jueves, 22 de septiembre de 2016

TEXTURES - "Drawing Circles": la migración de los sonidos.


Cada año surgen nuevas bandas y aunque muchas no pasan del subsuelo musical, otras consiguen abrirse paso gracias a interesantes propuestas que se desmarcan por méritos propios. Este es el caso de los holandeses TEXTURES, una joven banda que en poco tiempo está dando qué hablar y que a buen seguro pronto estará a la altura de los grandes.

"Drawing Circles" supone el segundo disco del grupo, después de "Polars", un debut bastante interesante, en donde ya se veía que TEXTURES atesoraba buenas maneras a la hora de componer, aunque la producción le restaba un poco de brillantez y la voz acababa por resultar un poco monótona en sucesivas escuchas. Los holandeses han conseguido superar su primer trabajo gracias a unas composiciones mucho más trabajadas y un sonido casi perfecto, además de la incorporación de un nuevo cantante que ha sabido dar a los temas del grupo el punto que les faltaba para llegar al clímax musical, y las suficientes dosis de variedad para ampliar sus horizontes musicales hacia nuevos límites, como los que buscan las aves de la colorista portada.

No todo es bonito no obstante, pues siguen manteniendo su poderosa influencia de los suecos MESHUGGAH o de los franceses GOJIRA, como prefiráis, pero sus composiciones se han enriquecido con atmósferas y estructuras más complejas que las hacen más variadas y a la vez accesibles, y esto no lo digo de manera peyorativa. Los miembros de TEXTURES han conseguido reunir en este nuevo disco elementos de inspiraciones tan opuestas entre sí, que conseguirán a buen seguro llegar a un público más heterogéneo, no tan centrado en las tendencias extremas, sin por ello dejar de ser interesantes, o venderse al comercialismo barato.



"Drawing Circles" es capaz de sorprendernos con temas como "Regenesis", uno de los cortes más consistentes del disco, que combina la potencia de unos riffs repetitivos y contundentes, con unas voces muy conseguidas que mezclan el Death Metal y el Hardcore a partes iguales, con pasajes de teclados hechizantes y unos coros melódicos, contrapunto perfecto a las partes agresivas, que son realmente conmovedores. Pero la contundencia no es la única nota presente en las composiciones del grupo. Si hay algo por lo que TEXTURES destaca es por la capacidad que tiene de reunir elementos de muchos estilos y texturas diferentes (nunca mejor dicho el término, teniendo en cuenta como se llama el grupo), con lo que el aburrimiento es difícil que aparezca en nuestras mentes.

El trabajo va discurriendo sin apenas pausas, pero no por ello su escucha se hace menos inmediata, ya que en los temas se van sucediendo atmósferas capaces de transmitir las sensaciones más extremas, en todos los sentidos: desde la rabia más contenida, hasta la delicadeza más sutil. La culpa de todo esto la tienen unos magníficos teclados y unas guitarras capaces de pasar por los pasajes más variados que te puedas imaginar, en forma de poderosos riffs, pero también de melodías muy cuidadas. Composiciones como "Illumination" y su magnífica continuación "Stream Of Consciousness", contienen algunas de las atmósferas más enigmáticas del disco, pero siempre sin olvidar la fuerza del Death Metal más técnico. También destaca "Touching The Absolute", tema donde Erik Kalsbeek directamente se sale, dando muestras de que este cantante no se rinde ante ningún registro vocal.

En resumen, TEXTURES ha conseguido evolucionar, y hacerlo hacia el buen camino, hacia la madurez compositiva, hacia el crecimiento como músicos y como banda en conjunto. Pocas bandas son capaces de en dos trabajos dar tanto de sí mismas y mejorar (MASTODON es una de estas bandas...). Su música tiene los elementos suficientes para que cualquier aficionado tanto a las tendencias actuales del Metal, como a los sonidos extremos y técnicos disfruten como niños. Siguen arrastrando poderosas influencias, pero han escogido la senda adecuada. Habrá que estar atentos al futuro de la banda, pero mientras tanto "Drawing Circles" se perfila como uno de mis álbumes favoritos de este 2006.

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WALLS OF JERICHO - "The Bound Feed The Gagged": el albor de la bestia Candace


¿Un nuevo disco de la banda de Detroit? No, mucho mejor, cuando este disco cayó en mis manos la alegría me invadió: es la reedición del primer disco completo de WALLS OF JERICHO. Vale que la producción no es de las mejores del grupo, pero en “The Bound Feed The Gagged” WALLS OF JERICHO estaba en pleno destape del tarro de sus esencias y todo su pasado más auténticamente Hardcore y menos metalizado estaba en auge, lo que convierte a este disco en uno de mis favoritos de este estilo en su segunda fase (la de los noventa), y que ahora además tengo oportunidad de comentar con motivo de esta reedición.

¡Amantes de SICK OF IT ALL, BIOHAZARD…! aquí tenéis a WALLS OF JERICHO en estado puro! Poco más de 22 minutos de absoluta furia, de excitación indescriptible, con la vocalista más agresiva que te puedas echar a la cara, cargado de efectividad, con unos riffs que se clavan a fuego en el cerebro y temas directos a la yugular para montar tu propio foso de conciertos en casa mientras destruyes los muebles a tu alrededor. Vale, quizás me he pasado con este discurso pseudo demagógico, pero es que escuchar del tirón “The Bound Feed the Gagged” es toda una experiencia ante la que es imposible no reaccionar. Ni el hecho de que el sonido de guitarras no sea todo lo duro que debiera (aunque creo que han realizado cierta labor de remasterización porque suena mejor que nunca), ni el hecho de que sea un disco y no un directo, algo que coarta bastante el desmelene, va a evitar que te lo pases como un enano ante este disco.

Lo mejor de todo, después de unos 8 años desde su edición, es que “The Bound Feed the Gagged” parece grabado y compuesto ayer. Es una pasada la actualidad que tienen los temas, la fuerza que despliegan y la capacidad de enganche que tienen Candace Kucsulain y sus compañeros. Desde “Playing Soldier Again”, de inicio marcial y con Candace calentando sus cuerdas vocales con una buena colección de gritos para comenzar, el disco empieza a soltar exabruptos musicales y es un no parar de potencia descontrolada. “Home Is Where The Heart Is”, continúa la senda de la agresividad, no exenta de groove y contundencia, a base de ritmos Thrash y asaltos vocales a los que el calificativo de extremos les queda corto. Al igual que la cortísima “Changing Times”, donde los coros y el tono de voz menos agresivo de Candace Kucsulain le da un toque muy clásico. ¡Para que más¡ si aún no estas seguro de la grandeza de este trabajo, la destructiva “Misanthropy” que generará que tengas ganas de golpear algo, terminará por convencerte. O “Family Values”, cuyo inicio vacilante y cargado de disonancias prepara el vuelo de un obús que se estrellará en nuestras caras asombradas.



El punto curioso del trabajo viene de la mano de “Angel”, la “balada” del disco, con guitarras acústicas y una Candace cantando claro, que aunque no es lo mejor de esta obra, no deja de ser sorprendente su inclusión en un trabajo de estas características. En cualquier caso, es inútil seguir hablando de este trabajo. Si te gusta el Hardcore de segunda hornada, cargado de agresividad, velocidad y contundencia, “The Bound Feed the Gagged” es de compra obligatoria. Cortísimo se hace, eso sí, pero lo bueno si breve…

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martes, 20 de septiembre de 2016

TAIFA - "Alhambra": Crisol de culturas y sonoridades.


Mallorca, tierra visitada una y mil veces por miles de extranjeros al cabo del año, acabando por convertirse en una de las fuentes de ingreso fundamental para España. Bella isla, aunque con un encanto demasiado escondido debido a la masificación que padece. Descanso o actividad, playa y muchos lugares de interés... pero hace unos días se cruzó en mi camino algo que nunca pensé que saldría de allí: TAIFA. Escucho “Alhambra” y tengo que mirar una y otra vez los créditos del libreto para grabarme a fuego el hecho de que TAIFA no son andaluces. Y es que una vez más, la música traspasa fronteras físicas y culturales y llega hasta sitios insospechados con resultados, como es el caso, excelentes y sorprendentes.

Aunque puede parecer que TAIFA acaba de llegar, el trío mallorquín (y una serie de imprescindibles colaboradores a caballo entre Andalucía y Marruecos) edita con “Alhambra” su segundo disco. El anterior, “Más Allá Del Sur”, editado por Avispa y producido por el gran Manuel Martínez de MEDINA AZAHARA tiene su nacimiento en 1999. Desde entonces han pasado casi diez años. Un excesivo tiempo que, sin embargo, ha dado sus frutos con una formación totalmente renovada, siempre con Luis Massot al frente, y un trabajo, “Alhambra”, autoeditado y producido desde el cariño, desde el esfuerzo y desde la maduración absoluta. El objetivo no podía ser más ambicioso: Metal Progresivo, mezclado con Flamenco, Musica Andalusí y algún que otro toque de actualidad de la mano de unos samplers muy secundarios pero siempre presentes. La Fusión en estado puro, y como resultado casi tres cuartos de hora de emoción, de sentimiento, de vida. Recogiendo lo mejor del pasado del Rock Andaluz, que tuvo a los propios MEDINA AZAHARA como estandartes y a TRIANA como piedra angular, mezclándolo con la dureza de las guitarras metálicas, y teniendo una devoción absoluta por el Flamenco (la voz de Luis Massot es prodigiosa y tiene muchas tablas en los palos del Cante Hondo), cada canción de TAIFA se convierte en una pequeña historia, en un viaje intergeneracional e intercultural, en una experiencia muy cuidada, tanto instrumental como líricamente hablando.

La Bulería, la Copla, la música norte africana Andalusí... todo parece entrar en hermandad total con el Rock y la música progresiva. Sin miedo a equivocarme, estamos ante los ORPHANED LAND españoles, nunca antes había escuchado una fusión tan bien encajada y trabajada. Bueno sí, los catalanes SARGON también consiguieron en su momento una buena conjunción, pero es que TAIFA no es Metal con toques de Flamenco o árabes, TAIFA es Flamenco, es Metal, es Música Andalusí... es todo ello y mucho más. No son toques o influencias, TAIFA coge toda su raíz cultural y ofrece algo personal, propio y único. La única pega que le veo es que es un disco tan rico en matices que hay que escuchar detenidamente para no perderse. No hay partes especialmente pegadizas, a excepción de algunos estribillos fáciles de recordar en sucesivas escuchas, no hay elementos pensados para hacer fácil la degustación del trabajo. Lo mejor que se puede hacer para afrontar la escucha de “Alhambra” es darle al “play” y dejarse llevar por cada pasaje sin parar a fijarse mucho en los temas según pasan. Pero lo que parece un problema, es también una virtud porque “Alhambra”, como todo buen libro, se debe y se disfruta leyéndolo de principio a fin, sin relleno ni espacio baldío. Una experiencia de la que empaparse completamente.

Dentro de la complejidad estructural de la música de TAIFA, no tanto porque se pierdan en virtuosismos innecesarios, sino por la mezcolanza de sonidos y pasajes, el sonido natural y puro conseguido por Antonio Fructuoso y Anas Alauí en Tetuán, y la propia viveza de la entonación de Luis Massot, el sentimiento de los violines de Nourdine Chkara, la contundencia de Martí Riera y Antonio Medina, el Flamenco de Juan Delola y Andrés Manzano, así como la fundamental colaboración esporádica de Ricardo De La Concepción con su piano de aires Jazzy, consiguen hacer de “Alhambra” un disco riquísimo y muy completo al que no importa dedicarle todas las escuchas que haga falta para llegar a exprimirlo hasta sus últimas consecuencias. Además, cada escucha genera una nueva sensación, y os lo digo por experiencia que ya llevo unas cuantas en los últimos días y no me canso de reescucharlo. Si el “Color De La Libertad” puede recordar a unos MEDINA AZAHARA evolucionados, sobre todo por la facilidad del estribillo y la tonalidad de Luis Massot, “Las Torres De Babel” contrasta por su introspección y oscuridad. Las guitarras flamencas de Delola se mezclan en un tema desgarrador en donde todo el grupo suena con una sola voz. Mucho más arábigo y andalusí es “Alhambra”, uno de los mejores temas del trabajo gracias al violín de Chkara y al piano de Ricardo y los continuos cambios de Massot, siendo probablemente uno de los temas más completos y accesibles del disco.



Se ha pasado así la apertura del trabajo, con tres temas excepcionales, cada uno un mundo, pero todos derrochando energía y sentimiento. Sin embargo, la parte central de “Alhambra” es mucho más reflexiva y madura. Aquí el Flamenco es el hilo conductor de gran parte de las composiciones, “Nada Que Perder” comienza con la guitarra de Delola, el cual se erigirá protagonista de uno de los cortes más melancólicos y a la vez enérgicos. Pero lo mejor viene en los dos siguientes temas. “Nunca Es Tarde” se abre de manera enigmática, de manera íntima, a ritmo de Copla y Jazz, con un Massot descomunal. El sonido de bajo acústico, que huele a madera, el cajón, el piano, la guitarra flamenca, el violín... todo convierte a los cinco minutos de este corte en magia. Y para contrastar “La Casa Del Olvido”, sin abandonar el Flamenco, recupera el aire más accesible de la Bulería, con un componente metálico más presente. Para cerrar este nudo del disco, “Fe” ofrece una continuación de “La Casa Del Olvido”, con un aire mucho más andalusí y oscuro, pero que mantiene el nivel de manera excepcional. Tras estos momentos de comunión con la banda, la recta final de “Alhambra” ofrece una cara algo más alegre y pasajera, pero no por ello menos interesante. “Sin Saber Por Qué”, con sus potentes riffs iniciales, recupera el peso del estribillo y las estrofas dobladas que hacen que el que los escuche se vea contagiado de energía y quiera corear los versos con la banda. “Por Un Trocito De Cielo”, con una gran labor de Martín Riera tanto solista como rítmicamente, pone el lado más sentimental y desgarrado, sobre todo por el contenido de su letra, pero siempre manteniendo ese aire más luminoso de esta parte final del trabajo, con palmas y jaleos incluidos. Finalmente “Mendigos De Una Ilusión” ha sido escogido sabiamente para cerrar “Alhambra” de una manera progresiva y compleja como pocas. Quizás sea el tema de estructura más arriesgada, un poquito alocada sobre todo al final, pero sirviendo de resumen de toda la fusión que ofrece TAIFA.

Como dice la propia banda, ¡pura fusión! Alejados de convencionalismos, regalando nuestros oídos con una enciclopedia de sonidos que recogen lo mejor de nuestra cultura, de la cultura de nuestros ancestros y la excitación del Rock, TAIFA se reivindica en “Alhambra” como una banda a tener muy en cuenta. Pienso que aquí hay calidad, música y pasión suficiente como para que “Alhambra” traspase fronteras y llegue más allá que a la categoría de hito localista. El arte es universal y la música es arte, luego con un simple razonamiento lógico deductivo, “Alhambra” tiene todo lo necesario para gustar a cualquier amante del arte en cualquiera de sus concepciones. El esfuerzo, las ganas y la ilusión se premian, y el regalo es este trocito de cielo por el que TAIFA ha dado toda su vida. Geniales.

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lunes, 19 de septiembre de 2016

ATHEIST - "Piece Of Time", "Unquestionable Presence" y "Elements": Una trilogía fundamental


¡Auténticas joyas! No se puede ser más tajante en el inicio de una crítica, pero no es para menos, estamos ante tres reediciones únicas, los tres discos que grabaron ATHEIST desde 1990 hasta 1993, tres documentos únicos que hicieron que junto a DEATH, CYNIC y PESTILENCE, ATHEIST estuviera a la cabeza del Death Metal más técnico y experimental.

No hay palabras para definir la música de este grupo nacido en 1984 y desgraciadamente ya extinto: simplemente estamos ante un Death Metal de impecable factura, pero con una evolución imparable que convirtió a ATHEIST en el grupo pionero de la fusión entre Metal extremo y Jazz (incluso llegando más lejos que DEATH y PESTILENCE). Cualquiera de sus tres discos son únicos y totalmente recomendables. Aún así voy a tratar de definir a grandes rasgos la música contenida en estas tres obras maestras.





"Piece Of Time", el debut de la banda, es una obra más tradicional, más cruda y poderosa, dónde la técnica ya estaba presente (y de qué manera), pero la música recorría terrenos más viscerales y directos. Riffs y ritmos de puro Thrash - Death al más puro estilo DEATH de los primeros años, pero con una capacidad para crear estructuras y composiciones complejas que hacen que no puedas cerrar la boca en todo el tiempo que dura. La reedición se ve completada con las tres primeras demos del grupo, que si bien tienen una producción y un sonido muy mejorables, ya denotan mucha calidad. De todas formas, sólo por el esfuerzo que han puesto los de Relapse en reeditar estos discos, con gran cantidad de fotos y comentarios y plenamente remasterizados, merece la pena hacerse con "Piece Of Time", todo un documento histórico y preludio de lo que estaba por venir.





"Unquestionable Presence" da un paso más en la evolución de la música de ATHEIST y nos ofrece a una banda menos directa y mucho más desarrollada en el aspecto musical. Las guitarras nos regalan riffs complejos, armonías novedosas y unos solos increíbles. La fusión con otras músicas como el Jazz, empieza a ser patente y el nivel de las composiciones crece exponencialmente con respecto a su debut. Un año más tarde nos ofrecerían en "Elements" la culminación de esta evolución, pero "Unquestionable Presence" no desmerece nada en comparación con su continuación. Un paso más en la carrera de ATHEIST y otra obra maestra que se apuntaron. La reedición se complementa con una demo más y con las pistas rítmicas (bajo y batería) de "Mother Man" y "And The Psychic Saw", lo que eleva el valor de la obra y hace que si consigues las otras dos, tengas en tus manos todo lo que ATHEIST grabaron.





"Elements" es para mí, la obra más ambiciosa de ATHEIST. Sólo por el hecho de ser el único grupo con la narices suficientes en aquella época, para grabar una samba a su manera, "Samba Briza" contenida en este disco, "Elements" debería estar en los altares. Anécdotas a un lado, el nivel compositivo de los temas de esta tercera obra raya lo académico. Sus doce temas son auténticas lecciones de lo que debe ser Death Metal técnico y con un nivel musical altísimo. Si DEATH y PESTILENCE lo intentaron (creando grandísimos discos, de eso no hay duda), ATHEIST lo consiguieron. Metal y Jazz a partes iguales para deleite de los presentes. Además estamos ante una obra que se puede considerar conceptual, pues a lo largo de sus temas se habla de los elementos de nuestro planeta, lo que demuestra que en el terreno lírico, ATHEIST también tenían lo suyo. La reedición se complementa con una grabación en directo de un programa de radio, dónde nos deleitan con temas de "Unquestionable Presence" y algún tema anterior.


En resumen, todo esta dicho: no sé a qué esperas para hacerte con estas obras que no deberían faltar en ninguna discoteca metálica que se precie. Ya lo decía cuando empecé la crítica, ¡auténticas joyas!. 

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lunes, 5 de septiembre de 2016

THE DILLINGER ESCAPE PLAN - "Ire Works": Fuera de cualquier límite


Ya iba siendo hora. Tres años de ausencia de THE DILLINGER ESCAPE PLAN, una de las bandas con mayor índice de clones por el mundo de la música, aunque la edición de un insulso DVD y un EP de versiones pretendía que no nos olvidásemos de ellos, los seguidores de la locura hecha música estábamos ávidos de nuevos temas. “Ire Works” es el resultado y una vez más, un paso adelante en la trayectoria de una de las bandas con sonido más propio de este mundo.

Lo primero que sorprende es la portada y el diseño del libreto desde el primer instante. Uno cree estar ante una banda de versiones de PINK FLOYD, y si conoces el estilo de THE DILLINGER ESCAPE PLAN te trasladará a ese sentido matemático que tienen en sus composiciones. Sin embargo la curiosidad a saciar mayor pasa por los recientes cambios de formación en el seno del grupo. Por un lado Brian Benoit dejó de ser guitarrista de la banda, con lo que ronda el fantasma alrededor de los nuevos temas de si la mezcla de Hardcore, Math-Metal, Extremismos varios y Jazz sigue presente, o el último de los componentes se ha diluido. Por otro lado, y esta salida es casi más importante, Chris Pennie dejó el grupo para dedicarse a COHEED AND CAMBRIA, y teniendo en cuenta el sentido del ritmo y de la compostura de este gran batería, capaz de tocar a la perfección en todas las facetas del grupo, la duda de si el grado de tecnicismo ha decaído rondaba también por mi cabeza.

Afortunadamente “Ire Works” no deja de ser THE DILLINGER ESCAPE PLAN y tampoco deja de avanzar en la evolución del grupo ya presente en “Miss Machine”. Los temas donde Puciato canta meloso, casi emo, y con variedades de registros dispares, a lo Mike Patton (en algo se tenía que pegar la colaboración que hizo la banda con el citado vocalista de FANTÔMAS, FAITH NO MORE y demás), se mantienen, los cortes típicos de la banda, donde superponen riffs a cada cual más extremo, llenos de minimalismos y locuras por todas partes (marca de la casa) también se mantienen (lo contrario sería perder su sonido), pero además añaden un nuevo elemento: atmósfera y un acercamiento a la electrónica puntual, que siempre ha estado presente, pero que en este disco, en su parte central, se vuelve fundamental.

“Fix Your Face” y “Lurch” serían sendos exponentes de lo que son dos temas puramente DILLINGER. Quizás con menos armonía Jazz, echando de menos esos fraseos tan característicos que superponían a los riffs metálicos, pero no cabe duda de que todo lo que esperas de un tema de DILLINGER está presente en esos dos cortes. Con “Black Bubblegum” llega la influencia de Patton. Un tema donde Puciato adopta aires emo pero forzando la situación hasta límites irrisorios, lo que es un acierto teniendo en cuenta el tono de broma general que tiene este corte, que sin embargo les ha quedado redondísimo. Y de ahí en adelante, las atmósferas comienzan a surgir, entrelazándose con otros cortes más convencionales en el universo del grupo. “Sick On Sunday” es así una experimentación con loops y electrónica variada, con cierto aire Acid Jazz en su trasfondo musical. “When Acting As A Particle” por su parte parece sacada de una película de terror, con instrumentos de cuerda incluidos y un matematismo en el ritmo conductor del corte realmente excitante.

Pasados estos dos interludios musicales, en poco más de un minuto “Nong Eye Gong” recupera esos fraseos de armonía Jazz y la esquizofrenia crimsoniana que se echaba de menos en los dos primeros cortes, con un final realmente destructivo. Este aire matemático y casi opresivo se mantiene en “When Acting As Wave”, que podríamos llamar la segunda parte de “When Acting As A Particle”, nuevamente con experimentaciones electrónicas. “82588” vuelve a los convencionalismos, pero llevado al extremo, con una estructura casi imposible de seguir y algún que otro interludio de ambientación Jazz también. Así se adentra uno en la parte final del trabajo con una joyita oculta del disco, donde THE DILLINGER ESCAPE PLAN hace uso hasta de sección de vientos en pleno alarde de “hago lo que me sale de las narices”. El tema en sí, “Milk Lizard” tiene una estructura muy pegadiza y rockera, con solos muy técnicos y jazzísticos, y destaca por un Puciato nuevamente en estado de gracia haciendo uso de los más variados registros, con estribillo radiable incluido.

Llegamos así a la parte más reflexiva del trabajo, tras el magnífico “Party Smasher”, donde el grupo retuerce las estructuras dando como resultado uno de los temas más completos del disco. “Dead As History” es así un corte más ambiental, como ya incluyeran en su aclamado “Calculating Infinity”, un tema donde el grupo adquiere aires de banda sonora, apoyándose en elementos de la electrónica y que va avanzando de manera progresiva, experimentando con efectos psicodélicos en la voz de Puciato y facturando unas melodías vocales muy pegadizas. “Horse Hunter” mezcla tanto los ataques extremos como las ambientaciones y el Jazz, pero de una manera nunca vista en el grupo, más intensa, más densa y pesada, sorprendiendo a los que esperábamos otro corte “convencional”. Y finalmente, “Mouth Of Ghosts”, el tema más largo del trabajo, recorre en sus casi siete minutos, Jazz de vieja escuela (con acompañamiento de escobillas en la batería incluido) conducido por un piano más que notable, ritmos latinos y un final intenso y memorable.

Se puede decir que THE DILLINGER ESCAPE PLAN lo ha vuelto a hacer. Siguen avanzando en su línea, sin casarse con estilos, sin marcarse límites de ninguna clase. Puede que “Ire Works” sea el disco más variado de su carrera, también al que más cuesta hincarle el diente por su parte central, pero sinceramente, creo que con paciencia uno se da cuenta de lo grande que es. No obstante, si nunca te gustó el grupo y su locura particular, tampoco te va a empezar a gustar con “Ire Works”, ellos siguen a lo suyo y que les siga quién quiera. Para el resto, un paso más en la historia de una gran banda.


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TESLA - "Forever More": Con la frescura de unos niños


¡Ya está aquí! Por fin después de cuatro años y con un doble disco de versiones entre medias, vuelve TESLA, una de las bandas más atípicas en cuanto a estética, sonido y actitud de finales de los ochenta, que ha sabido parir obras del calibre de “Mechanical Resonance”, “The Great Radio Controversy” o “Pshycotic Supper”.  Un eternamente joven Jeff Keith, y sus eternos compañeros Wheat, Hannon y Luccketta, en unión al ya no tan novato Dave Rude, son los artífices de esta maravillosa banda, demasiado feos para ser Hair Metal, demasiado duros para gustar al público más AOR / Hard, demasiado modernos para gustar a los más clásicos... y ellos a su rollo, haciendo buenos discos y dando mejores conciertos. Y por fin, aquí está “Forever More”, con un tiempo de retraso con respecto a su versión americana. Doce nuevas composiciones, un tema extra y un tema en directo en su versión europea. Todo un completo menú para el que es uno de los mejores discos que he escuchado en este año, y lo digo ya quitándome la careta de fan y poniéndome encima la piel más objetiva que puedo tener.

Ya tuvimos el adelanto de “Pvt. Ledbetter” en su reciente DVD en directo, un tema emotivo y pegadizo, y también el vídeo del single, “I Wanna Live”, enérgico y excitante... con lo que las ganas por este nuevo disco estaban más que justificadas. Y el resultado, señores, es buenísimo. Aquellos que no gusten de “Into The Now” por su sonido algo más moderno, encontrarán en “Forever More” un tratamiento de los temas más clásicos, pero sin perder el grado de actualidad de la producción y de muchos riffs de guitarra y líneas vocales. Los que quieran vibrar con temas up-tempo, emocionarse con baladas, sentir la fuerza y la pesadez de los medios tiempos... en definitiva, los que quieran un completo catálogo de lo que es TESLA a lo largo de su historia, encontrarán en “Forever More” todo eso y mucho más. Los que quieran escuchar a Keith en un estado de forma envidiable y tan guerrero como si fuera un adolescente, una vez más, y sin ánimo de ser ya un poco repetitivo, lo encontrarán en “Forever More”. Sinceramente, llevo ya ni se sabe las escuchas de este disco y no me canso, es adictivo, completo, con un sonido enorme y derrocha energía. Es TESLA y punto.

Ordenando un poco mi discurso, “Forever More” destaca por dos notas fundamentales. Por un lado la producción al mismo tiempo moderna y al mismo tiempo con el sentimiento de los ochenta. Este es el punto de conexión fundamental con su carrera más reciente, aunque TESLA puede presumir de tener un sonido propio y reconocible, por lo que ya forma parte de la sustancia de la banda esta característica de sonar al mismo tiempo modernos y no perder su carisma más tradicional. Por otro lado, y he aquí lo mejor de este gran disco, TESLA ha sabido estructurar su trabajo de una manera digna de alabanza. Ofrecer sólo temas rápidos sería un poco aburrido e iría diluyendo la intensidad, ofrecer sólo temas a medio tiempo con contundentes guitarras, les haría perder su toque más clásico, ofrecer sólo baladas les haría edulcorarse demasiado. No, TESLA ha sabido en “Forever More” mantener a la perfección la tensión dramática a lo largo de todo el disco y además conseguir hacernos vibrar con cada canción, dejando ganas en el oyente de volver a escuchar todas y cada una de las composiciones como si fueran hits absolutos.

Y para muestra un botón. “Forever More” empieza con su tema título, sosegado, calentando motores con un tema oscuro y emotivo, pero en el momento en que “I Wanna Live”, tan macarra como enérgica, hace su aparición, el oyente ya está metido de lleno en el disco. Y como pasar otra vez a la lentitud de formas sería un algo poco brusco, “One Day At A Time” insiste en la fórmula del tema directo y guitarrero para lucimiento de Hannon. Junto al anterior tema, estaremos seguramente ante los dos momentos más excitantes del disco con estribillos y guitarras superlativas. Lo que sigue, eso sí, no es menos interesante. Ya dentro de los medios tiempos, “So What!” es otro himno que en directo debe hacer corear a todo el que esté presente en ese momento. Una estructura más moderna, con unas guitarras muy pesadas y el estribillo, brutal, pegadizo, insuperable... Por su parte “Just In Case” y su continuación “Fallin´ Apart”, traen a colación la parte más íntima y personal de TESLA, con acústicas de por medio y tocando la fibra sensible del oyente, la primera con unas formas muy ochenteras y la segunda cogiendo el testigo de los noventa y con un estribillo de gran intensidad contenida.

Pasando el ecuador “Breakin´ Free” trae la épica a las guitarras en un tema cuya estructura va in crescendo y que también está entre lo mejor del trabajo, y nuevamente, siendo maestros en la forma de ofrecer el menú en este disco, “All Of Me” recupera las formas más pesadas y vivaces, con un tema moderno y actual, muy potente en las guitarras y siempre con un gran trabajo de Keith para dar juego en directo. “The First Time” sirve de contrapunto perfecto, siendo junto a “Just In Case” de las canciones lentas, las más representativas del trabajo, sobre todo teniendo en cuenta que en esta segunda el estribillo es pura radiofórmula de los ochenta pero, precisamente por ello, me parece impecable. La ya citada “Pvt. Ledbetter”, sincopada y muy vacilona, con un tono de voz de Keith muy macarra, es otra buena muestra del nivel del grupo en este disco, pero lo mejor viene ahora de la mano de dos enorme temas: “In A Hole Again”, que vuelve a adoptar formas modernizadas pero en su larga extensión TESLA sabe ir aumentando la intensidad, para que cuando llegue el fogonazo final de “The Game”, uno tenga ganas de volver a poner el disco otra vez. ¿Qué mejor manera que acabar con un corte así, endurecido, pegadizo y actual? Añade a eso un par de bonus en la edición europea, uno de los cuales es una versión en directo de “What A Shame”, y tendrás la perfección hecha disco.

Poco más que añadir. TESLA ha conseguido no decepcionar con un lanzamiento muy esperado y que ha venido precedido de una colección de versiones muy interesante y una gira que dejó por la Península alguno de los mejores directos que se pudieron ver el año pasado en este país. “Forever More” es el disco que todos los que conocíamos a la banda estábamos esperando, y si aún no los conoces, puede ser el momento clave para empezar a hacerlo con un gran trabajo. Digno candidato a disco del año en lo que a terrenos melódicos se refiere.


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