martes, 30 de septiembre de 2014

THE SEED - "From Nowhere To No One": La semilla de los noventa + Entrevista


Espero que el título de este trabajo no sea una declaración de intenciones por parte de los madrileños THE SEED: autoeditarse un disco es una tarea complicada, aunque alguno piense que en el mundo de hoy en día está tirado (mucha culpa de esto lo tiene el que clickando en un botón uno tenga acceso a contenidos que no es capaz de apreciar en su justa medida de esfuerzo empleado para conseguirlos), por eso supongo que aunque partan de “la nada” (que no es el caso), al menos si quieran dirigirse a “alguien”. El caso es que “"From Nowhere To No One"” es la primera referencia que personalmente escucho de THE SEED, aunque su nombre ya circulaba por mi subconsciente desde hace bastante, pues al fin y al cabo, no hay tanta gente en la escena local, sea cual sea el estilo, y al final los grupos te acaban sonando, aunque no te hayas puesto detenidamente a escucharlos. Y el resultado es altamente satisfactorio, por compacto, por sonido y porque combina influencias que hace unos años podrían decirse previsibles, pero ahora es casi culto.

Se puede definir a THE SEED como Post-Thrash, si es que tal estilo alguna vez llegó a existir o no es más que una forma de llevar a otro terreno todos los cambios que los noventa trajeron al mundo del Metal y en especial a lo que había sido su corriente más fogosa hasta que METALLICA una mañana se levantó y decidió cortarse la melena y SLAYER empezó a desvariar, mientras otros como PANTERA o MACHINE HEAD sacaban sus frutos de los nuevos gustos, y muchos adolescentes empezaban a preparar la siguiente “nueva moda” que sería denostada por los puristas y ahora se mira hasta con nostalgia (la música esta hecha a golpe de idas y venidas, eso está claro). A estas referencias, THE SEED añaden una fuerza mucho más Thrash que “post”, sobre todo provenientes de un Chuck Billy y unos TESTAMENT de segunda hornada muy presentes en particular en la primera mitad del trabajo, pero en general uno puede tener una idea partiendo de estas premisas. Dicho esto, cabe preguntarse por los resultados: pues es aquí donde se nota que THE SEED se han sacado por sus propios medios "“From Nowhere To No One"”. ¿Por qué lo digo? porque las ganas y el “no compromiso” de este tipo de discos, cuando se hace de manera profesional como es el caso, acaban barriendo cualquier merma estilística o formal. Uno se contagia por el poderío y es lo que acaba consiguiendo THE SEED.

Gracias a un sonido al cual el adjetivo “poderoso” se le queda corto, el peso rítmico de THE SEED es abrumador. Las guitarras, aunque con más detalles de los que uno se pueda pensar en forma de algún sólo y efecto (concentrándose en la más heredera del sonido noventero, “"Murdering Post”"), son muros de hormigón armado y el resto de la sección rítmica (en la que hasta no hace mucho Furni, ex batería de AVULSED, andaba implicado) es pura adrenalina (especialmente me tiene ensimismado la sureña “The Yellow Path”, una de las que más gustará a los seguidores de PANTERA), pero esto no resta protagonismo a una voz que ha cogido lo mejor de las tres referencias fundamentales en la música de THE SEED, sin por ello sonar a ninguna en particular. Y en cuanto a temas hay que felicitar a THE SEED por conseguir un disco variado en lo más amplio de la extensión de esta palabra. Sólo así puedes encajar cosas como los bombazos de apertura: “"Master Of Men"”, "“Antihuman Brigade"” (con un breve cameo de Dave Rotten en los últimos segundos del tema) y “"Dead Seed"” (en este caso con un inicio vacilante y un estribillo atípico, pero igual de efectivo y cargado de fuerza), cortes acelerados, contundentes y desmelenados, y al final “"Bag Of Fools"”, con el ya citado “"The Yellow Path”", su continuación más clara en “"By My Own"” o sobre todo el larguísimo “"Remorse"”, de inicio muy “metallico noventero” y donde la voz limpia se convierte en elemento de complemento a una variada estructura, cargada de efectos y claroscuros, con el mejor solo de todo el trabajo y una intensidad creciente.

Por todo lo anterior, no se puede decir que THE SEED sea un grupo original, pero personalidad hay, tanto en la forma de presentar su música, como sobre todo en la combinación de referencias que rondan alrededor del grupo. Pero insisto una vez más, la notabilidad de este trabajo está en las ganas que derrocha y que hace que, te guste en mayor o menor medida el estilo o la música, no puedas reprochar a THE SEED que ha hecho lo que ha querido y con la fuerza de los que no han perdido la ilusión. “"From Nowhere To No One"” debería llamarse “From Nowhere To Everyone”, porque este trabajo se merece una escucha, o unas cuantas…


ENTREVISTA A THE SEED PARA XTREEM MUSIC



La semilla de la música puede ser de las que más cuesta hacer germinar. Muchas frustraciones, muchos esfuerzos y no siempre recompensas adecuadas, lo que lleva a muchos a tirar la toalla. Sin embargo THE SEED ha conseguido que los primeros brotes ya aparezcan. Con su primer disco, “From Nowhere To No One”, el grupo madrileño heredero del sonido de los noventa, ha querido dejar claro que no están en esto por casualidad, y que empezando por ellos mismos, confían en el crecimiento de su propuesta. Pese a los esfuerzos de la autoedición, y el tener que recorrer dos veces y cuesta arriba lo que otros hacen de pasada, THE SEED comienza un viaje fraguado a golpe de metal oxidado, y su debut es prueba fehaciente de que las cosas, si se hacen bien, pueden perdurar. Tras la escucha de su trabajo, quise completar la imagen de THE SEED, y me puse en contacto con el grupo. El resultado es esta entrevista a cuatro manos que confirma la ilusión y la cabeza bien amueblada que ya se podía intuir. Citando a Koko: Lo único que hacemos es música, y de la mejor forma que sabemos.

THE SEED. Pregunta tópica para empezar ¿qué semilla queréis plantar con el grupo? ¿Qué sensaciones habéis tenido cuando por fin, veis editado el fruto de esa semilla, “From Nowhere To No One”? ¿Le haréis fotos cuando lo veáis en alguna tienda?

Sergio: Bueno no pretendemos sembrar nada, solamente hacer llegar nuestra música al mayor número de personas posible, y conseguir que alguien diga: este disco me hace mover la cabeza, voy a ir a verles tocar.

Han sido varios meses de trabajo intenso con el disco, ya que lo hemos producido, grabado, mezclado y masterizado nosotros mismos en nuestro local, y como te imaginarás es bastante complicado hacer una grabación decente fuera de un estudio. La sensación es de euforia, alivio y orgullo a la vez porque no esperábamos un resultado tan bueno.

(Risas) Bueno no se descartan unas fotillos haciendo el gamberro en alguna tienda cuando lo veamos, la verdad es que estamos bastante ilusionados con el tema.


Lo comenté en la reseña que hice del disco, y aprovecho para preguntarlo ahora: “From Nowhere To No One”… Tomárselo al pie de la letra es ser un poco pesimista con este primer disco ¿no? ¿Tan pocas expectativas tenéis de llegar a la gente? ¿Qué significa el título realmente?

Koko: La cosa es que desde que empezamos este grupo todo el mundo que nos ha escuchado nos ha repetido constantemente que les gusta el sonido que tenemos pero que el tipo de música que hacemos corresponde a un estilo muerto y que no se puede “triunfar” haciendo esto, por lo que el tanto el título (From Nowhere To No One) como la portada (metal oxidado) y el hecho de auto-editarlo vienen a decir que nos la pela toda esta gente y que simplemente hacemos la música que más nos gusta y de la manera que más nos gusta y a quien le guste pues de puta madre y al que no…

Sergio: Bueno, la verdad es que no es exactamente eso, no es que no tengamos expectativas, sino que hemos hecho un disco en nuestro local, es decir, no es ningún lugar en donde grabe o quiera grabar ninguna banda en general (más bien esta en mitad de ninguna parte, a las afueras de un polígono de la periferia de Madrid), y a su vez hemos grabado exactamente el disco que nosotros queríamos, no está influido por lo que dijera ningún productor o nadie que fuera buscando un beneficio y que no tuviera demasiado en cuenta nuestras ideas sobre el álbum.

Realmente creemos que las canciones son buenas (las hay mejores, claro, pero también mucho peores) y que va a tener buena acogida entre la gente. Si no tuviéramos al menos una pequeña esperanza de que esto vaya a gustar a alguien o vaya a salir adelante, no habría merecido la pena todo el esfuerzo que ha supuesto para nosotros toda la producción de este CD, han sido demasiadas horas como para que todo quede desde un principio en un CD archivado en nuestras casas que no vaya a moverse.


Escuchar THE SEED es coger una base Thrash y llenarlo de los devaneos de su evolución en los noventa (especialmente en Murdering Post). Un estilo que para muchos fue el principio del fin de los gloriosos ochenta, y que puso el germen de corrientes bastante populares en la segunda mitad de los noventa. Ahora ese estilo es mirado con nostalgia y grupos como vosotros o sin irnos muy lejos INFERNOISE sois la prueba. ¿A qué crees que se debe esto? ¿Qué crees que aportó toda esa época a la historia del Metal?

Sergio: La verdad es que para nosotros los 90 fueron lo mas en cuanto a música, crecimos escuchando a PANTERA, AT THE GATES, METALLICA, MACHINE HEAD, SEPULTURA, SLAYER, WHITE ZOMBIE… digamos que es lo que llevamos más dentro. No sé, es como que si hubiéramos crecido en los 70, seguramente no haríamos Thrash, sino puro rock de la época. Hay millones de grupos nuevos muy buenos y mejores técnicamente que los de los noventa, pero ponemos el Slaughter of the Soul”de AT THE GATES o The More Things Change de MACHINE HEAD (por decir un par de ejemplos) y se despiertan en nosotros sensaciones que grupos nuevos de ahora no son capaces de transmitirnos, lo que no significa que no sean buenos, pero la música te llega de diferente manera a los 15-16 años que a los 28, por lo menos es nuestro caso.

El Metal de los noventa dio una vuelta de tuerca más al de los 80, se incluyeron aspectos que antes eran impensables, también las mejoras en la calidad de las producciones han contribuido bastante, ¿no? Historia…bueno al igual que Hendrix en los 70 o Freddy Mercury, en los 90 tenemos a Dimebag Darrell, James Hetfield, Dave Lombardo, Kerry King… son nombres que estarán ahí siempre.



MACHINE HEAD, PANTERA… se dan la mano con SLAYER en su segunda etapa y un puntito a TESTAMENT (época final) que también os queda muy bien, sobre todo en los temas más cañeros. ¿Qué añadirías a esta lista? ¿Cuál consideras que es verdaderamente vuestra aportación personal? Particularmente creo que es la forma de combinarlo todo, pues nunca sonáis a clones de ninguno, ¿cuál es vuestra opinión?

Sergio: En esa lista no puede faltar THE HAUNTED, y bueno también hay un poquito de otros muchos, como DOWN, CANNIBAL CORPSE, SEPULTURA, AT THE GATES…, no es que nos hayamos centrado en 3 grupos e intentemos hacer algo igual, sino que buscamos más bien hacer canciones que evoquen al Metal que más conocemos.
Tal vez el secreto de no sonar a ninguno en concreto, es que cada miembro del grupo, aparte de los grupos que nos gustan a todos por igual, tenemos otros gustos bastante distintos y quizá nuestra manera de componer.

Los temas no los hacemos entre todos por sistema, sino que si alguien tiene una idea, la desarrolla por su cuenta y llega al local como un tema “terminado” y cutremente grabado, luego el resto del grupo trabaja con esa idea, ya sea para mantenerla o desarrollarla más. Si nos ponemos todos a componer un mismo tema, cada uno quiere aportar su toque en todos los temas, y eso hace que al final todas las canciones tengan estructuras parecidas y tengan todas las influencias a la vez.

Koko Básicamente cuando cada uno de nosotros compone un tema lo hace pensando en que es lo que gustaría escuchar cuando se compra el último disco de su grupo favorito, yo creo que el hecho de no estar pensando en un estilo o en un grupo en particular es lo que hace que no sonemos a clones de nadie, simplemente hacemos la música que más nos gusta, pero como es evidente siempre te tira más un género que otro.

La autoedición no siempre es una tarea reconfortante. El esfuerzo ya de por sí grande de dar vida a un disco se ve redoblado en su promoción y distribución. ¿Acaba mereciendo la pena incluso hoy en día, en la era de “mi disco duro es más grande que el tuyo” o “tengo 13.000 canciones en mi ei-poood? ¿Se acabará convirtiendo la música en un elemento de freakismo para coleccionistas sin futuro económico?

Sergio: La autoedición ha sido una manera de no estancar el lanzamiento del disco, porque aunque hay muchísimos sellos, al final muy pocos contestan a las solicitudes, o tardan mucho. Como ya estaba todo hecho, nos hemos ahorrado la pasta del estudio y teníamos muchas ganas de que esto viera la luz, por lo que también nos hemos animado con la edición y la promoción, que en su mayor parte la estamos haciendo nosotros. Es trabajo duro, pero si al final conseguimos algo importante por nosotros mismos, la satisfacción será mayor que si has dejado todo en manos de profesionales del sector.

Digamos que yo estoy en mi trabajo y no puedo evitar pensar en THE SEED, temas nuevos, logotipos, carteles, web, ensayos, que si hoy envío esto aquí, y allí, tengo que hablar con el programa de radio tal para ver si les apetece que les mande un CD, mañana actualizamos la web con esto o lo otro… es una implicación total en algo que nos apasiona, la verdad es que si merece la pena, aunque sólo sea porque algo que llevas haciendo todos los días 12 o 15 años no te cansa y lo que es mejor, cada vez te gusta más.

Bueno, el mundo está lleno de gilipollas que hacen cosas solo por que los demás las hacen, y si algo mueve al ser humano por norma general es la envidia, así que si tú tienes 1000 discos yo quiero tener 2000 aunque sean una puta mierda y ni siquiera los vaya a escuchar. Creo que la gente que sigue comprando música es porque realmente la escucha y valora tener un disco al completo, con su diseño, su libreto, que leerán detenidamente, lo escuchan una y otra vez hasta que se les queda grabado en la memoria y disfrutan escuchando un tema que han escuchado 100 veces. Hoy en día cuando alguien escucha un tema comercial de hace 2 meses, la mayoría dice: “buahhh si eso es de hace mogollón de tiempo, estas anticuado”; aunque lo que deberían decir es: “la música no me transmite nada, escucho canciones que no se apreciar y por lo general son basura, así que las escucho 3 veces y las almaceno en mi i-pod para poder decir que lo tengo todo en música (Risas).


Y no contentos con ese esfuerzo, los tenéis cuadrados e incluís temas como Remorse que además fue de lo primero que se pudo escuchar en vuestro MySpace del disco. ¿No tenéis aprecio por vuestros oyentes no? ¿No sería más fácil hacer canciones de tres minutos?

Sergio: (Carcajada) La verdad es que nos tenía un poco rayados la duración de Remorse, pero cuando alguien venía al local de ensayo a saludarnos o escuchar qué tal iban las canciones, la inmensa mayoría decía: “este tema esta súper currado me encanta. No, no, no lo acortéis, así esta de puta madre…” así que hemos hecho caso a los colegas, músicos vecinos y demás gente que la escuchó antes de grabarla.

Koko: De hecho estamos un poco flipados con la acogida que está teniendo Remorse, al ser un canción tan larga con partes melódicas con una letra también un poco más ñoña pensábamos que era de las canciones que menos iba a gustar, de hecho nunca la tocábamos en directo, pero resulta que a la gente le ha gustado mucho y se puede decir que es la canción del disco sobre la que más comentarios positivos nos han hecho.

Sergio: ¿Fácil? (Risas), ¡claro que hacer canciones de 3 minutos es mas fácil!, y el Pop también es más fácil de tocar (por norma general), pero cuando tienes que tocar ese tema de 3 minutos que es mas fácil 50 veces en un mes, acabas hasta los huevos de tocarlo, pero con temas así siempre hay algún detalle que no tienes bien pulido, y además suponen un reto mucho mayor en cuanto a composición y técnica, con lo que te hacen evolucionar más que si te dedicas a hacer temas cortos en los que no puedes introducir determinados tipos de pasajes o partes, digamos que pasas de tener estribillo y estrofa a tener 2 o 3 estrofas distintas, estribillo, puentes, intros…

Koko: La cosa es que cuando te pones a componer un tema, llega un momento en el que ya no puedes terminarlo cuando tú quieres, si no que el tema toma vida propia y termina cuando él decide (Risas), eso es lo que pasó con “Remorse”.


Bromas aparte, temas como “Remorse”, “The Yellow Path” y “Bag Of Fools” muestran la cara más sureña post thrashera (ahí es nada lo que me he inventado) de vuestra música, contrastando bastante con Master Of Men”o Antihuman Brigade, más directos y contundentes. ¿En qué faceta os sentís más cómodos componiendo-tocando? ¿Son complementarias? Lo cierto es que así lográis un equilibrio en el trabajo.

Koko: Componer y tocar yo creo que son cosas muy diferentes pero que de alguna manera van unidas de la mano, cuando compones lo haces para tocar y cuando estas tocando estás deseando componer cosas nuevas, es como una relación causa-efecto, pero la verdad es que las dos facetas nos hacen sentir muy cómodos.

Una de las cosas que más nos gusta del disco, es que los temas aunque no se parecen entre sí, es evidente que cuando escuchas alguno suena a THE SEED, creo que es algo que hemos conseguido simplemente haciendo lo que más nos gustaba o nos apetecía escuchar en cada momento y con sus circunstancias, nunca nos hemos puesto en plan este tema es muy lento, o no me suena tan cañero como…. Lo único que hacemos es música, y de la mejor forma que sabemos.

Sergio: Bueno los temas van saliendo y no eliminamos ninguna canción solo porque sea lenta o tenga muchas partes limpias o que cada canción nueva tenga que ser necesariamente mas rápida y contundente que la anterior, no consideramos la música como una competición de destreza, tampoco es que seamos unos virtuosos, simplemente nos defendemos como podemos. Hay momentos en los que apetece tocar algo más suave por que estas de bajón o simplemente feliz y otros en los que apetece destruir el mundo. No podemos estar encabronados todo el día, (Risas).

Creemos que una hora de tralla absoluta nos limita a un público muy concreto, pero si intercalas canciones mas tranquis puedes llegar a más oídos; además no sólo nos gusta el Metal…



He visto en el MySpace del grupo que tenéis abierta una encuesta sobre los temas del disco. Por estar muy reciente puede que aún no tengáis muchos resultados, pero alguno que haya escuchado los temas del espacio ha podido ya dar su opinión. Por lo que veo es “Dead Seed” la que tiene un poco de ventaja, curioso porque es uno de los temas más variados, cañero y al mismo tiempo groovie ¿Creéis que esa es la causa de la elección? ¿Coincide con vuestra opinión? ¿Qué tema consideráis el más representativo del disco?

Sergio: Dead Seed es un poco la canción que nos define como banda, nuestro tema insignia. De ella viene un poco el nombre del grupo y tiene (creemos) un poco de todas nuestras influencias, y quizás sea el tema más representativo del disco, pero cada uno tenemos nuestro favorito.

Koko: Realmente es complicado elegir un tema representativo del disco, ni siquiera creo que te pudiera decir mi tema favorito del disco, te podría decir mis doce favoritos (Risas), pero Dead Seed”por estructura, letra y sonido tal vez sí sea el tema más representativo de THE SEED.


Contundencia, fuerza sonora, crudeza… son elementos que precisaban un sonido cañón y una portada muralla. ¡Ea! Ahí están ambas cosas. ¿Es THE SEED un muro infranqueable y algo oxidado como la portada? ¿Cómo definirías el sonido conseguido a alguien que no os haya escuchado?
Sergio: La contundencia, la temática de las letras, el diseño de la portada y demás detalles, intentan recrear la visión decadente que tenemos sobre la realidad actual del mundo.
Creo que no, no estamos oxidados (al menos todavía), pero si vemos el mundo que nos rodea un poco oxidado. Si somos un muro infranqueable… bueno en cierta manera sí, nadie va a arrebatarnos o manipular nuestra rabia, nuestro esfuerzo, ilusión o nuestros principios.

No vamos a decir que nuestro sonido es único, porque como habrás podido comprobar… todo lo que hacemos ya está inventado desde hace años, pero sí podemos decir que somos fieles a nosotros mismos, auténticos; no vamos a cambiar nuestro estilo por modas o aumentar ventas. Se podría decir que THE SEED es Metal rabioso con dos cojones y algún toque de melancolía.

Koko: El metal oxidado de la portada representa a la perfección lo que mucha gente opina de la música que hacemos, así que de alguna forma se podría decir que hacemos Metal oxidado, en inglés sería como oxid metal o algo así (Carcajada).


Hablando antes de Antihuman Brigade, al final del corte Dave Rotten de AVULSED hace un cameo¿Cómo fue? pasaba por ahí y dijo, “ey chicos, no sé ya que hacer para cantar y necesito que alguien me dé un micro ya, ¿me dejáis dar un par de berridos en vuestro disco?¿En el próximo disco de AVULSED haréis una versión de PANTERA en donde os fusionaréis THE SEED y AVULSED?

Sergio: Bueno durante la grabación del disco nuestro batería era Furni (ex AVULSED), y como tienen buen rollo y siguen en contacto, se nos ocurrió que sería la hostia que Dave Rotten colaborara en un tema; a todos nos ha gustado siempre AVULSED, y era como ponerle un broche de oro al disco. A Dave le pareció buena idea y bueno pues se pasó un rato por nuestro local y grabó una voces. Nos hubiera gustado que hubiera sido una colaboración mas extensa en el tema, pero tampoco queríamos abusar, y en un principio la idea era esa, antes incluso de que él lo supiera nosotros ya imaginábamos su voz justo donde está. Fue un gran detalle por su parte.

(Risas) Bueno ojalá AVULSED contara con alguno de nosotros para hacer algo, sería un halago que un grupo con tanta experiencia y tablas pensara precisamente en nosotros, con la de grupos que deben de conocer… pero la verdad es que estaría muy bien. Las colaboraciones son divertidas.


Y ahora que menciono a AVULSED, hasta no hace mucho Furni, antiguo batería del grupo, era el encargado de las baquetas en THE SEED. Sin embargo lo ha tenido que dejar por una lesión de espalda. ¿La edad no perdona? y ya más en serio ¿Será temporalmente o significa que dejará la música o al menos ese instrumento de manera definitiva?

Sergio: Desgraciadamente nos hemos cargado a Furni, le hemos petao (Risas). Tras varios meses de intentar recuperarse ha decidido dejar la batería a un lado y… no sé que tendrá en ahora mente, quizás coja la guitarra de nuevo y siga dando caña por otros lados. De cualquier modo le deseamos lo mejor.


Sin embargo Furni grabó From Nowhere To No One ¿no? ¿Cómo encontrasteis a Acaymo? ¿Afrontaréis con esta formación los directos?

Sergio: Sí, él estuvo en la grabación del disco y fue cuando estábamos masterizando cuando decidió dejar la banda. El ya no tenía mucha esperanza en recuperarse por completo y bueno, tampoco es plan de ponerle una navaja en el cuello y decirle toca o muere ¿no? (Risas)

Tras millones de anuncios, mails y varias pruebas con baterías, dimos con Acaymo, que estaba buscando proyectos y bueno, nos demostró cómo se toca Metal con un par de cojones en una hora escasa de prueba y pasó a formar parte del grupo por unanimidad.
Unas semanas antes de que Acaymo entrara en THE SEED, Samuel entró en el grupo como segundo guitarra, y… bueno, ahora somos cuatro para repartir cera por todos aquellos escenarios que se nos pongan a tiro.


Y ya puestos, ¿qué os espera en el futuro inmediato, en lo que a conciertos se refiere? ¿Tenéis alguna cosa ya contratada por ahí?

Sergio: De momento no tenemos nada cerrado, pero muchas cosas en el aire, nuestra idea es presentar el disco en marzo como muy tarde y empezar a tocar sin parar allá donde podamos, al menos durante unos meses, porque tenemos muchas ganas. Entre la lesión de Furni, el disco y buscar un nuevo batería… hace un año que no tocamos en directo… hay muchas ganas de dar cera.


En vuestra, de momento no muy extensa lista de actuaciones en directo, ¿Cómo reacciona la gente? ¿Conseguís congregar nuevos acólitos a la causa? ¿Os vais corriendo al puesto de merchandising, si lo hay, y os apresuráis a sacar vuestras demos –y ahora vuestro debut- para que la gente, con la euforia del momento, no se olvide de llevarse alguna? ¿Habéis intercambiado alguna opinión así?

Sergio: Bueno la verdad es que por la época de nuestros últimos conciertos (hace ya un larguísimo año) no teníamos merchandising ni CDs editados, supongo que ahora habrá que montar un tenderete, pero no vamos pensando en acabar de tocar para ir a vender CDs a todo el que podamos. Más bien somos propensos a, según acabamos de tocar, recoger un poquito el escenario y entablar un poco de relación con la gente que ha venido a vernos y con los grupos con los que compartimos escenarios. Que sobre todo haya buen ambiente y lo pasemos bien antes, durante y después de tocar, sin eso… tocar no merecería la pena.


Eso sí, ¡cómo se os ocurre tocar en la Superbowl! Sólo he estado una vez en esa sala, pero me pareció raquítica y terrible, aunque en Madrid uno se encuentra cada cosa… ¿Pensáis que estamos faltos en la capital de sitios donde poder tocar sin que tengas que hipotecar tu casa o tener detrás a la Columbia o a la Universal para poder llenar? ¿Habéis tocado en algún sitio donde dijerais: de aquí salimos ardiendo si alguien se deja un pitillo encendido?

Sergio: ¡¡¡SI!!! ¡tienes toda la razón! es la peor sala en la que hemos tocado nunca, y personalmente fue el concierto en el que peor lo hemos pasado nunca también, pero fue un compromiso… una noche llamaron a Furni los CRYING BLOOD pidiéndonos por favor que si podíamos tocar con ellos al día siguiente en la sala Superbowl, que se les había caído el grupo con el que tocaban y… bueno no dimos nuestro mejor concierto, pero cojones le echamos a todo, así que fuimos para allá sin nada preparado, hicimos la lista de temas unas horas antes, y tocamos con los amplis y la batería de CRYING BLOOD, que se ofrecieron a ponerlo todo ellos, sin escuchar absolutamente nada por monitores… un caos. CRYING BLOOD querían abrir la noche, y como era su bolo, pues no tuvimos problemas de ningún tipo… claro, pero te imaginaras que en cuanto a cabo su actuación, la sala que estaba absolutamente hasta arriba se vació en cuestión de 10 minutos y se quedaron los 4 gatos que nos había dado tiempo a avisar de que tocábamos. Asi que tocamos ante 10 personas, sin oírnos en absoluto y sin tener preparado nada. Si a alguien le gusto ese concierto… le pedimos que nos venga a ver otra vez, que prometemos que lo haremos mejor. (Carcajada)

¿Salir ardiendo? Bueno el mítico Laboratorio de Malasaña yo creo que es el más claro ejemplo, aunque con THE SEED no hemos tocado nunca allí (no sé siquiera si sigue existiendo).


Cambiando de tema, viendo vuestra lista de influencias, además de las evidentes, uno se encuentra con cosas muy variadas, pero me ha sorprendido la presencia de NICKELBACK, una banda que tuvo que cargar con la cruz de “grupo del momento” por la única canción suya que todo adolescente de hace casi 10 años se sabía, How You Remind Me. ¿Os gustan realmente? ¿Pensáis que fueron infravalorados? ¿Qué grupos coetáneos suyos salvaríais de la quema también?

Koko: Bueno mucho me temo que eso es cosa mía (Risas). Fuera de coña, la cosa es que me encanta el Grunge sobre todo grupos como SOUNDGARDEN, PEARL JAM, ALICE IN CHAINS, NIRVANA, etc… y en un patético intento de encontrar algún grupo actual que me recordara algo a lo que hacía esta gente en los noventa vi un vídeo en el YouTube en el que salía Jerry Cantrell (ALICE IN CHAINS) tocando en un concierto con NICKELBACK, y a partir de ahí me empecé a interesar por ellos. La verdad es que tienen un disco “The Long Road” que me parece bastante interesante junto con algún otro pero el rollito que llevan de niños pijos que se follan todo lo que se mueve mientras cantan canciones en plan “te echo mucho de menos y te quiero…” me pone realmente enfermo. En el caso de NICKELBACK soy el único del grupo al que le gustan, pero otros grupos como GODSMACK y por supuesto ALICE IN CHAINS nos gustan a todos.


Y ya para cerrar. Mañana viene Phil Anselmo a Madrid y os llama al móvil: necesito a un guitarrista para mi nuevo proyecto, banda o lo que sea. He escuchado a THE SEED y quiero que Koko se venga conmigo, pero tendréis que disolver la banda. ¿Sería el fin de THE SEED? ¿Le diríais que no a Anselmo? ¿A qué viene esta pregunta?…

Sergio: Lo primero que se me viene a la mente que le diría es: “¿Pero quién cojones te ha dado este número? Joder no me llames al móvil desde tu tierra que te sale por un pico y encima me cobran a mí la mitad.” (Risas)

Bromas aparte. No sé, lo primero es que eso no creo que vaya a suceder, y lo segundo le diríamos: “¡ahh! muy bonito tu puedes tener 50 proyectos a la vez pero Koko tiene que estar solo contigo ¿tronco?, eres un poco cachondo tú, ¿no?”

La decisión seria de Koko, nosotros no podemos retener a alguien contra su voluntad, aunque nos jodiera mogollón que Koko se fuera con Anselmo. La verdad es que esperamos que no se le ocurra llamarnos para eso, sería un gran dilema para Koko, seguro, y un putadón para nosotros.

Koko: Le diría: gracias Felipe, pero no gracias. THE SEED representa la música que adoramos y que queremos hacer, y eso creo que ahora mismo no lo encontraría en ningún otro grupo.


Muchas gracias por vuestras respuestas. Espero que “From Nowhere to No One” acabe cambiando su título y sea escuchado por mucha gente, mientras tanto, este espacio es todo vuestro para que podáis sorber el seso a mucha gente y así compre vuestro disco. ¡Suerte!


Gracias a ti y a Xtreem Music por vuestro tiempo y apoyo, esperamos verte por algún directo para que nos tomemos algo y nos comentes que te parecemos en vivo y en directo, desde luego estás invitado. ¡Hasta pronto!


(Crítica y entrevista publicadas también en: http://www.xtreemmusic.com)

jueves, 25 de septiembre de 2014

NIAGARA - "Niagara, S.U.B. & Afire": Al ritmo de los tambores


Una imagen vale más que mil palabras. Eso debió de pensar KLAUS WEISS, batería alemán de Jazz, muy reputado por sus colaboraciones con Johnny Griffin o sobre todo Klaus Doldinger, cuando en 1971 se lanzó en solitario con el proyecto NIAGARA y su disco homónimo. Seguramente pocas personas podían adivinar lo que escondía aquel vinilo, simplemente se sintieron atraídos por el pecho desnudo sobre el que el agua resbala que aparece en su portada, controvertida en su momento, dicho sea de paso. Lo que puede parecer una simple estratagema de marketing, está en realidad muy relacionado con la música que WEISS quiso exponer en NIAGARA, como más adelante comentaré. Junto a los también baterías alemanes, Udo Lindenberg y Daniel Fichelscher, y una serie de colaboradores en la percusión procedentes de Europa y América a partes iguales, WEISS se convirtió en pionero de una forma de exponer la música que sin quererlo, casi a la vez y al otro lado del charco, otro batería de Jazz MAX ROACH también estaba barruntando con su proyecto M'BOOM: un grupo exclusivamente formado por percusionistas.

El concepto podía parecer arriesgado, más allá de las obras clásicas contemporáneas pensadas para percusión. WEISS utilizó todo el bagaje a su alcance y quiso mezclar Jazz, Rock y World Music a partes iguales, partiendo de un contexto improvisatorio en donde la columna vertebral rítmica sigue un camino y el desarrollo se expande a base de polirritmos y pasajes de intensidad variable, salidos de la propia energía interpretativa de los músicos. El férreo devenir del compás propio de una banda de Kraut Rock, se llena así de paisajes y colores australes y africanos. Es aquí donde la portada del disco adquiere todo su significado: la música se desnuda y vuelve a sus orígenes africanos, cuando la percusión y la voz eran los instrumentos fundamentales (en este caso sin voz), siguiendo los latidos del corazón, más que los de la cabeza. Muy poético puede parecer, pero creo que WEISS acertó de lleno tanto en el concepto, como en la forma de exponerlo. Así “Niágara” se divide en dos temas, que no dejan de ser dos suites diferenciadas por meros motivos logísticos (el vinilo hay que darle la vuelta en algún momento) y porque los ritmos centrales que conducen cada pieza son diferentes en una y otra pieza (más salvajes en “Sandandongo” que en “Malanga”). El resto es inventiva pura y dura de los músicos que se dejan llevar por el movimiento de sus cuerpos (con algún que otro efecto de postproducción que no resta naturalidad).

Durante mucho tiempo fuera del mercado “Niágara” fue reeditado por la compañía alemana MIG y no quisieron dejar pasar la oportunidad de unir a este primer álbum sus dos secuelas, sutilmente diferentes: en especial “S.U.B.” de 1972, donde el concepto cambia completamente y aunque la base de los temas sigue siendo el juego rítmico entre WEISS, Udo Lindenberg y Daniel Fichelscher (como se puede comprobar en “Kattarh”), la adición de bajista, pianista, guitarrista y sección de vientos ocasional convierten al disco en una obra más previsible de Jazz Rock (no hay más que escuchar el largo tema título, que podía pasar por un trabajo de la MAHAVISHNU ORCHESTRA o similares). El tercero en discordia, “Afire” de 1973 recupera la seña de identidad de NIAGARA, el concepto casi exclusivamente percusivo sólo añadiendo el pulso de Dave King en el bajo en algunos pasajes, pero es menos fresco porque en él WEISS se enfrenta solo ante los tambores, añadiendo algunos percusionistas invitados, pero sin la interlocución y el diálogo que en el debut tenía la presencia de Udo Lindenberg y Daniel Fichelscher. Además el disco se conforma por un conjunto de piezas cortas, lo que impide que el oyente acabe entrando en trance como en “Niágara”. Aún así, hay que felicitar a MIG por reeditar estos tres discos para tener de un plumazo todo lo que KLAUS WEISS hizo con NIAGARA y entender la evolución del concepto.

Música que mira directamente a África, a nuestros orígenes como seres humanos, desnuda de todo aderezo, simplemente haciendo que nuestros pies, brazos… nuestros cuerpos se invadan del calor de los ritmos y de la exuberancia de las percusiones. NIÁGARA pudo ser una rara avis, pero por todo ocupa un lugar privilegiado entre los coleccionistas y musicólogos. Una orgía para los sentidos.

De “Niágara”: 



De “S.U.B.”: 



De “Afire”: 



miércoles, 17 de septiembre de 2014

NECROWRETCH - "Putrid Death Sorcery": rindiendo culto a Suecia


Si uno hace un “blindfold test” e incluye un corte del trío francés NECROWRETCH, el que lo escuche, primero: no va a decir nunca que la banda provenga de Francia. Segundo: pensará que le estamos poniendo un tema clásico del Death sueco de los noventa. Tercero: si le decimos que el grupo es más actual, pensará que es VERMINOUS, KAAMOS, REPUGNANT o PAGANIZER. Pues bien, todo sería equivocado. Al igual que los alemanes FLESHCRAWL, NECROWRETCH es puro culto a la Suecia más macabra y sangrienta, musicalmente hablando, esa que partiendo de DEATH y POSSESSED dio lugar a bandas como MERCILESS, NIHILIST, NECROPHOBIC, GROTESQUE, etc… Es decir, base Thrash, velocidad, voces de cierta ascendencia Black y mucho odio contenido en cada uno de los riffs y fraseos. Y lo mejor de todo es que, pese a que la personalidad brilla por su ausencia, NECROWRETCH, un grupo insultantemente joven, ofrece un trabajo encasillado y sin salirse del guión, pero muy inspirado y estimulante.

El inmovilismo estructural y sonoro que hace que, salvo en “Impious Plague In Catacombs”, más groovie y variada, los cortes se sucedan sin grandes variaciones, no es impedimento para disfrutar de la violencia sónica de NECROWRETCH. Es curioso además el sonido conseguido: la producción es fría y afilada, para mayor redundancia en la sensación transmitida por las voces y las guitarras del grupo, pero al mismo tiempo las guitarras suenan con volumen, con una distorsión más potenciada, al igual que el bajo, siempre presente y en ocasiones hasta por encima de las propias guitarras (algo interesante porque no se limita a seguir los riffs principales). La batería también goza de un espacio protagonista en la mezcla, con un sonido clásico y tempestuoso que contribuye a la cacofonía sonora del conjunto. Lo menos personal es desde luego la voz de Vlad, que es puramente GROTESQUE, agresiva y con cierto eco para dar una mayor sensación fantasmagórica, pero algo repetitiva.

Los cortes se suceden sin darnos cuenta y sin descanso, con excepción del ya citado “Impious Plague In Catacombs”, más atmosférico y contenido o “The Anthropomancer”, con una introducción que mantiene la tensión y abre la veda para un corte muy nihilista. También el cierre de “Repugnizer”, aún siendo un tema corto e intenso, da juego para algo de Groove. El resto es mantener pisado el acelerador, tanto en la parte rítmica como en la solista, para ofrecer con ello un muro de riffs y ritmos salvajes que se clavan como cuchillos helados en nuestra espalda. En consecuencia “Putrid Death Sorcery” es un disco muy concreto y dirigido claramente al público melómano que quiere recrearse con el Estocolmo de finales de la última década del siglo pasado, cuando algunos jovenzuelos impíos y sacrílegos se dedicaron a recrear a sus ídolos satanistas del otro lado del Atlántico contagiando de la frialdad de su entorno a la música que con ello hicieron. No es un mero pastiche, simplemente un divertimento al que no se le puede pedir más que entretener.

Si quieres pasar un buen rato y dejarte llevar por la música cultista (y ocultista) de una banda “desubicada” pero igual de buena que si hubiese nacido en la tierra de Odin, con NECROWETCH y su debut en largo tienes una buena pieza de viejo y crudo Death Metal para llevarte a los oídos y no parar de mover la cabeza. Tan simple como complicado al mismo tiempo, el trío sale victorioso en sus pretensiones.



domingo, 14 de septiembre de 2014

TOM HARRELL - "Prana Dance": Variedad musical y equilibrio rítmico


TOM HARRELL puede ser reconocido como uno de los trompetistas bandera del Post Bop. Metido en su mundo de ángeles y diablos, propio de un esquizofrénico declarado que no le impide, literalmente, volar sobre un escenario, el trompetista americano es tan prolífico como poco dado a las palabras. Él prefiere expresarse con su música y olvidarse de todo lo demás. Y después de unos comienzos semidesconocidos, su llegada a RCA a mediados de los noventa supuso un salto cuantitativo (el cualitativo ya lo dio unos años antes) que le permitió ser conocido por más gente y colocarse como uno de los adalides de la recuperación del Jazz en su sentido más clásico y aventurero. Solista sin igual, con un sonido que bebe más de CLIFFORD BROWN que de MILES DAVIS, pero que se basa en los principios musicales del segundo (y qué trompetista no lo hace), TOM HARRELL dio con HighNote, el sello por excelencia del Post-Bop y desde entonces no ha dejado de sacar buenos discos, destacando este “Prana Dance” de 2009.

En “Prana Dance”, TOM HARRELL se rodea de músicos bien conocidos por él y por quienes les siguen: WAYNE ESCOFFERY, con su sonido coltraneano pasado por los modalismos de WAYNE SHORTER, es el que adopta el segundo rol principal, tanto desde el punto de vista de la producción como de la interpretación de un programa completo para el propio HARRELL. Detrás una sección rítmica que recuerda mucho al segundo quinteto de MILES DAVIS, modal y progresiva, con un DANNY GRISSETT que tanto en el piano como en el Fender Rhodes suena etéreo y lejano, sin exuberancias ni excesos, un UGONNA OKEGWO en un papel secundario pero omnipresente, con mucho walking bass entre sus dedos y finalmente un JOHNATHAN BLAKE inventivo, cómodo en el tresillo pero también con cierto toque Funky en su uso de la caja y el bombo.

El programa de “Prana Dance”, se mueve entre la tranquilidad del medio tiempo y la excitación de los cortes más poderosos, pero siempre con esa sensación envolvente y avanzada que da la composición modal, en donde los músicos se sostienen en sus solos y las melodías se diluyen entre los juegos armónicos, y los cambios rítmicos. “Prana”, uno de los cortes más completos es un ejemplo, aunque quizás el más enigmático sea “The Sea Serpent”, precedente de un “In The Infinite” que es puro Post Bop. Por otro lado “The Call” deja espacio para que GRISSETT tanto sobre el piano como sobre el Fender pueda despacharse a gusto en medio de la síncopa Funky de BLAKE y los juegos modales de HARRELL y ESCOFFERY. El conjunto de todo ello, sin ser llamativo por nada en especial, ofrece suficientes espacios de desarrollo y aventura improvisatoria y libertad armónica como para que el oyente se sienta llevado de la mano por la música del quinteto.

TOM HARRELL nunca llamará la atención de los focos, e incluso no dejará de tener la etiqueta de “músico para músicos” en sus espaldas, su imagen introspectiva y no dada hacia el público, propia de su trastorno y de su propia personalidad, tampoco ayuda a que esta sensación cambie, pero dejando a un lado este aspecto, musicalmente HARRELL sabe centrar la atención por méritos propios. Su trayectoria discográfica no tiene altibajos, pero en “Prana Dance” logra un grado de compenetración con sus compañeros que se traslada a la ejecución y aumenta una sensación de directo que lo convierten en uno de sus trabajos más logrados.