En
estas estábamos cuando Jimi Jamison volvía a huir de su pasado y se
desvinculaba de SURVIVOR para centrarse en su carrera en solitario, que ya
había tenido un par de capítulos a lo largo de los noventa. El fruto de todo
esto es “Crossroads Moment”, tercer disco en solitario de JIMI JAMISON y que,
para mi gusto, es un grandísimo álbum de estos que desprenden elegancia por
cada poro, claro que teniendo a Jim Peterik encargado de la composición de todo
el trabajo, es como si tuviéramos al “corazón” de SURVIVOR otra vez en
movimiento. Desde luego, el grado de complementación que alcanzan Peterik y
Jamison llega a cotas de magia absoluta, puro AOR del mejor que se puede
escuchar, siempre con el notable como media, y con momentos realmente sublimes.
Si “Reach” te dejaba con un poco de indiferencia, “Crossroads Moment” se
convierte en el disco que todos buscábamos de aquella reunión, colocando a
Peterik como el artífice de que la chispa salte, ahora no cabe
duda.
Instrumentalmente
el disco es soberbio. La producción a cargo del propio Peterik permite
disfrutar de todos los matices, de todas las melodías y sobre todo de ese mar
de teclados que siempre está presente y que es fundamental para redondear la
elegancia innata del disco. De vez en cuando Peterik o sus compañeros en las
seis cuerdas se permiten la licencia de soltarse la melena un poco, pero
siempre con la belleza de la melodía en la mente. Y lo mejor es el enorme grado
de compenetración que el guitarrista tiene con Jimi Jamison. Brutal como cada
composición está pensada para que Jimi sea el auténtico protagonista pero al
mismo tiempo no sea simplemente un conjunto de composiciones pasajeras para su
lucimiento. Sólo encuentro una pega al trabajo, que también sucedía con el
“Reach” de SURVIVOR: se hace un poco largo, lo que puede restar algo de interés
a los temas finales si se escucha el trabajo del tirón, lo cual sería un error
porque hay algunas piezas muy interesantes en la segunda mitad del disco. Pero
vamos, pequeñeces teniendo en cuenta la clase de estos dos hombres a la hora de
parir este gran trabajo.
Moderaré
un poco mi entusiasmo para resaltar un puñado de canciones que me tienen enganchado.
Para comenzar por el principio, el disco empieza bien, muy bien, con dos temas,
“Battersea” y “Can´t Look Away” de tempos distintos pero complementarios y con
Jimi Jamison derrochando elegancia en su voz, siendo especialmente adictivo el
estribillo de la segunda de las citadas. El discurrir del álbum sigue sin bajar
del notable en los cortes que siguen, pero la magnificencia compositiva de
Peterik y la gran voz de Jimi, vuelven a tener otro gran momento en “Crossroads
Moment” un tema muy clásico en formas y desarrollo que hará las delicias de los
fans de JOURNEY, SURVIVOR... Para que exista algún momento más íntimo para
resaltar, en mi opinión “Lost”, que marca el ecuador del trabajo, pone la carne
de gallina. Instrumentalmente sencilla, y con un Jimi Jamison pletórico, puro
sentimiento y carisma. Seguida a la anterior otro gran momento viene con “Love
The World Away”, más dinámico y Hard Rockero, con un Peterik más desatado y
nuevamente la gran voz de Jimi llenándolo todo. Pero no te relajes porque una
de las mejores interpretaciones de Jimi viene de la mano de “She´s Nothing To
Me”, un tema muy variado y pegadizo, donde el vocalista se sale.
Y para cerrar el disco por todo lo alto, obviando el tema bonus europeo
“Alive”, dos temas muy emotivos en trasfondo temático y musicalmente hablando
también. Por un lado “Friends We´ve Never Met”, que según comenta el propio
Jimi Jamison es un tema dedicado a los auténticos reyes de este género, los
fans sin los cuales no existiría y que el llama amigos aunque no se haya
encontrado con ellos nunca. El corte en sí es uno de los momentos más AOR del
disco, personal, muy desnudo al principio e ideal para la voz de Jamison, y con
una labor de teclados buenísima. Por otro lado “When Rock Was King”, también según
el propio Jimi, dedicado a los ochenta, al momento en que el Rock era el centro
de atención de todos los medios, y donde Jimi ha contado con la colaboración de
grandes maestros como Mickey Thomas, Joe Lynn Turner, Don Barnes o Mike Reno,
por poner algunos ejemplos. Final grandilocuente y verdaderamente bueno para
este ejemplo de lo que es ser un vocalista con clase, elegancia y buen hacer,
arropado por un compositor que hoy por hoy se puede considerar de lo mejor del
AOR y el Hard Rock, Jim Peterik. Si te gusta la voz del ex frontman de SURVIVOR
y quieres tener un pedacito de buena música en tu discoteca personal, no lo
dudes, “Crossroads Moment” es uno de los mejores discos para alcanzar este
objetivo. Fantástico.
(Crítica publicada también en: http://www.rocktotal.com)
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