja es la mejor oportunidad, a un precio asequible, de hacerte con todos sus discos en estudio (complétalo con algún directo como el "Live In London" y podrás morir tranquilo), en formato cardboard de calidad (sin llegar al "outstanding" japonés), con amplio libreto y cuidado continente, para un contenido que se sostiene por sí mismo.

Desde siempre COHEN fue antes poeta que músico. Lo demuestran sus tres primeros discos, donde las parcas instrumentaciones son meros vehículos de transporte para sus palabras. Lo demuestra la propia ironía del artista, cuando en algún video se le puede escuchar asombrado de que todo el mundo aplaudiera las canciones que iba a tocar a los pocos segundos de empezar, como si las reconociesen, cuando todas empezaban por el mismo acorde ("no me sé otro..."). Por eso, no es de extrañar que algunos músicos hayan utilizado las palabras de COHEN como si de un LORCA se tratase (y para muestra, nuestro querido, que en paz descanse, ENRIQUE MORENTE, en "Omega").

Si a lo anterior unimos la irregularidad del alma del artista, que le hizo estar ajeno a las corrientes comerciales, con constantes hiatos en su carrera, aumenta la importancia del hecho de que todo el mundo conozca a LEONARD COHEN. ¿Por qué? Por su voz, por su hondura, por su amargura y porque todo en él es poesía y bohemia. Da igual que en casi medio siglo de carrera sólo se cuenten una docena de trabajos y unos cuantos directos. LEONARD COHEN es un ser aparte, un ente en sí mismo, alguien ajeno a géneros y a servilismos. Y esta caja es la mejor forma de demostrarlo. ¿A qué esperas? Cómprate un par de ellas, porque una la desgastarás de tanto escucharla y la otra se la tienes que dejar en herencia a tu descendencia.

SONISPHERE GETAFE 2012: Sábado 26 de Mayo, METALLICA, SLAYER, EVANESCENCE, WITHIN TEMPTATION, FEAR FACTORY, GOJIRA...

Segundo día del Sonisphere y el único día al que este que suscribe se acercó y genial en términos generales: en cuanto a organización, el mayor "pero" fue un trastocamiento total de horarios que afectaba a los grupos "post" METALLICA. No obstante, creo que fue culpa de los propios hombres de negro, que no salieron hasta casi las 11 de la noche (media hora después de lo que tocaba), cuando ya lo tenían todo preparado, pero también de la organización por no tener previsto que desmontar todo el tinglado de Metallica les iba a llevar una hora, con lo que EVANESCENCE salieron a las 2 a.m., y GOJIRA, CLUTCH y FEAR FACTORY fueron retrasados y confinados todos al segundo escenario.



En cualquier caso, con estas cosas hay que contar, más en España, donde se hace todo en el último minuto o se improvisa, y personalmente me doy por satisfecho con los cuatro conciertos que vi. Al final, como estaba todo muy petado decidí perderme a GHOST y mantenerme en el escenario principal con WITHIN TEMPTATION, que aunque no es un grupo que me mate (salvo el "Mother Earth", del que cayeron dos temas), sonaron bastante bien y dieron juego. Previamente, MASTODON me decepcionaron un poco, por su sonido regulero y lo poco visual de su actuación. Bien es cierto que salían muy pronto y pienso que no es un grupo para festivales, sino para salas, pero bueno. Después de Within, cambio drástico del público más cercano a la zona "vip", se fueron las "chicas del metal" y entraron los "hombres duros", jeje, a dar cera con SLAYER.



SLAYER son un capítulo aparte. Para mi los triunfadores de la noche, no por efectismo de su show, sino por entrega, sonido y ambiente creado. El pit estaba a rebosar, en parte por la gente que quería ver a Slayer y en parte porque ya todo el mundo había tomado posiciones para Metallica. Descargaron algunos temas de sus últimos trabajos y en seguida empezaron con los “típicos” y absolutamente necesarios, “Jesús Saves”, “Mandatory Suicide”, “Dead Skin Mask”, etc... y cómo no, “Raining Blood” y “Angel Of Death”. Brutales es poco: la pose del metalero es suya, esas guitarras en cuerno, esas piernas abiertas, el movimiento de cabeza, la mala baba... El sonido, potente, algo bajo quizás en las voces de Araya, pero no se perdía ni un ápice de entusiasmo en los riffs y en las descargas de Lombardo tras los parches. Y el público entregado, pogueando lo que se podía sobre todo en “Angel Of Death”. Me quedé sin garganta ni cuello, pero mereció la pena.



Y falta METALLICA, puesto que de Evanescence sólo vi un par de temas ya de lejos cuándo nos íbamos, y preferí no hacer ni intención de ver a Gojira o Clutch, puesto que sino se nos echaba el amanecer encima y las piernas y la espalda ya no aguantaban (estoy ya mayor). Después de una larga espera, se nos descubre un escenario con una megapantalla gigante que fue la salvadora de la gente de estatura media-baja y tras la intro Eastwoodiana empieza “Hit The Lights”. Me sorprendí que tiraran tan pronto de este tema, pero la sorpresa fue mayor cuando nada más acabar empieza el riff principal de “Master Of Puppets”. Ni que decir tiene de que Ulrich se debió de tomar dos o tres red-bulls antes de salir, porque de lo contrario no aguantaba ni de coña un inicio tan “thrasher”. Después de seguir con “For Whom the Bell Tolls” y “The Shortest Straw”, para acabar este rápido repaso a los cuatro discos previos de METALLICA al negro, le tocó el turno a “la nueva”, “Hell And Back”, corte de las sesiones preparatorias de “Death Magnetic” y que ha sido hace poco editado en el EP “Beyond Magnetic”. No me gusta mucho el tema, pero bueno, ahí quedaba bien como enlace entre lo viejo y el negro.



Y ahí empezó el meollo del concierto. Siendo la excusa de la gira, METALLICA venía a descargar al completo el “Black Album”, así que después de una introducción en forma de documental sobre el disco, salieron los cuatro a tocarlo enterito. La duda era en qué orden y desde el principio quedó claro: iban a compensar los temas menos conocidos del disco de marras, tocándolos al principio y dejando para el medio y el final los “hits”. Así “Nothing Else Matters” y “Enter Sandman” fueron los colofones (uno en el centro y otro al final), compartiendo protagonismo con “Sad But True” (¿quizás el primer intento de Rap-Metal que se llevó a cabo?), “The Unforgiven” (que estaba claro que iban a tocar en cuanto apareció una acústica en el escenario) y “Wherever I May Roam”. Con esto gran parte del pescado estaba vendido, sonando el grupo con la mejor ecualización de la noche y teniendo al público de su lado incluso en los temas menos coreados. Tras “Enter Sandman” llegó el momento de la “falsa despedida de rock star” para acabar con 15 minutejos más en donde volvieron al pasado. Sólo les faltó volver al “Ride The Ligthning” también en esta sección de bises, pues descargaron “Battery”, “One” y, cómo no, “Seek And Destroy”, colofón groovie necesario donde se precie.



En el aspecto visual, todo perfecto: tres pantallas, fuegos artificiales, efectos bélicos, todo el grupo moviéndose por todas partes para que el que pudiese no se quedase sin verlos, y un Hetfield muy “true” con un chaleco lleno de parches de grupos de Thrash y de la New Wave de los ochenta. Vamos, todo lo que uno se espera de un concierto de este tipo. El sonido también fue el mejor de la noche: equilibrado, con el suficiente volumen de decibelios y logrando que el aire no se llevara la mezcla al carajo, aunque claramente sonó mejor la parte del Black Album que los bises finales, supongo que por cansancio general.

En definitiva, un buen día hablando en términos globales. Era escéptico al principio sobre lo que me podía encontrar, pero está claro que con grupos como METALLICA que son profesionales de este tipo de conciertos masivos, juegas sobre seguro, incluso aunque la organización local no sea la octava maravilla. Un grande menos al que ver y 8 horas de pie que merecieron la pena.

SET-LIST de METALLICA:

1. Hit the Lights
2. Master of Puppets
3. The Shortest Straw
4. For Whom the Bell Tolls
5. Hell and Back

The Black Album
6. The Struggle Within
7. My Friend of Misery
8. The God That Failed
9. Of Wolf and Man
10. Nothing Else Matters
11. Through the Never
12. Don't Tread on Me
13. Wherever I May Roam
14. The Unforgiven
15. Holier Than Thou
16. Sad But True
17. Enter Sandman

Bises:
18. Battery
19. One
20. Seek & Destroy


(Fotos obtenidas de la web oficial del Sonisphere 2012)

jueves, 24 de mayo de 2012

CLAWFINGER - "Life Will Kill You": Correcto pero sin más

Mi relación con CLAWFINGER se reduce a un disco, que para ser sincero, en su momento escuché mucho, pero que con el tiempo fui sepultando en mi colección y me ha costado encontrar para refrescar mi memoria sobre este grupo. El disco en cuestión es “Deaf Dumb Blind”, tiene más de una década en sus surcos y seguramente fue y es el disco más famoso de esta banda sueca, una de las pioneras en Europa en la mezcla del Rap y el Metal. “Nigger” fue su bombazo particular y aunque con el tiempo he notado que ha perdido mucha de su actualidad por aquel entonces, sonando a veces incluso algo ingenuo, el disco no está mal visto ahora desde la distancia.

Hasta el último lanzamiento de CLAWFINGER hasta la fecha, “Hate Yourself With Style”, que pasó por la redacción de esta web hace ya un tiempo, no había vuelto a interesarme por la banda y ni siquiera sabía si seguían vivos. Meses después cae en mis manos “Life Will Kill You” y debo confesar que me ha costado mucho comentar este disco, no porque sea un mal disco, que no lo es, sino porque cada día me dejaba una sensación distinta. En una primera escucha pude comprobar como el tiempo no ha pasado en balde y CLAWFINGER ha evolucionado y mucho desde “Deaf Dumb Blind”. Aunque sigue el Rap muy presente, ahora la música se tiñe de otros elementos de manera más o menos triunfal o desastrosa: música industrial, Hardcore... otros géneros han sido asimilados por el grupo, además de una producción menos limpia que en sus inicios y más centrada en potenciar las guitarras, por aquello de que los noventa no están ya entre nosotros. Sin embargo un lastre tenía el trabajo en esta primera escucha: siempre he tenido la sensación de que salvo algunos temas había mucho relleno, demasiado corte intrascendente que hacía que en mi semblante apareciesen bostezos.

En otras ocasiones, cuando menos atención le prestaba curiosamente, el disco parecía digerirse mejor, seguía pareciéndome algo largo (señal de que, teniendo en cuenta que sólo dura tres cuartos de hora, el relleno seguía presente), pero a veces hasta me sorprendía cabeceando ante los riffs. En cualquier caso una cosa tengo clara, “Life Will Kill You” es muy irregular y se acaba haciendo pesado. Dejando a un lado la pretenciosamente nostálgica portada, emulando los famosos símbolos que en los noventa llenaban los artworks de los discos avisando a los padres de que las letras podían herir la sensibilidad de sus hijos, cuando el Nu-Metal era un género de masas dirigido fundamentalmente a los adolescentes, el contenido musical de “Life Will Kill You” denota una falta clamorosa de línea a seguir y acaba por exasperar. Esta es la causa de que el disco genere sensaciones distintas según como afrontes su escucha, pero nunca te dejará el poso necesario como para que el CD dé más de un par de giros en tu reproductor. Demasiada dispersión de sonidos y de ideas en mi opinión.

Ciñéndome a los cortes que siempre han logrado hacerme cabecear un poco, “The Price We Pay”, con introducción de sección de cuerdas incluida es de las mejores. Riffs pegadizos y marciales, en unión a un teclado de aires robóticos le dan un aire a RAMMSTEIN muy particular, pero la voz de Zak, con un tono más convencional y cercano al Hardcore hace que esta influencia se diluya. También es certera “Prisoners”, nuevamente con unos riffs muy adictivos y simples, dejando Zak sus fraseos rapeados a un lado y con un estribillo muy melódico que se queda grabado en la primera escucha, como ocurre igualmente en “None The Wiser”, aunque acabe por hacerse un poco larga. “Where Can We Go From Here” insiste en esta fórmula de contundencia en las guitarras pero desde un ambiente más industrial, con cierto aire a lo FEAR FACTORY. Esta sería la línea más llamativa y coherente del trabajo, la más conseguida por lo menos.

El resto se pierde en medio de una batidora de elementos que no lleva a ningún sitio: la horrorosa “Life Will Kill You”, donde el Rap hace su entrada “triunfal”, la aburrida “The Cure & The Prison”, que pretende introducir cierta atmósfera en el ambiente, manteniendo el hilo industrial de las composiciones citadas hasta ahora, pero que acaba por hacerse muy repetitiva o la infumable “Little Baby”, cuyo inicio electrónico con voz femenina incluida concluye en una explosión de guitarras a la que no le veo realmente mucho sentido... estas serían las peores del trabajo, en las que siempre tienes ganas de pasar al siguiente tema, pero la cosa no mejora mucho en el resto, porque tienen el problema de que se pierden en el océano de la mediocridad, no pudiendo resaltar por nada en especial, contribuyendo a que “Life Will Kill You” pase sin pena ni gloria ante nuestros oídos, y seguramente ante el resto del mercado musical (salvo que seas fan de la banda).

Seas fan o no de las corrientes metaleras que estuvieron de moda en los noventa, y seas seguidor o no de CLAWFINGER, creo que “Life Will Kill You” no es un disco para el recuerdo. No es un mal disco, tiene cosas salvables, otras más grises y pocas cosas prescindibles, pero tampoco es un disco necesario. Si te gusta este estilo o este grupo, a lo mejor tienes otra opinión, pero estoy seguro que nunca se pondrá una nota alta al disco. Desde luego mi interés por la banda sigue ahora como estaba antes de recibir el disco: bastante bajo.

(Crítica publicada también en http://www.rocktotal.com)

JAMES BROWN - "Star Time": Todo lo que necesitas

La amplísima e influyente carrera de JAMES BROWN hace que tengas que reunir paciencia para poder hacerte con todos sus recovecos. Sin embargo, si lo que quieres es tener una visión global de su sonido, desde sus inicios más Soul hasta el Funk sucio y pegadizo de los setenta, esta recopilación, complementada con los directos en el Apollo, hacen que tengas todo lo necesario para comprender el sonido James Brown (pudiendo completarse en su etapa oscura con otros recopilatorios de Polydor donde entran temas menos conocidos).

Eso sí, desde mi punto de vista coleccionista, una advertencia. El sonido es excelente y la información que viene en el amplio libro de acompañamiento es rigurosa y llena de fotos amenas. Pero, si puedes, hazte con la edición original de esta caja (en rojo y amarillo, de 1991). Esta nueva edición es en formato "disco-libro", todo integrado, de forma que los 4 CD's están sujetos en las tapas duras del libro y el centro lo ocupa el amplio libreto. Tengo otras ediciones de este tipo, por ejemplo, también de Universal, la recopilación de Chess de ETTA JAMES, y si están bien hechas, son una buena pieza. Sin embargo, por lo que he podido comprobar por conocidos que tienen esta nueva edición, la calidad del acabado deja mucho que desear, pues el libreto está enganchado con sólo dos grapas y un cartón, con lo que a la segunda vez que lo abres, se rompe el cartón y tienes un bonito puzle para el resto de tus días.

La edición original no es tan "compacta", es una caja grande, donde los CD's están insertados en cajas de plástico estándar individuales, y el libreto es independiente, tamaño 30 por 15 cm más o menos (ver la foto que acompaño). Quizás sea menos manejable, pero es muchísimo más duradera y la portada y el diseño en general, mucho más afín al "fuego" musical que contiene.

DAVE HOLLAND - "Extensions": Impresionante cuarteto

Desde que DAVE HOLLAND dejara a MILES DAVIS y después de formar junto a CHICK COREA "Circle", aunque duró poco, la carrera de Holland se ha caracterizado por la regularidad y la evolución, dos palabras que parecen no poder encajar en la misma frase, pero que el bajista de origen inglés hace casar a la perfección. Free Jazz, Improvisación, Post-Bop, Big Band o en este caso "casi" M-Base (más por los acompañantes que por la música en sí), todo ello con su sonido de bajo "maderero", de esos que huelen a barniz en cuanto los oyes.

En "Extensions" DAVE HOLLAND estaba en pleno cenit de su más reciente formación, cuarteto junto a Steve Coleman y Marvin "Smitty" Smith, ambos de los Five Elements, y el guitarrista Kevin Eubanks, poco antes de renovar formación, con la que sigue vistando España de tanto en cuanto siendo una de las más constantes de su trayectoria (con Robin Eubanks, Steve Nelson, Chris Potter, etc...). Y el resultado fue un disco "coral", en donde todos aportan su grano de arena, tanto compositiva como interpretativamente hablando, estando presidido por el sonido Free Funk de Coleman y Smith, las disonancias de Eubanks y el bajo omnipresente de Holland.

"Nemesis" abre el trabajo a golpe de fraseos entrecortados, muy del estilo de Coleman, "Processional" lo continúa de forma cálida y envolvente, con un riff que no se olvidará fácilmente, "Black Hole" tiñe de oscuridad metálica el ambiente, "The Oracle", una de las más elaboradas y compleja, atrapa en progresión gracias al excepcional trabajo de Holland, "101° Fahrenheit (Slow Meltdown)" vuelve a las formas agresivas cuasi funks y finalmente "Color Of Mind" pone el broche final con ambientación más clásica.

El conjunto convierte a "Extensions" en un disco imprescindible, quizás no el más representativo de la carrera de Holland, pero para mi gusto de lo mejor que sus acompañantes han grabado nunca, y eso que hablamos de pesos pesados. Como hizo Miles en su momento, Holland sabe rodearse de buenos músicos y consigue que den lo mejor de sí mismos. "Extensions" es la prueba.

MESHELL NDEGEOCELLO - "Weather": No remonta

MESHELL NDEGEOCELLO no remonta. Después de producir un disco excepcional como es el último de LAÏKA, la que en su momento fuera una de las mejores voces del Neo-Soul, compartiendo protagonismo con ERYKAH BADU, con discos gloriosos como "Peace Beyond Passion", tenía que "reinventarse" después de dos trabajos mediocres (vistos desde la perspectiva de su carrera), especialmente "Devil's Halo". Como suele decirse, cuando estás en un punto creativo tan bajo, hagas lo que hagas, siempre sonará mejor. Por eso tenía esperanzas en "Weather". No pretendía que volviese a sus raíces Soul, pero al menos, ese aire alternativo-independiente que estaba cultivando, podría ser mejorado.

Bien, "Weather" confirma que MESHELL ya no es la que era. Nadie o pocos pretendían lo contrario. Una artista debe mirar hacia adelante y seguir haciendo lo que cree en cada momento, y mirar hacia atrás sería como reconocer errores. Pero, si decides cambiar de tercio, trata de hacerlo bien. El problema de MESHELL es que, no sé si por quién se rodea o por su propia falta de convicción, lo que hace ahora suena insustancial. Y "Weather es más de lo mismo. Nuevamente aura alternativa, arreglos oscuros y ambientación trip, pero poca o ninguna alma.

Salvo momentos puntuales como "Oysters", muy cacofónica y sepulcral o la versión de LEONARD COHEN, "Chelsea Hotel", el resto es algo tedioso y constante. La voz de MESHELL suena oscura, como pretende, pero parece contenida, como si tuviera a alguien que la pinchara cada vez que quisiera imprimir algo de personalidad en ella. Si a eso unimos una producción parca, distante y fría, nos quedamos con un disco inestable y de escucha poco agradecida, ni tan siquiera en posteriores intentos.

Lo dicho. Esta chica necesita un cambio de aires: un largo silencio y mucha reflexión sobre la dirección artística que pretende. Mientras siga sacando cosas como "Weather", mal vamos...

VV.AA - "20 Anniversary Of Dreyfus (20CDs)": 20 años muy bien llevados

El sello francés Dreyfus ha sido a lo largo de su historia sinónimo de calidad. Casa de múltiples artistas franceses, pero no sólo, pues por su catálogo también se encuentran trabajos de Marcus Miller, Roy Haynes o Ahmad Jamal (los tres presentes en esta caja), su sonido se caracterizaba por un Jazz europeo elegante que juntaba experiencia y juventud, con cierta predilección por el "manouche" y manteniendo la llama de artistas consagrados como el gran Petruche o Philip Catherine, además de los americanos citados.

Por todo ello Dreyfus, ya desde hace tiempo como subsello de Sony en Francia y sin ese aire "independiente" que en su momento tuvo (algo similar ocurrió con ECM cuando pasó a llenar las arcas de Universal), ha decidido rememorar su vigésimo cumpleaños con una caja que recoge 20 discos de su catálogo, editados entre 1999 y 2010. Entre ellos se encuentran joyas como el "Solo Live" de PETRUCCIANI, "Joko" de SYLVAIN LUC, el trio de EDDY LOUISS junto a Kenny Clarke del 73, reeditado por el sello en 1999 o el tributo a Grappelli de DIDIER LOCKWOOD. Pero quedarse sólo con esto sería obviar otros 16 trabajos que no bajan del notable alto, como escuchar la voz rota pseudo rockera de TÉREZ MONTCALM, el toque fogoso de STEVE GROSSMAN junto a Petruche o la noche de MARCUS MILLER y compañía, festejando otro cumpleaños de Dreyfus y re-grabando un gran "Tutu" junto a Kenny Garrett y nuevamente Petrucciani.

Todos los discos incluidos se presentan tal y como salieron a la venta en su edición estándar, 17 de ellos en las habituales cajas de plástico, dos en superjewel box (AHMAD JAMAL y ALDO ROMANO) y uno de ellos, el del gran BIRELI LAGRENE en digipack, todos ellos empaquetados en una caja de cartón funcional aunque un poco justa. Lo demás, el contenido musical, es simplemente sobresaliente, no en vano nos encontramos ante un sello de referencia en el género. 20 años no son nada, esperemos que duren otros tantos.

Contenido:

1 Michel PETRUCCIANI : Solo Live
2 Ahmad JAMAL : It's Magic
3 Franck AVITABILE : Short Stories
4 Aldo ROMANO : Just Jazz
5 Roy HAYNES : Fountain of Youth
6 Marcus MILLER : Dreyfus Night in Paris
7 Marcus MILLER : Power, The Essential
8 Richard GALLIANO : Piazzolla Forever
9 Biréli LAGRÈNE : Gipsy Trio
10 Adrien MOIGNARD : All The Way
11 Sylvain LUC : Joko
12 Philip CATHERINE : Guitars Two
13 Trio SUD : Young & Fine
14 Rosario GIULIANI : Lennie's Pennies
15 Steve GROSSMAN : Quartet with M.Petrucciani
16 Géraldine LAURENT : Time Out Trio
17 Eddy LOUISS : Trio
18 Didier LOCKWOOD : Tribute To S.Grappelli
19 Anne DUCROS : Close Your Eyes
20 Térez MONTCALM : Voodoo

WES MONTGOMERY - "The Complete Verve Recordings": Etapa infravalorada

WES MONTGOMERY fue el continuador natural de CHARLIE CHRSTIAN. Si este último fue el padre de la guitarra eléctrica en el mundo del Jazz, en un sentido que iba más allá del mero acompañamiento, WES MONTGOMERY le dio continuidad, de forma similar a lo que ocurriera en el formato trío de piano con AHMAD JAMAL, BILL EVANS, KEITH JARRETT. Gente como GEORGE BENSON en sus inicios le tuvieron como punto de referencia e incluso posteriormente, se le sigue teniendo como al John Coltrane de la guitarra. Sin embargo, hay mucha tendencia a quedarse con la etapa Prestige / Riverside y obviar su continuación en Verve bajo los auspicios productores de Creed Taylor. Cierto es que "Incredible Jazz Guitar", "So Much Guitar" y "Full House" son piezas básicas para entender la guitarra en el mundo del Jazz, pero no hay que infravalorar lo que vino después.

En esta edición a todo lujo, típica de Hip-O-Select en formato libro de 7" y lleno de fotos y reproducciones de los vinilos originales en su interior, tenemos 5CD's que contienen todos sus trabajos para Verve: "Movin' Wes", "Bumpin'", "Smokin' At The Half Note", "Goin' Out Of My Head", "Tequila", "California Dreaming", y los dos discos en que colabora junto a JIMMY SMITH: "The Dynamic Duo" y "Further Adventures of Jimmy Smith and Wes Montgomery". Los que estén familiarizados con este material sabrán que WES se pasó al "lado comercial" y aplacó su maestría con orquestas arregladas por Oliver Nelson y Don Sebesky, dejando a un lado su digitación en favor de la melodía, con dos excepciones: el directo en el "Half Note" y los discos junto a "Jimmy Smith", en donde también aparecen orquestaciones, pero desde un punto de vista más orgánico.

El repertorio era también esclavo de su tiempo y el Jazz en sentido estricto se une a temas de Pop y la Bossa, en una clara orientación hacia lo que en la segunda mitad de los sesenta estaba ocurriendo en el Jazz después de que el Free hiciera perder su tirón comercial y el público se dirigiera hacia otros sonidos. No obstante lo dicho, WES sigue siendo él: en medio de arreglos orquestales y de temas sencillos, no sólo se pueden extraer bondades del "Half Note" o de los dúos con Jimmy Smith. Ese sentido del ritmo, ese juego de armonías y las improvisaciones, más comedidas, pero igual de fascinantes hacen de esta etapa un complemento perfecto a sus mejores años.

Además, el sonido está claramente muy mejorado (quizás "demasiado", pues el órgano de Jimmy Smith sufre de estar demasiado amplificado con esta nueva expansión sonora, desequilibrando los balances de cualquier aparato), y se incluyen tomas alternativas (un poco descolocadas para mantener la integridad de los álbumes originales en cada CD) muy jugosas. Eso es cierto, no es la mejor forma de conocer a WES MONTGOMERY, pero si quieres completar su historia, no cometas el error de olvidarte de estos discos.

Disc 1, tracks 1-11: Movin' Wes
Disc 1, tracks 12-19: Bumpin'
Disc 1, tracks 20-22: Bonus Tracks
Disc 2, tracks 1-5: Smokin' At The Half Note
Disc 2, tracks 6-11: Bonus Tracks
Disc 3, tracks 1-9: Goin' Out Of My Head
Disc 3, tracks 10-17: Tequila
Disc 3, tracks 18 & 19: Bonus Tracks
Disc 4, tracks 1-10: California Dreaming
Disc 4, track 11: Bonus Track
Disc 4, tracks 12-16: Jimmy & Wes: The Dynamic Duo
Disc 5, tracks 1-6: Further Adventures of Jimmy Smith and Wes Montgomery
Disc 5, tracks 7-14: Bonus tracks

NILS PETTER MOLVAER - "Baboon Moon": Una nueva línea que mira hacia atrás

El trompetista noruego NILS PETTER MOLVAER fue toda una revolución en su momento, no tanto por su estilo, sino porque rompía ligeramente la línea del sello en el que grabó, ECM, con un sonido industrial y alejado de las texturas frías y envolventes del sello europeo. El caso es que Molvaer no hacía nada más que unirse a un grupo de músicos que experimentaban con el avant-garde europeo, la electrónica, el Jazz y por su parte, la música folk noruega, leáse JON HASSELL, ERIK TRUFFAZ, ARVE HENRIKSEN o alejándonos del terreno de la trompeta, BUGGE WESSELTOFT o DAVID TORN. Ya previamente el "buque insignia" del sello, JAN GARBAREK había coqueteado con estas texturas, pero nunca de una forma tan salvaje y evidente.

Con posterioridad, y una vez pasada la "novedad" de "Khmer" y "Solid Ether", MOLVAER se fue adentrando cada vez más en los pasajes prefabricados y las remezclas, dando como resultado buenos discos, aunque quizás algo constantes. Sin embargo, en 2009 "Hamada" recuperaba esa fiereza y capacidad de sorpresa de sus inicios, sin olvidar todo lo aprendido en los años intermedios, dando lugar a un disco que se podía ver como una transición hacia un nuevo renacimiento en el trompetista noruega. "Baboon Moon" confirma esta teoría.

Con este nuevo disco, y acompañado de una nueva banda junto a Erland Dahlen y Stian Westerhus, MOLVAER se adentra en terrenos etéreos como en su segundo trabajo, cargados de todo tipo de efectos y sonidos, pero también recupera la fiereza de sus inicios, aunque sea en dos cortes puntuales y en este caso mirando hacia terrenos casi metálicos: "Recoil" y la propia "Baboon Moon". Globalmente la escucha es absorbente y los citados cortes actúan como clímax ante el atmosférico viaje que el trompetista nos propone. Y que nadie piense que esto es un "back to the roots", es una mirada hacia adelante, cogiendo todo lo que se tiene por detrás.

Se ha hecho esperar, pero desde junto a "Hamada", "Baboon Moon" demuestra que MOLVAER vuelve a estar en un gran momento de creatividad. Ojalá signifique eso también que se deje caer por estos lares pronto. La última vez que lo hizo fue alucinante.

NEU! - "Neu! 75": Música astral

Tercer trabajo del dúo alemán de Kraut Rock formado por Michael Rother y Klaus Dinger, después de su magnífico debut y un segundo volumen marcado por las tensiones internas del proyecto.

Los estándares creados por NEU! En su homónimo debut se mantienen, con ese sonido minimalista, de ritmos mecánicos y ambientes envolventes, pero en este trabajo del 75, este último elemento se ve potenciado por el uso de los sintetizadores por parte de Rother, hasta el punto de que en ocasiones uno parece estar ante un precursor del Post-Rock o de la música New Age (seguro que SIGUR ROS o los propios RADIOHEAD han escuchado a NEU! En más de una ocasión y sino escuchad "Leb' Wohl").

La segunda mitad del trabajo, a partir de "Hero" da un cambio. Al dúo se añaden el hermano de Dinger, Thomas y Hans Lampe para tocar la batería, mientras que Klaus se dedica a la guitarra y a las voces. Esto da como resultado un sonido más orgánico y completo en texturas, pero al igual que en la primera parte los pasajes y las ambientaciones siguen siendo las protagonistas.

martes, 22 de mayo de 2012

JOE FARRELL - "Moon Germs": El mejor junto a "Outback" de la era CTI

Después de participar junto a Chick Corea en su recién creado proyecto RETURN TO FOREVER, todavía bajo la embriaguez del Jazz Rock Davisiano post In A Silent Way / Bitches Brew, el saxofonista y flautista Joe Farrell se lanzaba entre 1970 y 1976 a grabar una colección de discos para CTI, muy continuistas en sonido, pero a cada cual más excitante, siendo para mi gusto cumbres de todos ellos, "Outback" (donde Elvin Jones demuestra que también tenía feeling para ritmos pseudo-funkys) y este "Moon Germs".

Si en "Outback" fueron Corea y el citado Jones los invitados de excepción, en "Moon Germs" firman Herbie Hancock y Stanley Clarke, e incluso este último incluye una versión enfurecida de su genial "Bass Folk Song". El sonido vuelve a ser predonimante para el piano eléctrico de Hancock, menos vivo que Corea, aún sin el egoísmo y ombligismo posterior como solista, pero con una técnica totalmente madura, después de los muchos años junto a Miles y su ya dilatada carrera propia. Sin embargo, la presencia de Clarke, hace que las líneas de bajo adquieran más protagonismo, y no sólo en la citada "Bass Folk Song".

Farrell firma la primera cara del vinilo, con un tema amplio para sus dotes musicales como es "Great George", de ritmo funky inicial, conducido por un DeJohnette preciso y potente y Farrell con el soprano haciendo escalas por doquier, hasta que el colchón rítmico cambia hacia un post-hard bop lleno de entusiasmo. También con el soprano "Moon Germs" sigue la tendencia hard bop, con unos ritmos más complejos y un papel más predominante para Clarke en su acompañamiento. "Time's Lie" abre la segunda cara de forma reposada, con un tema firmado por Corea y en el que sus gustos latinos se recogen entrada la mitad del corte. Finalmente la citada "Bass Folk Song", con esa introducción de Clarke con el bajo acústico de sonido pastillero (típico sonido del bajo en los setenta hasta que se descubrieron nuevas formas de amplificación) y Farrell usando con maestría la flauta, mientras Hancok escupe síncopas funkys y hace uso de pedales wah-wah.

Con posterioridad nuevos discos de Farrell mantendrían este nivel, quizás un poco más flojo en "Upon This Rock", pero siendo insignia de ese sonido CTI que tantos buenos momentos dio.

STAN GETZ - "The Clef & Norgran Albums": Antes de la Bossa, el Maestro fue Cool


Una vez más el sub-sello americano Hip-O-Select, de la órbita Geffen y Universal, edita una recopilación extensa de material en formato libro a todo lujo y tamaño 7", uniéndose a otros buenos lanzamientos como los de WES MONTGOMERY, NAT KING COLE, BILLIE HOLYDAY o en el terreno Soul y Blues ETTA JAMES y HOWLIN WOLF. En este caso le toca el turno a STAN GETZ en sus primeros años para Clef-Verve (primera parte de los cincuenta), recogiendo las grabaciones realizadas por su quinteto y que dieron forma a 10 pulgadas como "Stan Getz Plays", "The Artistry Of Stan Getz", tres volúmenes de "Interpretations" y un buen puñado de temas extra, incluyendo una sesión en cuarteto y algunas grabaciones radiofónicas.

El acompañamiento visual es de lujo, incluyendo las portadas en tamaño ampliado de todos los discos y un buen puñado de fotos, como ocurre en todos los lanzamientos del sello, haciendo que merezca la pena el esfuerzo económico extra (muchísimo mejor que las ediciones baratas inglesas tipo Avid o las españolas/andorranas tipo Gambit), aunque haya que tener cuidado a la hora de sacar los CD's de los cartones en donde están insertados, para lograr que su integridad no se vea comprometida con pequeños roces. Y en cuanto a la restauración sonora, aunque quizás se pierda un poco la magia del crepitar añejo, se compensa con una clarividencia cristalina que permite escuchar todo sin altibajos, ni tampoco saturaciones inhumanas a lo RVG remasters (que pena que este hombre se haya cargado tantos grandes clásicos por culpa de sus remasterizaciones).

El contenido musical es puramente Cool Jazz: la Bossa aún no estaba de moda y sí la estela alargada del Birth Of The Cool y la costa oeste americana, con lo que nos encontraremos con interpretaciones muy arregladas, de solos neoclásicos y belleza lejana, muy acorde con la imagen fría y distante de Getz y la elegancia snob con la que se cubrían estos lanzamientos. Muchos standards reconvertidos que se pasarán en un suspiro, haciéndoles perder la fogosidad de los be-boppers pero ganando en matices, como ocurre en las versiones de "Have You Met Miss Jones?", "Fascinatin' Rhythm" o "It Don't Mean a Thing", y como no en temas de mayor calado emocional como "Body And Soul" o "Willow Weep For Me".

Olvídate de ediciones baratas malamente licenciadas. Date un gustazo y hazte con este fantástico set.

PUBLIC IMAGE LTD - "Plastic Box": Hay vida más allá de los Pistols

Después de la anarquía ideológica (y por qué no decirlo, como estrategia comercial...), el señor Johnny Rotten y el clashista Keith Levene, se unieron junto al enorme bajista Jah Wobble (al que Bill Laswell le debe la vida...) y crearon PUBLIC IMAGE LTD para adentrarse en eso que se vino a llamar Post-Punk y que influyó a tantos y tantos industrialistas en los ochenta.

Esta caja recopila prácticamente todo lo esencial del grupo en 4 CD's: sus tres primeros discos (con algún tema omitido o sustituido por reinterpretaciones para las Peel Sessions de rigor), que son fundamentales, también se incluye completo "The Flowers of Romance" y gran parte de sus trabajos posteriores, donde se adentraron en terrenos algo más asequibles, todo ello en una caja estándar cuádruple, sin más aderezos que un extenso libreto y la minimalista portada.

Los PISTOLS, THE CLASH y compañía fueron la antorcha a la que se agarraron las hormonas inconformistas de muchos adolescentes (los cuales se desgañitan cantando "Anarchy in The UK" o "God Save The Queen" 35 años después con un Rotten igual de pintoresco sobre el escenario), pero PIL es para mí un "producto" mucho más interesante, musicalmente hablando.

DISMEMBER - "Dismember": Fieles a sí mismos

DISMEMBER. Hay nombres que hablan por sí mismos y aunque parezca pretencioso que después de siete discos a tus espaldas edites un nuevo trabajo con el mismo nombre que tu banda, conmemorando veinte años en activo, está más que justificado en determinados casos. DISMEMBER. Sinónimo de Death Metal sueco, sinónimo de coherencia, sinónimo de directos contundentes y cargados de excitación. DISMEMBER. Sencillamente una de las bandas imprescindibles de la música europea de las últimas décadas. Simplemente DISMEMBER.

Ha llovido mucho desde que “Like An Ever Flowing Stream” cobrara vida. Han pasado aún más años de los que Matti Kärki, David Blomqvist y Fred Estby (ya fuera de la banda -los años no pasan en balde...-) supusieron alguna vez, allá por los primeros noventa al editar su primer disco, una de las joyas imprescindibles en la historia del Death Metal. Una larga trayectoria donde ha habido de todo, buenos, buenísimos, correctos... discos, pero siempre con su sonido característico como perfecta imagen de sí mismos. ¿Qué ha sido DISMEMBER? ¿Qué es DISMEMBER? ¿Necesita algún tipo de presentación este grupo? ¿Necesita definición el olor a carne putrefacta, el sabor de la corrosión, la visión de llamas centelleantes tomadas prestadas del mismísimo infierno? DISMEMBER, simplemente uno de los grandes, ¡como si esto fuera poco!

Los han acusado de inmovilismo, de regocijarse en su propio sonido, de no moverse ni un milímetro de su raíz. También los han acusado de no ser fieles a sí mismos, aunque parezca paradójico y contradictorio (“Massive Killing Capacity”, “Hate Campaign”...) ¿En qué quedamos? ¿Cuándo quieres comer carne roja y sangrante, pides en su lugar un queso con membrillo? DISMEMBER no necesitan ser reconocidos por críticas que no llevan a ningún sitio, ni por los libros de historia... ellos son su propia historia y habla por sí sola, forjándose disco tras disco, concierto tras concierto, y parece que el tiempo no pasa. Veinte años no son nada y “Dismember” lo demuestra: un disco compuesto y grabado en 2008, con la ilusión y el espíritu de hace dos décadas. Sonido limpio pero orgánico, si es que esto es posible, Kärki más cabreado que nunca, las guitarras aún más pesadas y corrosivas, variedad y mala baba... simplemente DISMEMBER.

Si “The God That Never Was” fue uno de los discos de su año, “Dismember” no va a ser menos, con un añadido, salvo que de aquí a finales de 2008 alguien consiga hacerme escuchar su disco decenas de veces por semana, el puesto de disco del año ya tiene posición ocupada. Por derecho propio. Sin más. Y eso que confesaré que tenía miedo por saber si Thomas Daun estaría a la altura de las circunstancias del mítico Fred Estby, uno de los artífices de la enciclopedia del batería de Death Metal: sencillez, efectividad, fogosidad en cada pegada... y muchos más detalles de lo que se pueda pensar en un primer momento. Sin embargo Daun hace un trabajo soberbio, sin nada que poder objetarle. Y sus compañeros de banda han vuelto a superarse, han vuelto a componer una decena de cortes directos al grano, con el añadido de un punto de variedad del que carecía “The God That Never Was”, un disco destinado mucho más a desfasar dada su explosividad que a ser degustado poco a poco.

Se nota que este disco es especial para la banda y DISMEMBER lo demuestra recogiendo casi todas sus facetas (que no son muy amplias, pero quién necesita nuevos ingredientes cuando lo que quiere es buena carne sangrante y jugosa), los medios tiempos, las melodías que fueron introducidas con un carácter predominante en el “Massive Killing Capacity”, los ritmos cargados de groove de “Death Metal”, el desgarro y la crudeza de “Indecent and Obscene” y el sentimiento totalmente clásico, envejecido y estimulante de “Like An Ever Flowing Stream”, y cómo no, esos toquecillos a lo IRON MAIDEN que son marca de la casa y que hacen que en directo adopten posturitas de banda Heavy de pedigree, de raza, de casta, con los mástiles de las guitarras en alto. Puro DISMEMBER resumido en un trozo de plástico que gira mecánicamente hasta llenar nuestra atmósfera de casi tres cuartos de hora de auténtica genialidad musical.

¿Para qué empezar con preeliminares? Directamente abrimos el disco con un disparo entre las cejas y que se atrevan a chistarnos... algo así debieron de tener en mente Kärki y compañía al seleccionar “Death Conquers All” como inicio de “Dismember”. Genial, brutal, sin descanso, a piñón fijo. Sujetad los muebles porque puede que empecéis a hacer un pogo con vosotros mismos y que vuestro domicilio sea destruido. Y para que no pare el holocausto, “Europa Burns” trae la pesadez y el groove en todas y cada una de sus notas. La llama ya está encendida y no hay quien la pare, la sangre fluye por nuestras venas, por las paredes de la habitación, por las ventanas... la sangre fluye del firmamento, como en “Under A Blood Red Sky”, rabioso, veloz, despiadado... y a la vez con un gran sentido de la melodía (esos intercambios de solos y melodías dobladas hacen que experimentemos momentos orgiásticos). Algo que sólo DISMEMBER sabe conseguir y que culmina en el final de este tema, puro IRON MAIDEN. “The Hills Have Eyes”, nos despierta del ensueño y nos introduce de lleno en el Death And Roll, en el ritmo y el desenfreno, en la excitación sin medida. Pero que nadie piense que la inspiración se acaba aquí. “Legion” pisa a fondo el acelerador y traslada a los dos primeros discos de DISMEMBER, con unos riffs correosos y putrefactos, muy acordes con la infernal voz de Kärki y la potencia del estribillo del tema, un tema que en directo debe sonar brutal.

La bestia anda suelta y cualquiera es capaz ahora de contenerla. Por eso para contrarrestar DISMEMBER vuelve a tirar de melodía no exenta de brutalidad en “Tide Of Blood”: más intercambios de solos, más electrificación Heavy, más alimento para una tormenta de vatios que descarga en “Combat Fatigue”, canción que se forma por dos o tres elementos bien puestos (un par de riffs, un ritmo contenido que se acabará acelerando explosivamente y poco más en cuestión de unos dos minutos) pero que alcanza cotas efectividad tan altas que ya quisieran algunos grupos. “No Honor In Death” supone una vuelta de tuerca más, un descenso a los infiernos en forma de morbosidad, pesadez y sentimiento Doom. ¿Y qué mejor que la locura de “To End It All”, puro DISMEMBER en su versión más agresiva, para salir de ese infierno? ¿O quizás no es más que un puente para entrar en la verdadera mansión de Satanás? Más bien estamos en este segundo caso porque el groove descontrolado de “Dark Depths” y sobre todo la decadencia mortuoria de “Black Sun” son el epitafio de nuestra existencia, tras lo cual, misteriosamente, de lo único que tendremos ganas es de volver a viajar por esta lluvia de fuego y sangre.

¿Necesitas algo más para aceptar la invitación? DISMEMBER lo ha vuelto a hacer, ha facturado un disco a la altura de las circunstancias, fundamental resumen de toda su existencia e incluso por momentos más que brillante, sin desmerecer a ninguno de sus clásicos. Cualquier fan del Death Metal más desquiciante y machacante debe tener en este lanzamiento una prioridad. Cualquier fan del grupo, por descontado. DISMEMBER, simplemente DISMEMBER.

(Crítica publicada también en http://www.rocktotal.com/)

domingo, 20 de mayo de 2012

DAVE HOLLAND & PEPE HABICHUELA - "Hands": Un disco de "manos"

"Hands" hace honor a su nombre. Forjado del cruce musical entre los Habichuela (con el maestro Pepe como cabeza luminaria y Josemi Carmona su hijo como cabeza pensanste) y Dave Holland, entre el Flamenco y el Jazz, todo en "Hands" está hecho a "mano". Y ya no es por la naturalidad, la frescura o la delicadeza, sino por el detalle de que los cinco componentes que aportan en el disco usan sus manos como vehículo de expresión, ya sea con la guitarra, el contrabajo o la percusión.

Dos temas de Holland "adaptados" y el resto todo son bulerías, tangos, fandangos, rumbas... con lo que el papel de "extraño" en esta película está claro: Dave Holland, y sin embargo su entusiasmo tanto en directo como en el disco en particular, se contagia. Normalmente los experimentos, ya manidos, entre el Jazz y el Flamenco, tienden a tintar lo uno de lo otro o viceversa, pero no logran una conjunción absoluta, o se quedan en meras recreaciones camaronescas. "Hands" es distinto, "Hands" es Flamenco, viejo, alegre pero también reposado, sin pretensiones, y en su ejecución cuenta con un invitado de excepción que lejos de no encajar, parece haber nacido para complementar el proyecto.

Y es que Holland asume el papel del cantaor en "Hands". Sus pizzicatos se entrecruzan con los arpegios de los Habichuela, pero cuando llega el momento de exponer la estructura de los temas, Holland hace crujir su bajo, haciendo que el quejío se transmita desde sus cuerdas hasta la madera cálida de su caja de resonancia. Y la mejor forma de ejemplificar este hecho está en esa magnífica taranta que es "Camarón", donde Holland llora a placer sobre las cuerdas de su instrumento, alargando las notas, tiñéndolas de sentimiento.

No se sabe si esto se quedará en algo puntual o dará sus frutos posteriores como las reiteradas reuniones entre McLaughlin, DiMeola y Paco de Lucía en su momento. Hasta entonces, "Hands" da un paso como un disco de fusión auténtica: donde todos los músicos se complementan para crear algo único. Pura magia. Puro duende.

FOURPLAY - "Between The Sheets": Elegancia Smooth pero con buena base

FOURPLAY es un super grupo. Tanto con LEE RITENOUR en sus filas (como ocurre en "Between The Sheets") como después con LARRY CARLTON, tener a los citados y además a HARVEY MASON, NATHAN EAST y BOB JAMES, todos ellos nombres propios de la fusión, asegura ventas y también calidad musical y "Between The Sheets" junto con "Elixir" quizás sean los mejores exponentes de este hecho, a la par con su debut y en la era Carlton "4".

El que esté familiarizado con el Smooth Jazz, sabrá a lo que se va a enfrentar: la base Jazzy se diluye en estructuras Pop, ritmos asequibles y melodía pegadizas, algo en lo que Ritenour y James son genios, completado con la puntual labor vocal de East y como invitada Chaka Khan en el tema título. El resultado es un disco de escucha amena, elegante, afable, pasajera dirán algunos, pero una delicia para cualquier momento.

"Chant", con esas melodías vocales tan pegadizas, "Monterey", con un gran trabajo de Ritenour, "Flying East", firmada por el propio Nathan y donde hace acopio de protagonismo musical en todos sus surcos o la gloriosa "Anhtem" son las guindas de un pastel que no pretende ser virtuoso, ni aventurero, ni provocador. Simplemente tenemos algo más de una hora de relajación, frescura y optimismo. Hay un momento para todo y FOURPLAY, construido a base de la sapiencia y el bagaje de cuatro grandes músicos, lo sabe como ningún grupo.

FAUST - "1970-1973 - The Wumme Years": Para paladear poco a poco

Las ediciones del sello americano/inglés ReR son para tomárselas con calma. En su lista tenemos fondo de catálogo con entes de personalidad tan particular como HENRY COW (éstos por descontado...), MASSACRE, SKELETON CREW, THE NECKS, THIS HEAT, ART BEARS o uno de los padres del sonido "kraut" alemán FAUST que son los que ahora tocan.

En esta caja se recogen cinco discos, en formato digipack y acompañados de un amplio libreto con información, entrevistas, fotos y demás apoyo biográfico visual. Tenemos los tres principales trabajos del grupo: "Faust", "Faust So Far" y aquél artefacto que sirvió para catapultar a Virgin al ser vendido por el módico precio de media libra y que era un compendio de out-takes y caras B y a la postre uno de los "super ventas" del grupo, "The Faust Tapes". Se incluyen también las BBC Sessions de rigor grabadas por el no siempre bien laureado John Peel y finalmente "71 Minutes" que recoge, literal, los citados minutos de música que se puede encontrar en varias recopilaciones previas de material completista.

Devorado todo junto puede ser un plato indigesto. "Faust" experimenta ya con postproducciones y cambios de velocidad de las cintas, como Cage o Stockhausen ya habían conseguido conculcar en muchos grupos derivados del Kraut o del RIO. "Faust So Far" tira hacia unas estructuras más sencillas, pero los juegos musicales y vocales dejan boquiabierto aunque mirado de forma superficial pueda parecer un grupo de músicos jugando a hacer música infantil. "The Faust Tapes" es una locura de principio a fin, con montones de temas sin título que son meras improvisaciones y experimentos. Pero ya no digamos "71 Minutes", que es su pareja de aventuras. Finalmente las "BBC Sessions" quizás sean las más naturales, incluyendo un tema, "Kraut Rock" que sirve a la perfección para definir el género.

Si te interesa profundizar en una época en la que el cruce de géneros populares, minimalistas, avant-garde y esquizofrénicos daban pie a las más interesantes fusiones que pudas imaginar, esta caja es excelente para uno de sus grupos estandarte. Luego probaría con otras de este mismo sello, y por supuesto con discografías como las de CAN, MAGMA, AMON DUUL, NIAGAR o los dioses HENRY COW. Una época de creatividad a raudales.

ANATHEMA - "Hindsight": Curiosidad Transitoria

Antes de comenzar esta crítica haré una advertencia, un comentario totalmente subjetivo por mi parte, pero que creo necesario para que se comprenda todo lo que diré a continuación: de entrada no estaba muy predispuesto hacia este trabajo. Siempre he considerado a ANATHEMA un buen grupo, con unos trabajos memorables e indispensables como el enorme “The Silent Enigma”, el glorioso “Eternity”, la obra maestra que es “Judgement”... como se puede ver no sólo soy seguidor de su etapa más Doom y oscura, sino también de sus posteriores obras. El problema que le veo a los Cavanagh es el hecho de que han tratado de adentrarse en un terreno en el que no terminan de encajar. Sus dos últimos trabajos, y en especial “A Fine Day To Exit” abría en ANATHEMA un camino hacia terrenos más cercanos al Brit Pop, lo que les restaba mucha de la personalidad ganada en el resto de su cambiante carrera. Si les hubiera salido bien la jugada lo vería lógico, pero perdieron más de lo que ganaron pues el público hacia el que se movieron no los terminó de ver más que como una banda algo más siniestra de lo que estaban dispuestos a escuchar. Mucho tiempo de silencio tras “A Natural Disaster” debido a la falta de una discográfica que apostara por su sonido y el anuncio de “Hindsight”, revisión acústica de temas antiguos, como vuelta de ANATHEMA para calentar motores de cara a su futuro nuevo disco, “Horizons”, no acababan de convencerme y no me esperaba nada bueno.

Todo lo descrito sirve para describir mis sensaciones cuando empecé a poner este trabajo en el reproductor. Afortunadamente no habían elegido ningún tema anterior a “Eternity” para adaptar en acústico, pero seguía siendo escéptico ante mi reacción por la escucha de “Hindsight”. Pues bien, voy a ser justo y tendré que tragarme mis palabras. El disco no sólo es notable sino que me atrevería a decir que en algunos momentos han logrado darle una ambientación insólita a las versiones que, sin llegar a emocionar absolutamente, sí que logran traspasar la barrera de la frialdad. “Hindsight” consigue hacer agradable su escucha, consigue entretener y no es un trabajo de relleno, sino que hay una importante labor de arreglo y reescritura detrás que lo convierten en un trabajo a tener en cuenta, aunque no sea más que para los fans de ANATHEMA pues eso sí, no recomendaría que nadie se adentrase en la carrera de los ingleses a través de esta especie de “recopilatorio”. En definitiva, ANATHEMA ha logrado dar un aire nuevo a varios temas de su etapa post-Doom, con un resultado más o menos interesante según la composición elegida, pero siempre consiguiendo reflejar una calidad que no se veía reflejada en la falta de inspiración de sus últimas obras.

Evidentemente, los temas que a priori menos me atraían de “Hindsight” eran los pertenecientes a “A Fine Day To Exit” y “A Natural Disaster”, sin embargo en estas versiones acústicas de “Temporary Peace” y “Leave No Trace” y las tres seleccionadas de su última obra, “Are You There?”, “A Natural Disaster” y “Flying”, en especial en la primera y la última de las citadas, ANATHEMA consigue lo que estos dos discos no hicieron en su momento: mantener la intensidad y lograr que el sopor no venga mi cerebro. Quizás sea porque estos temas son más adecuados en este formato, pero ganan con las escuchas. Del resto de versiones, “Fragile Dreams” del “Alternative 4” se lleva la palma como la más lograda, emocionante y desnuda, seguida muy de cerca por la enorme “One Last Goodbye”, aunque desmerece bastante al compararla con la original del “Judgment”. En el apartado de las peor conseguidas está sin duda “Angelica”, en la que uno siempre echa de menos la hipnosis que logra este gran tema en su versión primaria de “Eternity”, gracias a la voz rota de Vincent Cavanagh que aquí está demasiado dulcificada.

Para completar el trabajo, “Unchained (Tales Of The Unexpected)” pone el punto de actualidad en una composición que no aporta mucho al conjunto, pero que cierra el trabajo de la misma manera etérea con que se abría, desnudez al máximo con un solitario piano y unas voces susurrantes, que introducen de manera tranquila y sosegada un tema prescindible. ¿Qué queda de todo esto? Un puñado de versiones de ANATHEMA en un formato, que en especial en los temas pertenecientes a “A Natural Disaster” y “A Fine Day To Exit” les viene que ni pintado, y que globalmente convierten a “Hindsight” en un disco mucho más aprovechable de lo que se podría pensar en un primer momento. Interesante aunque sólo como curiosidad transitoria.

(Crítica publicada también en http://www.rocktotal.com/)

martes, 15 de mayo de 2012

ARETHA FRANKLIN - "3 Original Album Classics": Forjándose un camino

ARETHA FRANKLIN probablemente sea una de las 10 mejores artistas de todos los géneros que ha dado la historia de la música. Partiendo de SAM COOKE, Aretha y su alter ego masculino, Ray Charles dieron vida a un género, el Soul, que sirvió de alternativa negra a la música popular que entonces llenaba las cadenas de radio, también en los albores de su generación, el Rock (aunque irónicamente su raíz también fuera negra), mientras el Jazz languidecía ante la inminente llegada de los sonidos más duros de finales de los sesenta.

Sin embargo esta caja editada por Sony dentro de sus series de álbumes originales en formato cardboard y enfundados en un estuche de cartón, no recoge lo más "popular" de Aretha. Cuando este nombre aún no había saltado a la lista de éxitos (cosa que ocurrió nada más cambiar de sello a Atlantic), Aretha fue fichada por Sony pero no supo muy bien qué hacer con ella: ¿Jazz? ¿Soul -cuando el término ni existía-? ¿Blues? Este hecho se refleja muy bien en sus discos en Columbia, compendios de canciones suaves, de leve ascendencia Jazzy, con una producción grandilocuente y una voz en formación, pero aún sin la personalidad que en Atlantic desarrollaría.

En cualquier caso, toda subida a los cielos tiene un viaje largo (por lo menos en una época en la que el boca a boca era lo más parecido a las redes sociales que se conocía y donde se vivía "más despacio") y esta caja es pieza fundamental para entender el viaje de Aretha. Si quieres tener algo representativo de su voz, de esta "Lady Soul" particular, olvídate de esta caja y vete a cualquiera de sus primeros discos con Atlantic. Si quieres profundizar en las raíces de una de las voces de nuestra historia, aquí tienes mucho material y muy bueno.

El contenido de la caja es el siguiente (ojo, el disco "The Tender, The Moving, The Swinging Aretha Franklin" incluye 10 temas extra que no están reflejados en la caja y que se corresponden con el disco "Soft And Beautiful" editado por Sony en 1969 y que se incluyó en un CD 2 en 1 con el citado "The Tender..." en 2005):

The Electrifying Aretha Franklin
1 You Made Me Love You
2 I Told You So
3 Rock-A-Bye Your Baby with a Dixie Melody
4 Nobody Like You
5 Exactly Like You
6 It's so Heartbreakin'
7 Rough Lover
8 Blue Holiday
9 Just for You
10 That Lucky Old Sun
11 I Surrender, Dear
12 Ac-Cent-Tchu-Ate the Positive

The Tender, The Moving, The Swinging / Soft and Beautiful
1 Don't Cry, Baby
2 Try a Little Tenderness
3 I Apologize
4 Without the One You Love
5 Look for the Silver Lining
6 I'm Sitting on Top of the World
7 Just for a Thrill
8 God Bless the Child
9 I'm Wandering Carlo
10 How Deep Is the Ocean?
11 I Don't Know You Anymore
12 Lover Come Back to Me
13 Only the Lonely
14 I Wish I Didn't Love You So
15 (Ah, The Apple Trees) When the World Was
16 Shangri-La
17 A Mother's Love
18 My Coloring Book
19 Jim
20 Friendly Persuasion (Thee I Love)
21 But Beautiful
22 People

Soul Sister
1 Until You Were Gone
2 You Made Me Love You (I Didn't Want to Do It)
3 Follow Your Heart
4 Ol' Man River
5 Sweet Bitter Love
6 A Mother's Love
7 Swanee
8 (No, No) I'm Losing You
9 Take a Look
10 Can't You Just See Me
11 Cry Like a Baby

SWALLOW THE SUN - "Plague of Butterflies": Ballet Mortuorio

Hace un tiempo ENTOMBED se embarcó en un proyecto original: confluencia de su música y danza contemporánea, lo cual acabó fructificando en su trabajo "Unreal Estate". Pues bien, algo parecido debieron de pensar los miembros de SWALLOW THE SUN cuando empezaron a componer "Plague Of Butterflies", probablemente la composición más ambiciosa en la historia de esta banda de Doom Melódico: un tema de 34 minutos que en un primer momento iba a ser utilizado como banda sonora para un ballet pero, cuando ya estaba todo listo por parte de SWALLOW THE SUN, el proyecto se anuló.

¿El resultado? La banda finlandesa decidió editar "Plague Of Butterflies" como un EP al que han añadido los cuatro temas de su primera demo, "Out Of This Gloomy Light", que ya fueron regrabados en el primer trabajo de SWALLOW THE SUN, "The Morning Never Came". Dejando a un lado estos cuatro temas extra, el núcleo de este trabajo es una soberbia composición que muestra a SWALLOW THE SUN en su momento de mejor forma. Si "Hope" podía pecar, de algo monótono y excesivamente aséptico, en "Plague Of Butterflies" se recuperan los pasajes pesados y correosos de su primer disco, pero mezclándolos con las atmósferas envolventes y las voces limpias de sus últimos trabajos.

El tema principal se divide formalmente en tres partes diferenciadas, "Losing The Sunsets", en donde se concentran la mayoría de los arpegios hipnóticos y las voces limpias, muy adecuadas para verse envueltos en esta oda de oscuridad y frialdad, "Plague Of Butterflies", donde la explosión de agresividad contrasta con el relajante inicio y SWALLOW THE SUN ejecuta algunos pasajes cercanos al Doom / Death de principios de los noventa y "Evael", cerrando el círculo en un tramo que condensa y resume todos los elementos de la composición.

La producción es más acorde al sonido de los últimos tiempos de la banda, es decir, nítida aunque algo aséptica, no obstante, pienso que los 34 minutos de "Plague Of Butterflies", cenit de la inspiración de este grupo hasta el momento, y el complemento de los mejores temas de su debut en forma de su primera demo, justifican más que de sobra la adquisición de este producto.

(Crítica publicada también en http://www.xtreemmusic.com/)

STACEY KENT - "Hushabye Mountain": Excelente RECOPILACIÓN un tanto oportunista

El que esté un poco al tanto del negocio musical sabe que sorpresas como "Hushabye Mountain" son muy comunes. Siendo STACEY KENT una de las vocalistas "revisionistas" de Jazz punteras entre los más puristas (junto a Melody Gardot, Roberta Gambarini, etc), dotada de una voz muy elegante y particular, aunque sin tomar riesgos ni en repertorio ni en interpretación, es normal que sus sellos intenten sacar tajada entre aficionados y seguidores. Después de su magnífico "Raconte Moi", donde investigaba la tradición francesa con resultados muy satisfactorios, hace muy poco Blue Note editaba un disco en directo de la Kent y Candid, su anterior sello discográfico, no ha tardado en reaccionar.

Lo que aquí tenemos es una excusa para que Candid saque tajada doble: por un lado los que aprovechando el nuevo lanzamiento en directo que hace un buen repaso retrospectivo, quieran tener el pasado de la cantante en forma de recopilatorio en estudio. Por otro lado, y aprovechando las fechas navideñas, que mejor que usar una canción como "Hushabye Mountain" para nombrar al lanzamiento. Lo que ya no es tan "honesto" por parte del sello es el tratar de hacer pasar, con nocturnidad y alevosía, este recopilatorio como un "nuevo" disco, pues hasta los medios especializados, salvo excepciones (que con el tiempo aumentarán) hablan de él como un compendio de nuevas grabaciones...

Pero dejando a un lado oportunismos de Candid y el desconcierto entre los escribanos, lo estrictamente musical contenido en este recopilatorio es un repaso esencial a la carrera de la Kent en su etapa más tierna (y si cabe, más ortodoxa). Se obvian casi por completo los discos más famosos en Candid, "Close Your Eyes" (del que sólo está el tema título) y "Let Yourself Go" y se decide incluir tres temas de cada uno de los otros tres discos en el sello, "Dreamsville", "In Love Again" y "Boy Next Door". Con esto tienes una buena forma de conocer la carrera de Stacey desde 1997 y hasta 2003, algo más de un lustro para forjar su "candidez".

Si quieres darte (o dar) un buen regalo, por un precio de risa, este recopilatorio me parece una buena opción, incluso aunque tengas los discos originales, pues aunque no hay nada nuevo, el formato digipack y la colocación de los temas te hace tener un "best of" a buen precio para cuando quieres escuchar algo de Kent pero no un disco en concreto. Eso sí, Candid, por favor, un poco más de honestidad y menos negocio...

SAMAEL - "Solar Soul": Punto y seguido

La carrera de algunas bandas es intachable. Unas veces porque mantienen una sólida trayectoria coherente desde sus inicios y sin altibajos reseñables (DISMEMBER, BOLT THROWER, OBITUARY...) y otras veces porque han sabido evolucionar sin dejar a un lado la calidad, como es el caso que me ocupa en este instante con la banda suiza SAMAEL. Siendo uno de mis grupos favoritos desde sus inicios y uno de los mejores espectáculos que he presenciado en directo, cuando los pude ver hace más de un año, la tarea de comentar este nuevo trabajo, muy esperado por mi parte desde el gran “Reign Of Light”, se me antojaba casi un regalo. Muchas incertidumbres había tras abandonar Century Media de malas maneras (el último trabajo que sacaron con ellos, posterior a “Reign Of Light” que sacó Regain Records, “Era One” no era más que una colección de refritos e ideas sueltas que la banda usó para dar por finalizado un contrato con una compañía que ya no confiaba en ellos), pero el contrato con Nuclear Blast y la noticia de este nuevo disco, borraba las dudas afortunadamente.

¡Y menudo resultado! Probablemente sea el disco menos arriesgado de la banda, en el sentido de que continúa los parámetros básicos de “Reign Of Light”, pero la calidad y la madurez alcanzada es de las más altas de su larga historia. Y eso que SAMAEL ha sabido siempre mutar disco tras disco, llevando su sonido hacia otras dimensiones. Desde sus inicios de crudo Black – Death con mucha influencia de CELTIC FROST, con dos discos imprescindibles como “Worship Him” o el mórbido “Blood Ritual”, pasando por el experimental y atmosférico “Ceremony Of Opposites”, el punto de inflexión que dio su paso a los sonidos industriales de “Passage”, el caótico desenfreno de “Eternal”, el mecánico y pegadizo “Reign Of Light”... todos los discos de la banda suiza han sabido ser distintos, protagonistas de nuevas texturas, nuevos sonidos, pero siempre con el grado de calidad que se espera en esta banda. En consecuencia, “Solar Soul” tenía a priori un duro papel que ha pasado con creces, a pesar de que su escucha no sea tan arriesgada aparentemente.

Se podría considerar a “Solar Soul” como un compendio de los sonidos de SAMAEL desde “Passage”, con una base accesible y pegadiza ya sentada en “Reign Of Light”. ¿Estancamiento?, desde mi punto de vista todo lo contrario. SAMAEL ha retomado su carrera madurando su propuesta y llevándola un poco más lejos, aunque el resultado no sea tan rupturista. Así, “Solar Soul” trae a la superficie multitud de melodías, detalles, estructuras que alcanzan casi la perfección y que vienen a cerrar de manera sobresaliente un camino iniciado hace ya mucho tiempo en la banda: mezclar el Metal Extremo, la oscuridad y la atmósfera, con un elemento industrial casi futurístico, que es la nota característica de la banda. Un trabajo accesible si eres aficionado a estos sonidos, pero que si vas un poco más lejos y no te quedas en la superficie, te ofrece multitud de elementos que ganan escucha tras escucha, gracias entre otras cosas, a un gran sonido continuista con el de “Reign Of Light”, aunque con mayor protagonismo en los teclados, lo cual, al ser un disco más variado y colorista se agradece para no perderse ningún detalle.

El disco empieza fuerte con un tema sencillo pero efectivo, llamado igual que el trabajo, “Solar Soul”, y que se queda grabado desde el primer instante gracias a su estribillo y a las melodías creadas por el grupo. Tema que será imprescindible en los directos, donde ya imagino a Xy dando botes entre sus teclados y su batería seccionada ante el delirio del público, algo que también pasaría si incluyen en su set-list “Promised Land”, corte más variado y lleno de cambios, pero sin perder el gusto por hacer fácil lo difícil. A estas alturas del disco uno se da cuenta de que estamos ante el trabajo más maduro de SAMAEL, porque todos los elementos que ha mezclado la banda desde “Passage” están recogidos en “Solar Soul”, pero consiguiendo un resultado redondo y en donde no falta ni sobra nada. Cada tema tiene su propio sonido y en conjunto todo suena muy sólido y encajado a la perfección, la fórmula mágica para que un disco rebose calidad.

Algunos cortes, incluso aunque la media de todos es muy alta, tienen un toque particular que los han convertido  en mis favoritos del trabajo, pero esto es una impresión totalmente subjetiva, porque seguro que los que escuchen el disco tendrán otras preferencias. Personalmente me encanta el sonido épico y sinfónico alcanzado en “On The Rise”, tema que podría ser una mezcla entre la majestuosidad de “Ceremony Of Opposites” y el camino tomado en “Passage”. También me han encandilado las guitarras de “Suspended Time”, corte muy mecánico aparentemente, pero donde los riffs y los cambios de ritmo dibujan círculos que hipnotizan a cualquiera que los escuche. También hipnóticas son las melodías de “Valkyries´ New Ride”, un tema que hace honor a su nombre gracias a sus sonidos épicos, similares a los de “On The Rise”, pero alcanzando un nivel de excitación mayor gracias a sus pegadizos ritmos. Finalmente destaco la ambientación arábiga de “Quasar Waves”, algo novedoso en la música de SAMAEL, pero que parece estar hecho a la medida de su estilo, pues no desentona en absoluto y es uno de los mejores cortes del disco.

En general, “Solar Soul” es un disco que puede afrontarse de muy diversas maneras con resultados satisfactorios. Puede escucharse de manera ligera y sin muchas exigencias, logrando que gracias a su calidad acabes tarareando algunos estribillos tras su escucha. Puede afrontarse de manera más atenta y minuciosa, con lo que acabarás apreciando multitud de arreglos y efectos imperceptibles en una escucha pasajera, tanto vía teclados (recreando atmósferas en todos los temas, además de los indispensables sonidos industriales de aire marcial), como sobre todo por las guitarras, que en algunos temas se doblan en varias líneas que en conjunto suenan como una sola, pero que encierran muchos matices por separado. Finalmente puede realizarse una doble escucha, reproduciendo aleatoriamente los temas en la segunda de ellas, dejando el disco una sensación global muy distinta, debido a la personalidad de unos temas frente a otros, no siendo el conjunto único e indivisible.

Pocas veces un grupo puede presumir de tener una trayectoria tan variada y de tan buenos resultados, consiguiendo alcanzar un sonido propio y personal, gracias en parte a la labor de Xy en los teclados, programaciones y percusión y a la personal y única voz de Vorph. Otros en su lugar habrían caído en la comercialidad barata, pero SAMAEL han conseguido sonar accesibles, pegadizos y a la vez mantener su calidad y el riesgo de su propuesta. “Solar Soul” es un paso más en su dilatada carrera, al que no le pongo más nota porque sino en el futuro me quedaré sin escala de valores, y a buen seguro que los suizos no fallarán.

(Crítica publicada también en http://www.rocktotal.com/)