Aprovechando
que SILENT estaba un poco en barbecho (aunque según tengo entendido este verano
grabarán su tercer trabajo), César y Josep, ambos miembros de la banda
catalana, y en compañía de Aleix (hermano de Josep), Dani y Toni, han decidido
poner sobre un trozo de plástico un puñado de temas en donde dejan fluir todas
sus influencias más “desérticas” y pesadas, dando lugar a este trabajo homónimo
de GOLDFISH.
Si
en la entrevista que le hice en estas mismas páginas a SILENT, Josep y César
nos comentaban su apego por gente como KYUSS, GOLDFISH es la confirmación de
que estas influencias están muy metidas en el subconsciente del quinteto
catalán. KYUSS, QUEENS OF STONE AGE y un ligero toque alternativo de los nunca
bien valorados ALICE IN CHAINS, convierten a “Goldfish” en un disco de sonidos
Stoner, de tonalidades rojizas, de olor a desierto... Todo ello gozando de un
sonido bastante bueno, que profundiza en la afinación grave de las guitarras, y
en la pesadez general de la música del grupo catalán y dando un lugar
privilegiado para las cuerdas vocales de César, que dicho de una manera llana,
demuestra ser un “monstruo” con su voz, llegando a registros que jamás pensaría
que tendría escuchando su trabajo en SILENT. De modo que si lo tuyo es el
Stoner de principios de los noventa, no lo dudaría ni un momento, GOLDFISH ha
facturado un gran disco que aunque sabe a poco (algo más de media hora entre
los cuatro temas nuevos y los dos temas pertenecientes a un anterior trabajo),
dice mucho.
Lo
mejor de GOLDFISH, además del papel protagonista de César, del que ya he
hablado, es que sin salirse de los parámetros del género, facturan
composiciones que dentro de su estatismo natural y consustancial al estilo, son
variadas y hasta cierto punto dinámicas, aunque parezca un contrasentido esta
frase. Aunque debería empezar por el principio, pondré un ejemplo, el que para
mí es el mejor tema del disco, “The Clonch (A Trip In Search Of Sound)”, un
tema de extensión media y que uno no se cansa de escuchar gracias a las inflexiones
de César y al efecto adictivo de los riffs de Josep y Toni. Evidentemente todo
está construido a golpes de riffs que beben de los viejos BLACK SABBATH
revisionados a través de TROUBLE, KYUSS y compañía, pero los efectos con los
que van intensificando las estructuras y los ritmos sencillos pero
imprescindibles de Aleix (que si uno escucha más detenidamente, no son tan
sencillos...), sin olvidarse del cuerpo que da al conjunto Dani con su bajo,
generan que la escucha de cada tema se haga amena y excitante.
Además
del ya citado “The Clonch (A Trip In Search Of Sound)”, el disco se forma por
otros tres temas nuevos y dos extras, “Tears You Waste In Vain” (que sigue la
línea del resto del trabajo) y “Eighteen Ideas” (más agresiva de lo que cabría
esperar, y que es un poco cajón de sastre en algunos momentos, pero que también
mantiene el nivel y muestra a la banda en plena evolución), que fueron grabados
en 2007 y en donde aunque el sonido es algo diferente y César no usa unos
registros tan amplios, sirven junto al resto del trabajo para tener una idea
global del sonido de GOLDFISH. De esos tres temas de los que aún no he hablado,
“Feed From Me (Agu)”, se desmarca como otro de mis preferidos, gracias a su
estructura, con continuos vaivenes que y a los contrastes de la voz de César.
“Light Never Hides”, por su parte es mucho menos explosiva, encargándose más de
recrear atmósferas a golpe de distorsión guitarrera, en uno de los temas donde
los patrones Stoner están más definidos y que posee una estructura de
intensidad creciente. Finalmente, “Coldness Denied”, se convierte en un tema
inquietante, lleno de interesantes efectos de guitarra, mientras Aleix mantiene
el pulso con unos ritmos que van aumentando su fuerza por momentos, y
nuevamente César mantiene su protagonismo usando otro registro nuevo con el que
incrementar su colección.
Una vez más el territorio nacional proporciona alimento para nuevas
bandas que buscan su sitio y GOLDFISH reclama el suyo, en un género que en su
momento gozó de excelente salud, quedando en un plano más minoritario hoy en
día, pero demostrando su valía y calidad. A pesar de lo corto que se hace,
“Goldfish” es un trabajo muy recomendable para todos aquellos que quieran
sentirse en medio de la soledad y la aridez del desierto.
Vaya
por delante que me enfrentaba a este disco ya avisado de que Kip Winger bebe de
otras influencias en su proyecto en solitario fuera de WINGER. Vaya por delante
también, que después de escuchar el “IV”, último trabajo de la citada banda,
tampoco esperaba que fuera un trabajo sublime. Vaya por delante que no había
escuchado los otros dos discos previos a “From The Moon To The Sun”. Vaya por
delante todo esto, pero tras varias escuchas de este nuevo disco del vocalista
y multiinstrumentista KIP WINGER, no he conseguido conectar en ningún momento
con la propuesta por mucho que lo he intentado. Y eso que exenta de calidad no
está, pero algo le falla a “From The Moon To The Sun”.
El
problema fundamental de este trabajo es su irregularidad. Me parece bien que si
tienes un proyecto en solitario quieras dar rienda suelta a todo aquello que si
estás en un grupo no puedes usar. Pero hay que tratar de dar un mínimo de
coherencia a todo para que no parezca que estamos ante un corta y pega de
ideas. Y ese es el error que desde mi punto de vista ha cometido KIP WINGER. Ha
mezclado demasiadas cosas y ninguna las logra redondear para que uno no tenga
la sensación de que estamos ante temas inacabados. Evidentemente hay algún
momento bueno, sobre todo en los primeros cortes del trabajo, pero en general
“From The Moon To The Sun” no consigue entusiasmar y pasa sin pena ni gloria
ante nuestros oídos. Pienso que si hubiera tratado de ser un poco más constante
en la propuesta ofrecida, el resultado sería distinto, pero tal y como está
concebido este trabajo, el oyente no consigue despegar más que en contadas
ocasiones.
El
disco comienza bien, con “Every Story Told”, un tema de aires modernos y
arreglos muy pomposos, pero que consigue enganchar gracias a un buen estribillo
y a la buena labor de Winger en las voces. “Nothing”, con ese inicio arábigo
contiene otro buen estribillo, aunque en unas tesituras aún más modernas y
actuales que el tema precedente. Finalmente, “Where Will You Go”, en forma de
balada por momentos muy inspirada en los sesenta, consigue despertar cierto
feeling, siendo uno de los mejores momentos del disco. En cualquier caso, este
comienzo del trabajo promete, por lo menos aparentemente. ¿Cuál es el problema?
que a partir de aquí todo se mueve en aguas demasiado monótonas, por no decir
directamente sosas y sin conseguir despertar del amodorramiento general en el
que el oyente ha entrado. “Pages And Pages”, íntima y oscura, por momentos
recordando a PINK FLOYD en su faceta más tranquila está bien, pero es un bajón
considerable respecto de lo que le precede. Por su parte, la instrumental
“Ghosts” es asombrosa, un tema de Música Clásica complejo, donde Winger cuenta
con la ayuda de una sección de cuerdas y que demuestra la versatilidad de este
hombre, pero ¿qué pinta aquí?, entra con calzador y creo que está fuera de
contexto.
No
será hasta “California” que podamos despertar del letargo, no porque estemos
ante un tema movido o por lo menos cercano a los tres primeros cortes del
trabajo, pero la elegancia Pop que rodea al corte hace que nos llame un poco
más la atención. “What We Are” sí que es un buen tema, mirando directamente a
LED ZEPPELIN, Winger se ha sacado de la manga un tema añejo y pegadizo que
consigue que la excitación vuelva un poco a nuestros cuerpos. No obstante lo
que queda de aquí hasta el final no va a hacer que cambiemos de opinión, “One
Big Game”, adentrándose por terrenos R&B acaba por hacerse un poco pesada,
“Why” se pierde en demasiados rodeos atmosféricos que acaban por perder la
magia que pretendían tener y no será hasta “Reason To Believe”, dentro de su
modernidad, que Kip Winger nos consiga hipnotizar un poco aunque sólo sea por
los sonidos árabes de los que se vuelve a contagiar. En la edición europea,
además resta otro tema, “Monster”, que podría considerarse una continuación del
anterior (con el mismo aprecio por lo árabe) pero con un mayor predominio de
los samplers y los sintetizadores, siendo el exponente más moderno de todo el
trabajo y que para mi gusto no es lo mejor del disco.
En
resumen, sin ser un desastre pues hay cuatro o cinco temas que están bastante
bien, “From The Moon To The Sun” se queda en un quiero y no puedo que no
consigue explotar y que seguramente que, salvo que seas muy fan de la voz de
Winger, no tendrá mucha repercusión, sobre todo después del tremendo inicio de
año que Frontiers ha ofrecido con sus lanzamientos. Desde mi punto de vista, un
disco que no pasa del aprobado.
Si
hay un disco esperado en el mundo del Death Metal, que no sea parido por un
grupo de la vieja guardia, ese es el debut de HAIL OF BULLETS. Desde que saltó
la noticia de este “super grupo”, con gente de THANATOS, ASPHYX, GOREFEST...
los amantes del Death europeo de raíz totalmente old-school empezamos a
experimentar sensaciones orgásmicas. La voz de Martin van Drunen, tan propia
como carismática, las guitarras corrosivas y pesadas de Paul Baayens y Stephan
Gebedi, ambos de THANATOS, el bajo omnipresente de Theo van Eekelen,
proveniente de los brutales HOUWITSER y la batería siempre certera y sin
miramientos de Ed Warby de GOREFEST, hacen de HAIL OF BULLETS un grupo
especial, y las reacciones en la comunidad extrema no se hicieron
esperar.
Ya
la edición de su demo fue todo un hito. No se hablaba de otra cosa en los foros
de Metal extremo, y tanta fue la expectación que lo que inicialmente estaría
pensado para llamar la atención de los sellos, se acabó por convertir en una
pieza codiciada que fue editada en vinilo. La mano de Dan Swanö en las mezclas,
dando el toque añejo necesario acabó por redondear a un grupo que ya tenía a
sus fans rendidos antes de debutar. Y por fin, un tiempo después, cae en
nuestras manos esta pieza bélica bien engrasada que responde al nombre de
“...Of Frost And War”. Casi una hora de música, si contamos el tema extra que
vendrá en la edición limitada, con letras que penetran de lleno en la temática
de la Segunda Guerra
Mundial; una docena de composiciones directas que, avanzando como si de un
panzer se tratase, poco a poco y no dejando títere con cabeza, se harán con
nuestros cuellos a golpe de headbanging.
Si
juntas todo lo que es y fue GOREFEST, los propios ASPHYX, las melodías de
inspiración Thrash de THANATOS, el groove rompecuellos de BOLT THROWER, el
desgarro de PESTILENCE... y lo unes a un sonido putrefacto y lleno de regusto
clásico, obtendrás lo que guarda en sus surcos este clásico antes de nacer,
esta pieza que está llamada a convertirse en un disco para el recuerdo, este
“...Of Frost And War”. Variedad de tempos, que sin demostrar grandes
velocidades, centrándose en la contundencia, en el subsuelo de la afinación, en
el poderío rítmico y en el infierno de las cuerdas vocales de Martin, saben
entretener en poco menos de una hora que se pasa volando. Desde la introducción
enigmática y fantasmagórica de “Before The Storm”, auténtico preludio de la
tormenta sonora de decibelios que se avecina, hasta la decadencia mortuoria de
“Berlin”, metáfora de la barbarie bélica, el disco discurre por asaltos a cada
cual más adictivo.
Temas
como “Ordered Eastward” o la bestial “Red Wolves Of Stalin” (que parece sacada
de un disco de UNLEASHED, por esos riffs rítmicos y pegajosos) marcan la
diferencia en lo que a velocidad contenida se refiere, con ritmos que sin
llegar a explotar en una tormenta de blast-beats, consiguen dar la agresividad
necesaria para que reaccionemos sin darnos cuenta. Otros temas como “General
Winter”, de inicio marcial, lento, pesado, como si de un obús se tratase, pero
sin dejar a un lado la euforia de los riffs más afilados, o el groove cargado
de morbosidad de “Machthexen”, caen como losas en nuestros oídos haciendo
sangrar nuestras entrañas. En general no hay hueco para la exuberancia, todo
está pensado y calculado para que, como si de un tanque se tratase, la
maquinaria pesada de HAIL OF BULLETS se vaya metiendo en nuestro interior. La
melodía está presente, pero es complementaria (aunque necesaria) y viene de la
mano de unos solos fríos y melancólicos, puro GOREFEST, que aumentan la
sensación de oscuridad y barbarie que desprende el trabajo. En global, una oda
al Death Metal clásico, única y fundamental, que hará disfrutar a cualquier
amante de los orígenes de este estilo.
La
innovación es nula, eso sin duda, el hecho de que puedas anticipar la
estructura de “The Crucial Offensive”, es un ejemplo de que HAIL OF BULLETS no
está aquí para ser adalides de la originalidad, pero el grado de excitación
alcanzado es tan alto, que ¿quién necesita más experimentos? No hace falta
decir más. “...Of Frost And War” será un clásico algún día. Hoy era un disco
esperado, que por lo menos por mi parte ha cubierto las expectativas con
creces. Mañana seguramente será un disco de estos que se reeditan varias veces
ante búsquedas infructuosas de coleccionistas ¿Te gusta el
Death Metal? Te gustará HAIL OF BULLETS.
Cuando
salió “Corridos De Muerte” hace ya casi seis años, estando FEAR FACTORY en
plena desaparición y reforma (una forma un poco complicada de que Dino Cazares
saliera de la banda desde mi punto de vista), no llegué a entender la
motivación de Cazares para sacar este proyecto bajo el pseudónimo que siempre
usó en BRUJERÍA, Asesino. El disco era lineal a más no poder, y aunque el
paralelismo con lo que hacía en BRUJERÍA era evidente, sobre todo en el
apartado lírico, el trabajo pasaba sin pena ni gloria ante los oídos de quien
lo escuchara. En su momento pensé que Cazares estaba en horas bajas y no sabía
reencontrar la senda que tanto tiempo de éxito le dio en FEAR FACTORY, y el
hecho de que ASESINO no volviera a sacar nada y que naciera el proyecto DIVINE
HERESY me confirmaba que ni el propio guitarrista le quería dar continuidad. Mi
sorpresa fue reencontrarme con el proyecto a través de este “Cristo Satánico”,
que como a continuación relataré mejora a su predecesor, pero le sigue faltando
algo para brillar.
ASESINO
sigue el mismo camino en “Cristo Satánico” que en “Corridos De Muerte”, una
base de Death Metal americano, pegadizo, con algún que otro toque que puede
recordar a FEAR FACTORY, pero sin grandes florituras ni juegos atmosféricos,
todo agresividad y provocación. Pero en mi opinión, “Cristo Satánico” consigue
algo que su predecesor no, que la intensidad y el interés por la escucha del
trabajo no decaiga, además de que compositivamente es más variado. El hecho de
que Maldito X (miembro de STATIC X) esté en el grupo, además del propio Cazares
genera que nuevamente algún que otro riff de ascendencia casi nu-Metal esté
presente en algún corte, pero en general ASESINO sigue estancado en su raíz
Death que lleva a Cazares a su pasado más lejano en el tiempo, cuando los
recién formados FEAR FACTORY acababan de sacar su “Soul Of A New Machine”. Esto
podría haber llevado al mismo aburrimiento de su primer disco como ASESINO,
pero el resultado ha sido mejorado (incluyendo algún que otro solo interesante
de la mano de Andreas Kisser de SEPULTURA), aunque siga sin resaltar por encima
de la media.
Dejando
a un lado la advertencia con la que se abre “Cristo Satánico”, avisando del
contenido explícito y rozando el mal gusto de sus letras (pedofilia, magia
negra, violaciones, asesinatos… y demás lindezas que en BRUJERÍA ya están
presentes y que ASESINO sólo reproduce de manera incluso más explícita), los
tres primeros temas del disco son de lo mejor de todo el trabajo. Riffs
pegadizos y sencillos, ritmos variados y que saben navegar entre la excitación
Thrash y el groove del Death Metal más rítmico y el juego de voces entre
agresivo y gutural, en donde las letras en castellano, no siempre entendibles
por la pronunciación, harán que, teniendo en cuenta el sentido del humor y el
contexto para el que fueron escritas (la provocación pura y dura), esbocemos
alguna que otra sonrisa. “Regresando Odio”, “Soy Maldito” y “Rituales Salvajes”
son así temas muy representativos de todo lo que nos encontraremos en “Cristo
Satánico”, ayudando a que nos enganchemos a ellos la producción impoluta y
poderosa en que está envuelto el disco. “Yo No Fui” está mucho más estancado y
reduce un poco la intensidad de los primeros temas, además de que su letra no
es para nada de las mejores, pero la sorpresa y el toque de variedad,
perfectamente encajado en el transcurso del trabajo, viene de la mano del
brutal tema “Padre Pedófilo”, ataque frontal a la iglesia católica, donde las
atmósferas de los teclados y los riffs recuerdan directamente a FEAR FACTORY.
De
ahí en adelante no hay muchas novedades, pero afortunadamente se alternan
cortes pasables que no destacan por nada en especial con otros que o bien por
sus letras, o bien por sus riffs o bien por ambas cosas, vuelven a ser notables:
es el caso de la hiriente y cómica “¿Puta Con Pito?” o la pegadiza, que mira
nuevamente de manera directa a FEAR FACTORY, “Triquidado”, algo que también
pasa con “Sadistico”, en un tono más oscuro y groovie, de cuya letra es casi
mejor ni hablar. Ya para el final, Cazares concentra todas las sorpresas: por
un lado “Cristo Satánico”, tema instrumental donde los teclados emulan una
banda sonora de una película de terror, que aunque no viene mucho a cuento en
la tónica general del disco, no está mal para desconectar, por otro lado “Y Tu
Mamá También”, tema que no sé cómo tomármelo. Sinceramente, hay que escucharlo
para entenderlo: en él la música se torna casi radiable, con una melodía muy
Pop y hasta voces limpias, reproduciendo una bucólica escena de amor como
introducción, hasta que Cazares empieza a vocear y la letra se torna en
pornográfica, para no dejar a un lado las buenas costumbres del grupo. La
canción no es nada del otro mundo musicalmente, pero choca tanto con el resto
del trabajo y la letra es tan cómica que a uno se le quedan ganas de escucharla
otra vez.
Finalmente
para redondear el disco, ASESINO incluye dos versiones adaptadas y renovadas de
BRUJERÍA, dos de los temas míticos de la banda: “Matando Güeros” y “Misas
Negras”. Lo malo es que el sonido del disco del que provienen es inimitable
(para mí lo mejor de la banda mexicana), y el lavado de cara que Cazares les
da, además del ligero cambio de letra de “Matando Güeros”, no me atrae mucho.
Pero no deja de ser un plus para este disco, que sin llegar a sobresalir, es
mucho mejor que su predecesor y por momentos hasta notable. Provocación y
sencillez musical, no exenta de cierta inspiración, elementos que convierten a
“Cristo Satánico” en un disco, que aunque del montón, divertirá a quien lo
escuche.
Pocas cartas de presentación
necesitan a estas alturas ARCTURUS. Formados hace más de tres lustros en plena
ebullición del Black Metal noruego, no fue sin embargo hasta 1996 que este
grupo publicara su primer álbum, "Aspera Hiems Symfonia", que se
puede considerar como un clásico dentro del Black Metal melódico.
Tras un inicio tan prometedor,
llegó en la carrera de ARCTURUS un disco clave para entender su posterior
evolución: "La Masquerade Infernal", disco que supuso el mayor
ejemplo de lo que es mezclar música clásica y Black Metal. Un álbum raro,
único, teatral, excepcional... casi una ópera. Precisamente en aquél disco un
vocalista actuaba como colaborador junto a Christopher Rygg que perdió
protagonismo, se trataba de Simen Hestnaes, más conocido como Vortex en DIMMU
BORGIR. Su voz limpia, llena de teatralidad, encajaba perfectamente con el
toque operístico que ARCTURUS querían dar a su música. Con posterioridad
ARCTURUS fueron repitiendo sus esquemas, siempre con el patrón de la calidad y
la originalidad como bandera.
Y en estas estamos, cuando en
2003 Christopher Rygg decidió dejar definitivamente la banda. Se dejaba así el
puesto de vocalista vacante, poniendo en peligro la continuidad de ARCTURUS. No
obstante el resto del grupo con Hellhammer y Sverd a la cabeza, siguieron con
su empeño de dar continuidad a la banda y volvieron a contar con Vortex para un
nuevo álbum (después de estar un año con otro vocalista en los directos),
"Sideshow Symphonies", el quinto en la historia de ARCTURUS. Este
hecho conlleva una importante consecuencia. Nunca antes los noruegos iban a
volver tanto al sonido de "La Masquerade Infernale" como ahora, dado
que el vocalista principal de aquel plástico se ha convertido en el nuevo miembro
del grupo. Sin embargo, musicalmente hablando son un poco diferentes a lo
desplegado en su segundo trabajo completo.
"Sideshow Symphonies"
no es tan arriesgado como "La Masquerade Infernale", si bien los
elementos operísticos y clásicos siguen teniendo mucho protagonismo. El nuevo
disco de ARCTURUS se puede considerar como una mezcla entre sus dos primeros
legados musicales. Temas como "Hibernation
Sickness Complete" (único corte con algunos retazos de voces Black) o el
magnífico "Shipwrecked Frontier Pioneer", nos muestran a una banda
que sin perder sus toques sinfónicos y con la melódica voz de Vortex llenándolo
todo, se permiten volver la vista al "Aspera Hiems Symfonia" dándole
un toque más metálico a las composiciones, y con un Hellhammer, como siempre,
en estado de gracia. De ahí en adelante, el disco se mueve por parámetros más
pantanosos, porque no llegan al éxtasis musical de "La Masquerade
Infernale" ni vuelven al virtuosismo de estos dos primeros temas. Aún así,
la calidad de ARCTURUS sigue siendo intachable, y se siguen viendo buenas ideas
y atmósferas, magníficamente recreadas por Sverd en la parte central del
trabajo, en composiciones como "Evacuation Code Deciphered" o
"Moonshine Delirium", donde el acompañamiento de una vocalista
femenina le da un contrapunto interesante a la voz de Vortex. Precisamente
"Moonshine Delirium" se puede considerar como uno de los cortes más
variados y completos que la banda ha compuesto, pero desde mi punto de vista le
falta algo para que salte la chispa. Problema que se agrava en el resto del
disco, con la excepción de "Hufsa", cantado en noruego y que
transmite un sentimiento único (con un solo de guitarra muy bueno).
El sonido es otro punto a favor del disco, pues consigue transmitir la
frialdad suficiente como para que la voz de Vortex no quede fuera de contexto.
Puede que no te guste su timbre de voz, pero bajo mi humilde opinión, su labor
en este disco es uno de los puntos más importantes de "Sideshow
Symphonies". En cualquier caso que nadie piense que estoy desmereciendo la
nueva obra de los noruegos. Es un disco por encima de la media, pero por debajo
de la calidad demostrada por ARCTURUS previamente. De todas formas, no deja de
ser un grupo necesario que nos hace seguir creyendo en que la originalidad aún
es posible.
Aunque
sea una forma atípica y poco ortodoxa de empezar una crítica, voy a comentar un
pequeño capítulo de mi historia. Cuando el que suscribe era casi una persona
imberbe (evidentemente exagero, pues no hace tanto...), en esta web escribía
muy de vez en cuando un “tipo mexicano” llamado Jacobo Córdova, que me
descubrió a dos grupos, a sus compatriotas THE CHASM y a CARNAL FORGE. ¿Qué
tiene que ver eso con TICKET TO HELL y su debut “Man Made Paradise”? Ahora lo
veréis.
Cuando
estuve leyendo los créditos del libreto de “Man Made Paradise” me di cuenta de
que esta banda se forma por una sola persona, Jacobo Córdova... y justo, es él
mismo que hace ya casi un lustro escribía de vez en cuando en estas mismas
páginas. Paradójico, ahora soy yo el que se pone la piel del crítico con su
música. Y dejando ya historias personales que no le importan a nadie y que
desde luego, provocarían que me echaran de cualquier curso de introducción al
periodismo, lo cierto es que el resultado del primer disco de TICKET TO HELL es
francamente bueno, haciendo honor a su nombre y ofreciéndonos una maraña de
riffs herederos de SLAYER con algún toque a lo THE HAUNTED, CARNAL FORGE... y
demás adalides en su momento de la segunda ola del Thrash europeo, pasajes de
cierta epicidad que pueden recordar a BATHORY o más recientemente AMON AMARTH,
e influencias más agresivas que hacen que la música del proyecto roce el Black
Metal en muchos momentos. Quizás a veces es un ejercicio de excesivo
extremismo, en todos los sentidos, pudiendo llegar a saturar si no tienes los
oídos acostumbrados a este tipo de murallas sónicas, pero no cabe duda de que
TICKET TO HELL recoge a la perfección los gustos personales de este hombre, o
por lo menos los que en su momento llegó a tener.
La
producción no es una maravilla, y tengo la incertidumbre de si la batería es
sintética o no, pero en cualquier caso, la crudeza del sonido no es más que
otro punto de extremismo adicional que ayuda a confeccionar esta bienvenida al
infierno particular que es “Man Made Paradise”, dejando poco espacio para
concesiones al oyente, pero tampoco creo que lo buscara. En definitiva, estamos
ante una pieza realizada por un fanático de la música extrema, para fanáticos
de la música extrema, honesta y sin florituras innecesarias. Tratando de ser
descriptivos y directos, por si te sirve de algo, lo más parecido a TICKET TO
HELL es un bulldozer descontrolado que va arrasando con todo lo que encuentra a
su paso, más gráfico no se puede ser. Y como buen bulldozer, este proyecto es
maquinaria pesada, pero sin grandes sorpresas, todo es tan típico como
efectivo, sin mayores pretensiones.
Desprendiendo
furia descontrolada desde el primer corte, el disco comienza con la propia
“Ticket To Hell”, siendo de las mejores de todo el trabajo, con más influencia
del Thrash a toda pastilla y sin ningún tipo de concesión auditiva para el
oyente. Descomunal inicio que se ve continuado por “Dynasty” y “Join The
Blind”, con unos riffs y un bajo ultrasaturados que potencian la sensación
aplastante de la música del proyecto, finalmente para acabar este inicio tan
extremo, “A.H.”, continúa con los ritmos a la velocidad de la luz y unos
pegajosos riffs. “Eyes Of Fire” muestra el lado más épico que ya he comentado
de TICKET TO HELL, combinando momentos muy cercanos al Black Metal, con otros
más groovies, algo que continúa en “I Am I”, constituyendo los cortes que más
influencia sueca poseen. Por su parte, “Man Made Paradise”, profundiza en los
pasajes hiperveloces de ascendencia Black (que se ve reflejado incluso en la
tonalidad de voz adquirida por Jacobo), siendo de los momentos más extremos del
plástico, pero sin dejar a un lado la melodía, y finalmente “We March”, como
resumen de todo el bulldozer sónico de TICKET TO HELL pisa el acelerador como
nunca, escupiendo la tormenta de riffs y líneas de bajo saturadas que son la
base del grupo, nuevamente con cierto halo de epicidad en las guitarras.
Una
oda a lo extremo, sin que se deba buscar más allá. Simplemente Jacobo Córdova
en TICKET TO HELL escupe todos los sonidos que ama y con los que ha crecido,
para ofrecer un producto crudo, descomunal y compacto como pocos, aunque quizás
peque de excesivamente “exuberante” en su propio extremismo en algunos
momentos. En cualquier caso “Man Made Paradise” es un gran debut que deja
abiertas las puertas del infierno.
ENTREVISTA A TICKET TO HELL PARA ROCKTOTAL
Bienvenidos al Infierno terrenal
TICKET TO HELL es el proyecto más personal de Jacobo Córdova. Después de estar más de quince años ligado a la escena metálica mexicana, con periplo madrileño incluido, Jacobo ha decidido dar rienda suelta a todo su extremismo musical en este particular vuelo a los infiernos. “Man Made Paradise” es el resultado, un disco que es una patada en la boca del estómago desde el primer minuto y hasta el último, sin descanso, escupiendo riffs a cada cual más intenso y aplastando todo lo que encuentra a su paso. Ante tal máquina de destrucción, me puse en contacto con Jacobo para profundizar un poco más en el trasfondo de TICKET TO HELL, y de paso, hablar un poco de su trayectoria: su pasado musical, su estancia española, su labor como crítico musical, los proyectos en los que anda envuelto... todo lo que podrías querer saber sobre él y no te atreviste a preguntar. Saca tu billete, y ¡prepárate para un viaje por los fuegos de la eternidad!
La portada, el nombre del grupo, las letras del disco... ¿Nos estás haciendo toda una invitación al infierno con este disco no Jacobo?
(Risas) Claro que si. Realmente como lo veo es de la siguiente manera, el infierno ya está aquí, es la tierra, y cada día parece que todos hacemos hasta lo imposible para joderlo todavía más, no mostramos ningún interés por cambiarlo. Musicalmente es lo mismo, un Thrash - Death agresivo y con toques de todo tipo de Metal y pulsante. Es una pena que nos daremos cuenta de que todo se fue a la mierda cuando sea demasiado tarde.
Dando un repaso a las letras uno tiene la sensación de que “Man Made Paradise” es un disco realmente destructivo. ¿El paraíso, entendido como la felicidad terrenal, es inalcanzable? ¿Vivimos en una ilusión creada para no ver la realidad?
Definitivamente es un disco destructivo viéndolo desde lo que hemos hecho en el mundo. Sólo hay que ver las noticias para darse cuenta de los intereses que existen, petróleo, dinero, poder y demás. Sé que es negativo decir que ya todo se fue al caño y es imposible regresar, pero así es, además ¿a quién le gusta su Metal positivo? Y por otra parte también toco el tema de la iglesia y su hambre por el dinero y algunos temas personales.
¿Vivimos en una ilusión creada para no ver la realidad?
Definitivamente. Sólo hay que ver las noticias y toda la mierda que se maneja en los medios de comunicación para darse cuenta. Sólo una cosa es real: ¡¡¡La Muerte!!!
Formaste la banda hace relativamente poco y solo tenías una demo a tus espaldas. Por lo que he leído TICKET TO HELL no es el primer proyecto propio en el que te embarcas. Háblanos un poco de tu pasado y ¿Cómo te surgió la idea de montar esta banda?
Llevo años tocando Metal. Empecé en el 93 con una banda que se llamaba SÁTRAPAS y tocábamos Thrashcore de la escuela de DRI, SUICIDAL TENDENCIES, etc. Después por gustos de la banda cambiamos de nombre y formamos ANTIQUA, la primera banda seria que tuve. Estuvimos juntos 10 años y nos fue muy bien en México, sacamos un CD, “In Red Nights”, el cual ahora parece que hay interés de reeditar en Digipack con 3 canciones inéditas. Por otra parte toqué en un grupo de Metal Progresivo que se llamaba PROJECT FIRESTART, pero en realidad nunca fue serio, ganamos algunos premios pero nada que valga la pena. Y ahora, además de TICKET TO HELL, tengo una banda de Doom - Death que se llama MAJESTIC DOWNFALL, donde yo también hago absolutamente todo. Esta tiene influencias de CELESTIAL SEASON, SATURNUS, los viejos ANATHEMA, KATATONIA y demás. Saqué el año pasado un split en Solitude Productions de Rusia, y ahora ando grabando mi debut, de hecho las baterías ya están en cinta.
TICKET TO HELL es un nombre de grupo que siempre tuve en la cabeza, y cuando viví en Estados Unidos hace 3 años, decidí darle vida y después de hacerme de mi estudio casero, empezó a tomar forma y se ha convertido en lo que es hoy.
¿Pensaste encargarte de todo desde el principio o formaste TICKET TO HELL inicialmente con más gente?
Siempre fue con la idea de hacerlo yo sólo. Ya estuve mucho tiempo en bandas y lo que menos necesito es perder el tiempo con las opiniones de los demás, yo tengo clara mi idea de TICKET TO HELL y así se va a quedar para siempre. Puede que en un futuro haya músicos para tocar en vivo, pero ¡¡¡van a tocar mis canciones como están dibujadas en mi cabeza!!!
Thrash, Death, Black... “Man Made Paradise” es todo un alegato en defensa del Metal Extremo, desde la primera nota, con un aire más Thrash en los primeros temas, y más intenso y épico en la segunda mitad del disco. ¿Quisiste dejar bien claro que TICKET TO HELL no es una banda para escuchar de manera relajada no?
Claro (risas). De hecho si te fijas, de las 8 composiciones 7, son ¡¡¡guerra total!!! Pura adrenalina del más alto calibre. MAJESTIC DOWNFALL existe para mi lado más personal, mientras que TICKET TO HELL ¡es mi lado bruto!
¿Estás de acuerdo en mi apreciación de que “Man Made Paradise” se puede dividir en dos partes, siendo la primera la más extrema de las dos? ¿Lo hiciste a propósito o ha sido casualidad?
Fíjate que nadie me lo ha comentado, pero ahora que lo dices, la segunda parte, empezando por “Eyes of Fire”, que es la única canción a medio tiempo del disco, y la melodía de las demás, hacen de esta sea más accesible, aunque no menos extrema, si te fijas las baterías y los riffs de guitarra parecen metralletas (risas). Pero entiendo perfectamente lo que dices.
¿Qué estilo es el que más te gusta, cuál crees que es el que más te inspira a la hora de componer, en el que te sientes más cómodo? ¿Y en lo que a grupos se refiere, cuáles serían tus referentes?
Mientras sea Metal, me sirve, si no lo es, la verdad no me llama mucho la atención. No te podría nombrar un género en particular, pero si a bandas como SLAYER, THE CROWN, A CANOROUS QUINTET o KREATOR para darte una idea de gente que realmente admiro.
Para tener una visión más completa, ¿qué opinas de los siguientes nombres: BATHORY, SLAYER, THE CROWN?
BATHORY: La pura experimentación del género llevada a límites grandiosos y épicos. Es una pena que Quorthon nos haya dejado.
SLAYER: Los putos amos como dicen en España, nadie los va a superar nunca, sobre todo los discos entre el “Hell Awaits” y el “Season In The Abyss”.
THE CROWN: Otra banda que no tiene abuela. “Eternal Death” es mi segundo disco favorito de toda la historia, y mucho de lo que hay en TICKET TO HELL, se lo debo a estos cabrones. Y como buena noticia, todos menos Johan Lindstrand (vocales) se acaban de juntar a crear un nuevo proyecto de Death - Thrash ¡¡¡Long live The Crown!!!
En el disco ha colaborado César Tarello en los solos. ¿Todas las guitarras solistas son obra suya o has metido algún solo tú también?
Todos los solos de disco son de César. Yo toqué con él 12 años en ANTIQUA y antes en SÁTRAPAS. Es un gran guitarrista que tiene toda la versatilidad del mundo para crear. Por esto decidí que el era el adecuado para darle ese plus a mi música. Además, yo soy bajista de toda la vida, entonces siempre he estado más conectado con el lado rítmico de la música, otra razón para llamarle a César e invitarlo a que hiciera lo solos ¡¡¡from Hell!!!
Una duda que me asalta. Te encargas de la interpretación de todos los instrumentos, pero ¿también de la batería? es que suena tan brutal que parece inhumana y sin embargo por la producción no parece que sea programada.
La batería es algo muy curioso. En realidad es un programa de computadora, pero la magia del programa es la siguiente: todos los sonidos fueron grabados por Thomas Haake de MESSHUGAH y por el baterista de NAGLFAR por lo que la interpretación que escuchas en “Man Made Paradise” es como si yo trajera a estos dos maestros en la batería. Este programa fue grabado en los estudios Dug Out de Suecia, donde bandas como IN FLAMES o DARKANE han grabado sus discos, entonces de ahí viene la realidad de la interpretación y más que nada el sonido que es acojonante. Podríamos decir que aquí es en el único departamento donde entra un instrumento virtual. Todo lo demás es humano y vomitivo.
¿Es duro encargarse uno sólo de todos los detalles de un disco, o por el contrario es mucho más fácil al no tener que discutir con nadie para ponerse de acuerdo?
Mira tiene sus dos lados. Lo bueno es que uno tiene control total de sus blasfemias y de lo que quiere crear. Yo soy una persona muy democrática hasta que se trata de mis bandas, donde soy un total dictador. Esto me ha ayudado mucho en el aspecto creativo y me da total libertad de las decisiones. Por otra parte, lo negativo, es que a veces uno se puede ciclar con ideas y demás, y además tiene que estar pendiente de todo porque no tiene con quien dividir tareas, y lo peor, es que los gastos en vez de dividirse en varias personas, son absorbidos por uno. Pero lo que tengo seguro, es que en dos años he conseguido mucho y voy por más.
La producción es tan cruda como el propio estilo que practicas, apocalíptica y aplastante. Dije en la reseña del disco que parecía un bulldozer sin frenos y me reafirmo en esta opinión. ¿Estás contento con el resultado en este aspecto? ¿Lo grabaste todo en un solo estudio?
Totalmente. La producción quedó aplastante, cruda y violenta. Uno de los instrumentos que más me gusta es el bajo, suena a bajo de Thrash 80´s, digamos que si mezclas el bajo de NUCLEAR ASSAULT con el de OVERKILL te podrías dar una idea.
Todo se hizo en el Inzonic Music Lab de Querétaro con un gran amigo, Carlos Padilla el Pastas. Es un gran ingeniero de sonido, y de hecho con él ya terminé de grabar las baterías del segundo lanzamiento de MAJESTIC DOWNFALL, que en esta ocasión no fueron programadas, sino reales, y me ayudo Poncho de la banda mexicana THE ILL OVER DEATH.
¿Cómo se interesó My Kingdom Music por TICKET TO HELL? Lo digo porque me sorprendió ver al grupo encuadrado en esta discográfica italiana, más conocida por productos más cercanos al Dark y al Gótico, como KLIMT1918 o similares...
Pues así precisamente. Yo les mandé la demo de MAJESTIC DOWNFALL para que lo escucharan, y como 7 meses después me contactaron ofreciéndome un contrato. Para ese entonces yo ya había firmado con Solitude Productions por lo que estaba terminando de grabar TICKET TO HELL, y se los ofrecí. Nada más escucharlo, Stefano me escribió de regreso y me dijo que lo quería editar. Hasta ahora todo ha ido muy bien.
¿Piensas hacer conciertos con TICKET TO HELL con músicos de sesión para el escenario o estamos sólo ante un proyecto de estudio?
Mira, si sale algo interesante, seguro que sí. De hecho ya tengo apalabrados a muchos músicos que me ayudarían sin problema. La cosa es crear algo. Voy a ver si el año que viene se puede hacer algo por Europa y ¡¡¡nos lanzamos a rockear!!!
Vives en México pero estuviste un tiempo en España ¿no? ¿Qué recuerdos guardas de tu etapa madrileña?
Pues fue una etapa increíble e increíblemente jodida. Buena porque trabajé en Rock Hard como coordinador de la revista, y viaje mucho y conocí a mucha gente del medio. Además vivía de concierto en concierto y eso estaba de huevos. Pero por otra parte yo me quería ir a vivir allí, y nunca conseguí un trabajo que valiera la pena. Es más en la revista me pagaban una mierda, y todavía cuando me regresé, Mariano Muniesa, que en ese entonces manejaba la revista, quedó a deberme un mes de curro. Mariano, jodete y chingas a tu madre hijo de la gran puta. Deja que te vea, que ojala sea en Wacken y vas a morir bastardo. Y no editen esto.
De hecho cuando estuviste aquí hiciste labores de escribano en revistas y webs. ¿Has seguido escribiendo sobre música en algún sitio desde entonces? ¿Cuál sería el mayor descubrimiento musical que hiciste en esa época, el grupo que al hacer la crítica más te impactó?
Sigo escribiendo aunque ahora menos. Pero por ejemplo cubro Wacken para metal-rules.com y hago algo en una revista impresa de Noruega llamada Helvete Magazine.
Lo que más me impacto en esa época, fue sin duda alguna entrevistar a MANOWAR cara a cara, me cagué y significo mucho para mí. Musicalmente hablando, no hubo nada que realmente me impactara, si acaso el “Discoveries” de ESQARIAL, pero fuera de eso, creo que el 2002 no fue un gran año de ediciones.
¿En qué zona de México vives? No conozco el país, pero siempre me han comentado que está lleno de contrastes, sobre todo la capital, donde conviven personas extremadamente ricas y otras que a duras penas pueden sobrevivir. ¿Es cierto?
México es un clarísimo ejemplo del tercer mundo. Está la gente más rica que existe, empezando por el hombre más rico del mundo, y la gente que menos tiene. Es un país de contrastes, de mucho y con mucha vida. La comida es excelente y la gente es muy cálida y agradable. Pero tiene muchos problemas y todo por bastardos que sólo velan por sus intereses. En España me tocó escuchar a mucha gente quejarse de su país, si vivieran aquí, apreciarían más España en muchas cosas. Pero ojo, eso no quiere decir que España sea superior, simplemente diferente, tan diferente que yo decidí regresar a mi país.
Volviendo a terrenos musicales, de México han salido buenas bandas, sobre todo en lo que a Metal Extremo se refiere, me viene ahora a la cabeza DISGORGE y THE CHASM, SHUB NIGGURATH, CENOTAPH... ¿Qué otros grupos compatriotas tuyos destacarías? ¿Cuál grupo crees que sería el más conocido de México, además de BRUJERÍA que es más internacional que mexicano para mi gusto?
México es un país de Metal Extremo, la forma de vida del país se encarna en la música y por eso salen bandas tan violentas. Las bandas que mencionaste son de los mejores ejemplos de la escena mexicana. Pero por otra parte hay bandas como INHEARTED, PIRAÑA, THE ILL OVER DEATH y HACAVITZ que realmente están haciendo cosas interesantes. Los invito a escucharlos, son máquinas de destrucción Azteca.
Yo diría que el grupo más reconocido de México es THE CHASM, si no los han escuchado, se están perdiendo un Death Metal de cágate. Por otra parte el mejor disco hecho en México para mi es el “9 Epic Rites And Death Tales” de CENOTAPH, una obra maestra de Melodic Death Metal, pero del crudo, no del putito como IN FLAMES, etc.
¿Qué planes de futuro tienes para TICKET TO HELL?
Pues el más próximo es grabar un split de 3 bandas con INHEARTED y THE ILL OVER DEATH. Después voy a empezar a componer el nuevo disco y a ver si hay posibilidad de promocionar “Man Made Paradise” en Europa el año que viene.
Esto es todo Jacobo, muchas gracias por tu tiempo y espero que sigamos oyendo el nombre de TICKET TO HELL vivo en el futuro, mucha suerte para ello. Si quieres añadir cualquier cosa para los lectores de RockTotal, ¡este es el momento!
¡¡¡TICKET TO HELL no va a morir!!! Esperen un nuevo material mucho más brutal que el anterior y recuerden, Only Death Is Real!!!!
Vuelve este grupo de Death Metal sueco "old
school" con su ya quinto disco (segundo en Xtreem). Han perdido a su
guitarrista solista en el camino, y aunque Rogga no realiza unos solos muy
imaginativos, cumplen su función y evitan que, de momento, no se eche de menos
esta baja. Lo que no han perdido es su potencia, ni sus raíces. Siguen
desprendiendo GRAVE y DISMEMBER por los cuatro costados. No dicen nada nuevo,
pero tienen una calidad tremenda y un sonido estupendo, de lo mejor que se ha
editado en Death Metal en mucho tiempo.
La producción corre de nuevo a cargo del grupo en los
Soundlab Studios (qué raro ¿no?) y masterizados por el gran Dan Swäno (¿alguien
lo dudaba?), lo que garantiza un sonido potente, pesado y lleno de fuerza. Los
miembros del grupo en su línea: una sección rítmica tremenda, con una batería
que te deja exhausto con sus constantes cambios de ritmo, y una voz brutal, muy
en la línea de grupos similares como VOMITORY, INSISION o BLOODBATH. Aunque
sobre la voz hay que decir que en este disco han introducido más registros: uno
gutural super-oscuro y otro más agresivo.
El disco recorre cerca de cuarenta minutos brutales, sin
descanso para el oyente, sin intros ni otras cosas similares, sólo buena música
impecablemente facturada. Se abre con un trallazo lleno de ritmos Thrash:
"No Divine Rapture", probablemente el tema más directo y brutal del
disco, plagado de riffs muy pegadizos. "On Your Knees", nos hace caer
de rodillas, como dice su título, ante el grupo. Un inicio a lo VADER que da
paso a un tema más ralentizado en algunas partes, pero igualmente potente.
"Nailed Forever" es el tema más pegadizo de todo el disco, con riffs
simples pero que dan en el clavo, y con un ritmo central que hace saltar del
sitio al más tranquilo y pausado. "Brutallity Torn Sanity" nos
introduce en una estructura variada, con partes Doom, otras más rápidas y
distintos registros de voz. "Devour Digest Defecate" y "Abscess
in Black", tienen un desarrollo más clásico; puro Death sueco plagado de
ritmos Thrash y de riffs pesados. "The Plague That Hunts" y "Way
Of The Rotting", tienen partes a medio tiempo al más puro estilo BOLT
THROWER, aunque de nuevo predominan los ritmos Thrash de este estilo. El disco
se cierra con una genial "Ingen Utväg" cantada en sueco con la voz
más agresiva de todo el álbum. Es un tema sin descanso para las cervicales que
es un excelente punto y final para el trabajo.
Se puede decir que es un disco más variado en lo que a
estructura de temas se refiere, pero en sonido siguen como siempre. De todas
formas tampoco hace falta que cambien, porque su potencia y sus riffs hacen que
sea difícil que los olvides y que tengas ganas de experimentar toda esta fuerza
en directo. Lamentablemente no se prodigan por estas latitudes. Un disco
excelente, imprescindible para cualquier fan del mejor Death sueco envejecido
en barrica de roble.
El
sello austríaco Noise Head Records debe tener un vínculo especial con España,
porque si ya los andaluces KILLEM acaban de editar su segundo disco con ellos,
ahora lo hacen SICKROOM, desde Tortosa y en este caso siendo su debut. Dejando
a un lado reflexiones sobre el sello, y usando un tópico periodístico, SICKROOM
se presenta en sociedad con un sorprendente “That Killing Silence”. Y digo
sorprendente no por su contenido musical, que aunque notable y no precisamente
raspado, no deja de ser algo “conocido” como luego comentaré. Lo digo por el
propio pasado del grupo, según cuentan en la biografía de su MySpace: lo que
empezó siendo una banda de versiones de METALLICA, OZZY, IRON MAIDEN, en
definitiva, Metal en su cara más mainstream, ha evolucionado hacia un Deathcore
o Death Metal melódico con toques Hardcore para ser más precisos, que trae a la
mente los mejores momentos de un género que ha dado bandazos y mutado al
albedrío de los jefes de las grandes discográficas, hasta que ha terminado por
estallar en pedazos.
Si
se leen opiniones sobre “That Killing Silence”, la suerte que tiene el haber
recibido este disco cuando ya lleva varios meses editados, casi todos lo suelen
catalogar dentro del Metalcore. Recurso fácil, aunque no seré yo el que niegue
que para en pocos segundos resumir a SICKROOM puede ser tentador tirar de la
citada etiqueta. La banda de Tortosa se nota que ha bebido de las corrientes
más actuales (o al menos hasta hace un par de años), pero partiendo de unas
bases mucho más clásicas. Lo suyo es Death Metal melódico a través de otros: a
través de UNEARTH, AS I LAY DYING y THE BLACK DAHLIA MURDER, como ellos mismos
reconocen, a lo que añadiría sobre todo unos primerizos ALL SHALL PERISH, dada
la combinación de dos voces tan antagónicas como la más Hardcore y una aspirada
y brutal de puro Death Metal y algo de los primeros NEAERA también.
Sin
embargo, y aunque se podría uno quedar en el párrafo precedente, yo creo que
SICKROOM tiene más en cuenta incluso el paso inmediatamente anterior, es decir
AT THE GATES y sus derivados. Se nota en las melodías, se nota en los solos y
se nota en la voz agresiva, pero sobre todo se nota en que los elementos
Hardcore son secundarios y la producción se centra más en el riff. Dicho esto,
SICKROOM, los consideres Metalcore o los consideres Death Melódico, es un grupo
a tener muy en cuenta porque, dentro de lo habitual de su sonido, se despegan
de la tercera generación y miran de forma más directa hacia atrás. Sólo les
pondría un pero en los resultados: la producción es muy buena, clara en las
melodías, brutal en los ritmos y permite hacer audibles ambos registros
vocales, pero la batería me suena un poco artificial. Especialmente el uso de
los platos y el charles parece que está disparado, cuando es evidente que es un
ser humano el que anda detrás. Dejando este detalle, el resto gana en
intensidad y efectividad por momentos.
Al
igual que los citados ALL SHALL PERISH, el grupo español demuestra dotes
compositivas en temas largos y bien estructurados, aunque sin repujados
excesivos que hagan perder el hilo: la propia “That Killing Silence”, con
alguna de las mejores melodías del plástico, pasa por diversos tempos sin que
uno tenga la sensación de discontinuidad; la pesada “Imposed War” (quizás la
que más sufre con el sonido de batería al que antes me refería), tema menos
inmediato, pero no por ello menos efectista; y ya en la segunda mitad, “Hand Of
Salvation”, cuya entradilla recuerda a los últimos AMON AMARTH, siendo una de
las más emotivas en las melodías, sin perder fuerza en su desarrollo. Otros
cortes pueden resultar menos sobresalientes, aunque no bajan el nivel: “When
Tragedy Found A Martyr”, pese a su brutalidad innata, es demasiado continuista
con su predecesora y pierde algo de fuerza; “The Answer”, de inicio decadente y
reflexivo, se hace un poco larga y “I Deny”, que vuelve a la onda de “When A
Tragedy Found A Martyr” puede resultar algo menos inspirada, pero aún así con
muy buenas melodías. Sin embargo, en conjunto el grupo puede presumir de haber
conseguido un debut muy prometedor y con buenas referencias.
Originales no son, pero tampoco les falta calidad y sólo el tiempo dirá
su propuesta consigue seguir adelante o estancarse y sufrir problemas para
mantenerse viva. SICKROOM irrumpe así con “That Killing Silence” en un género
que en España no ha llegado a cuajar y además mirando a donde se debe: las
pseudo copias, de otras copias, que a su vez lo son de otras, no llevan a
ningún sitio. Ellos huyen de todo esto. Buen debut.
Que
el Thrash en España ha vuelto a tener un lugar protagonista es algo que nadie
puede discutir. Bandas como OMISSION, LEGEN BELTZA, RANCOR, ANGELUS APATRIDA,
HELL-TRAIN… lo atestiguan, dando vida a una escena española que no me cansaré
de decir, cada vez goza de mejor salud. Y dentro de esta savia nueva tienen uno
de los puestos de honor los andaluces KILLEM, cuyo debut en larga duración,
“Muted” me dispongo a comentar.
Con
buenas referencias previas, y la escucha de su anterior trabajo, su demo
“Void”, que me sorprendió gratamente, las ganas del que suscribe por escuchar
“Muted” eran grandes, y más después del éxito cosechado en una serie de
conciertos realizados por España con algunas de las otras bandas Thrash
españolas citadas en esta reseña. Su Thrash técnico pero a la vez pegadizo, con
reminiscencias a los primeros MEGADETH, ANNIHILATOR... era de lo mejorcito, y
tenía curiosidad por saber qué nivel alcanzaban en un trabajo más ambicioso
como es “Muted”. El resultado, como a continuación relataré, es muy bueno, con
algún punto débil, pero en general cubre las expectativas con creces.
Pero
voy a ir por partes. Lo primero que me llamó la atención mientras mis oídos
eran golpeados con “Cancer”, el corte de apertura del trabajo, fue la presentación
del CD. Inquietante y sencilla portada y un extenso libreto, que aunque sea
algo secundario, se agradece. Lo siguiente que me llamó la atención, y que es
el punto fuerte de este trabajo, ya centrándome en aspectos musicales, fue la
madurez compositiva que ha alcanzado el grupo. Los temas son más complejos,
cañeros y variados que en su demo, haciendo gala de riffs más veloces, giros
mejor pensados, estructuras más trabajadas y unos solos notables. Todos estos
elementos se juntan y dan lugar a un gran disco de Thrash, cañero, técnico y a
la vez no exento de melodía, que gustará a todos los aficionados al género.
El
punto débil viene de la mano de una producción demasiado compacta y gris. El
sonido es bueno, pero demasiado monolítico, haciendo que las guitarras pierdan
matices y sean tapadas en ocasiones. Gana en crudeza, pero pierde en el
resultado global. Eso sí, es lo único un poco menos bueno de un trabajo
magnífico, y es una pena, porque las guitarras de Javier y Victor son excelentes
a lo largo de todo el disco, haciendo que algunos de los riffs se queden bien
grabados, y aportando el toque de melodía necesario en unos solos bastante
logrados, que encajan a la perfección en los temas y dan un toque de variedad
mayor. La batería de Ramón también es de órdago, haciendo gala de buenos
cambios, y aunque Gonzalo quede un poco tapado debido al problema de producción
citado, su papel también es esencial. No me olvido de su gran vocalista Alex,
que aunque sigue teniendo un cierto aire a MEGADETH, se ha vuelto más agresivo,
rasgando más el tono y haciendo más variado su trabajo.
En
el apartado de temas a destacar, la tarea se me hace más difícil porque la hora
de duración de “Muted” da para mucho. La triada de “Revenge”, “Behind The Lie
Of Perception” y “Void” es absolutamente gloriosa, sobre todo el segundo de los
citados, uno de los temas a la vez más cañero y más asombroso en estructura.
“Biolypse” quizás sea otro de mis favoritos debido a su variedad de elementos y
a su apoteósico final donde es imposible no mover la cabeza sin parar. En el
apartado más rítmico y reposado, sin dejar la potencia a un lado, “Neverending
Pain” es un gran tema, quizás demasiado largo al final, pero en general muy
bueno. Algo similar le pasa a “Full Force”, siendo seguramente mi tema menos
preferido porque creo que lo extienden demasiado. Afortunadamente, “Hate” con
un riff tan típico como adictivo y “Faithless Priest”, con su descomunal inicio
y donde Ramón da una lección de batería, ponen el broche de oro a este gran
disco.
En definitiva, KILLEM se ha sacado de la manga un discazo. Aunque deben
pulir un poco su sonido, el resultado compositivo es tan grande, que no tengo
más remedio que recomendarlo. Para un fan del Thrash como el que suscribe, que
surjan grupos como KILLEM es una grata noticia y si encima lo hacen tan bien,
la cosa es aún mejor. Ojalá sigan mucho tiempo, porque calidad tienen un rato.
Si te gusta el Thrash, ya estás tardando en hacerte con “Muted”.
Aquí
tenemos el primer disco del grupo sevillano KILLEM, Death-Thrash técnico de
primera línea que... Espera un momento, ¿KILLEM? ¿Los de “Void” y “Muted”? Una hora
después de escribir estas dos líneas vuelvo a sentarme delante del ordenador,
tras reescuchar los citados trabajos (su demo y primer disco respectivamente).
No, no estamos ante el debut, y sí, son los mismos KILLEM que con “Muted” me
hicieron soltar alabanzas, a la par que el deseo de obtener un mejor sonido que
les hiciese brillar. ¿A qué viene entonces esta introducción surrealista? A que
“Reflections Of Decline”, cuatro años después, es el nacimiento de unos nuevos
KILLEM: un nuevo estilo, nuevos registros, nuevas facetas, nuevo sonido pero...
increíbles resultados. ¿Comparaciones? como siempre odiosas, así que lo mejor
es no tener en cuenta ni “Muted” ni “Void”, esto es simplemente un gran
trabajo, de un grupo que evoluciona. ¿Que se llaman KILLEM y “hacían” Thrash?
Sí, y lo siguen haciendo, sólo que mirando hacia vehículos de expresión que les
permiten formar una personalidad propia más fuerte y duradera.
Poniendo
en orden las ideas, KILLEM se caracterizaba en “Void” por un Thrash avanzado,
pero influido por los clásicos, especialmente unos MEGADETH que salían por boca
de Alex L. Demise y se reproducían en muchos riffs y melodías. “Muted” ya fue
una vuelta de tuerca en este sentido: el lado técnico se potenciaba, el sonido
se recrudecía y Alex rasgaba un poco su voz. El resultado fue que ANNIHILATOR y
TESTAMENT en sus épocas más agresivas hacían su aparición, junto algún momento
más progresivo y avanzado si cabe que hacía pensar en SADUS aunque aún
limitadamente. Hasta ahí se resumían cinco años de existencia, con una
evolución exponencial a la que le faltaba madurar y sobre todo gozar de un
mejor sonido, punto flaco del grupo. Es normal que, el transcurso de casi otros
cinco años, generaran un salto. Sólo hacía falta saber hacia donde. Pues bien,
“Reflections Of Decline” no sólo da un salto, más bien se ha teletransportado a
otra dimensión, analizada fríamente se podría decir que “natural”, desde el
oído acostumbrado a “Muted”, claramente rupturista.
La
música ha abandonado su lado más clásico. Sólo TESTAMENT se mantiene en los
momentos más Thrash, pero los TESTAMENT del “The Gathering” y sus alrededores.
No se puede decir lo mismo de SADUS, que pasa a ser la referencia Thrash
principal. Pero no es aquí donde está el gran salto: escuchando “Reflections Of
Decline” uno puede entrever muchas otras cosas: en el lado más “moderno”,
especialmente STRAPPING YOUNG LAD y unos MESSHUGGAH de la primera época, cuando
lo suyo eran amalgamas de riffs y ritmos que mezclaban la influencia de los
noventa con la obsesión crimsoniana (léase “Contradiccions Collapse”), y en
consecuencia, sus muchos seguidores (TEXTURES, GOJIRA, THE END...). En el lado
clásico, DEATH pasa a primer plano, en la etapa del “Symbolic” y alguna
reminiscencia del “Human” (“The Abyss” sería un ejemplo). En definitiva, tal y
como avanzaba al principio, KILLEM ha pasado a ser un grupo que puede
catalogarse, simplistamente, como Death Thrash, al que hay que añadir el
adjetivo de técnico o progresivo para tener una idea más completa. Sin embargo,
y si en el pasado las referencias eran claras, en “Reflections Of Decline”,
todo es juntado y desarrollado de forma personal y orientada hacia su propio
estilo, y no es un tópico.
Precisamente
aquí radica el gran paso adelante en mi opinión: dejando a un lado cambios
estilísticos, nuevas referencias, o cambios en sus propios componentes, KILLEM
construye en “Reflections Of Decline” un todo, a partir de una multiplicidad de
raíces. La presencia de temas más directos y “asequibles” como “Spiral” (composición
escogida como videoclip, de forma muy acertada), “Dawn” o “The Cage”, que
sirven de resumen para la cara más Thrash-Death de KILLEM, se mezclan con
cortes avanzados y repujados, retorcidos y perfeccionistas, donde es fácil
perderse y uno necesita de varias escuchas para poder seguir sus estructuras
llenas de contrastes: sólo así uno podrá comprender cosas como “Façade”, cuya
segunda mitad a más de uno le sobrará y sin embargo pienso que no desentona, a
pesar de venir precedida de tres temas más directos; o “Taker”, tema corto pero
intenso, por tirar de tópicos, pues la telaraña rítmica es de órdago. Pero es
el conjunto el que brilla: KILLEM suena a todo y a nada, en resumen, suena a
KILLEM, después de dos trabajos asentando sus cimientos, ahora tocaba edificar
su propia casa y el resultado es “Reflections Of Decline”.
El
resto de la evolución viene presidida por una producción, conseguida en los
estudios portugueses Ultrasound que por fin cumple con las expectativas, y la
propia madurez de sus componentes. Así, la sustitución de Víctor Silvestre, el
que fuera guitarrista rítmico de la formación, por David Marín, es el único
cambio de formación, pero el resto parece que se hubieran transmutado en nuevos
músicos, y entre todos han dado forma a otro KILLEM. Alex es el de
transformación más llamativa, cambiando su registro a una voz Death, mezclada
puntualmente con otra limpia que ayuda a evocar momentos más atmosféricos (como
ocurre en “Ephemeral”, cuya parte final cambia brutalmente hacia unos terrenos
que casi recuerdan a los OPETH más relajados, o el final de “Crossroads”, uno
de los momentos más oscuros y decadentes del disco, y continuista con el
anterior), pero no es el único: el toque efusivo de Ramón Nissen se ha vuelto
obsesivo y sincopado, mecánico y preciso; Javier Escaño y su nuevo compañero
David Marín, se convierten en camaleones que escupen pesados riffs que parecen
de guitarras de ocho cuerdas al más puro estilo MESSHUGGAH, y al mismo tiempo
pasajes de elegancia y técnica, como los muchos solos que pueblan el trabajo, o
las partes de inspiración jazzista (“Façade” a la cabeza); y ya no digamos
Gonzalo, el cual aumenta la presencia de su instrumento y hasta tiene momentos
de lucimiento como el brutal inicio de “Façade” (tema de contrastes desde
luego) y de “Crossroads”, y cómo no la parte central de “Taker”.
En resumen. Bienvenidos KILLEM, re-bienvenidos más bien. Con
“Reflections Of Decline” el grupo sevillano puede que genere un esfuerzo extra
en sus seguidores, les ganará nuevos adeptos en busca de sonidos más avanzados,
y les otorgará detractores que dirán que llegan un poco tarde para estas
mezcolanzas, y que deberían quedarse mejor en la “clase media” del Thrash de
libro ahora que está tan de moda. Para mí, hablando con total subjetividad, lo
reconozco, el grupo andaluz ha conseguido su pieza clave: la culminación del
trabajo y del tiempo de asimilación, maduración e investigación. Un artista no
sólo reproduce, crea, y eso es lo que ha hecho KILLEM en “Reflections Of
Decline”. Un paso adelante de gigante, que esperemos se precedente de otros
muchos.