viernes, 21 de febrero de 2020

MISTRESS - "In Disgust We Trust": groove y grind a partes iguales.



Nacidos en 1999 con ganas de rememorar los orígenes de la música extrema inglesa (léase NAPALM DEATH, EXTREME NOISE TERROR...), MISTRESS nos vuelve a dejar K.O. con un segundo álbum completo arrollador. Autocalificados como Doom/Grind/Sludge, han conseguido girar con monstruos como los citados EXTREME NOISE TERROR, BOLT THROWER, BENEDICTION... y demás luminarias de las islas Británicas. Han sido pinchados hasta en las famosas sesiones de John Peel y siempre con buenas críticas.

Con tan magno bagaje me enfrento a "In Disgust We Trust", con una portada fotomontaje increíble, heredera del famoso "Scum" de NAPALM DEATH. Musicalmente hablando, el segundo disco de los ingleses se orienta hacia terrenos más propios del Sludge americano que el Grind o el Crust europeos. Sus temas son más largos y trabajados, con un sonido ácido y una voz rabiosa, pero sin tantos minimalismos, con más espacio para el odio reflexivo que para la violencia extrema. Cortes como el que da título al disco, "In Disgust We Trust" es un buen ejemplo.

No obstante, sus orígenes musicales salen a la luz con golpes en la cara de puro Grind - Crust como "Happily Ever Disaster" o "Fucking Fuck". El sonido desplegado por la banda ayuda a rememorar esas producciones crepitantes de los primeros NAPALM DEATH o de los mismísimos BRUTAL TRUTH, de los cuales recogen bastantes influencias. Sin grandes alardes técnicos, pero con buenas ideas, los ingleses nos hacen recorrer en sus diez cortes los paisajes más grises y rabiosos que puedas encontrar, pero a la vez pegadizos y pesados. Algo en lo que la producción ayuda bastante.


El grupo triunfa a partes iguales en sus dos facetas, tanto la reflexiva y mastodóntica (dónde en cortes como "Static" meten hasta voces limpias), como en su parte más rápida y agresiva, con un referente común, focalizar sus fuerzas en la música para descargar tensiones. El grupo se mueve por terrenos variados, quizás un poco faltos de conexión en algunos momentos, pero siempre pasando con buena nota por ellos.

Buenas guitarras que sin hacer uso de grandes virtuosismos saben dar en el clavo tanto en los temas más pesados y monolíticos, como en los asaltos de Grind cargados de blast beats. Algunas partes pecan de previsibles, pero cortes como la rockera "Wiskey Tastes Better..." nos ayudan a salir del corsé con unos coros atípicos, Heavys (como si de una banda de Power Metal se tratase), que puede que no gusten, pero no dejan de ser originales. Como curiosidad, el tema "Me Ves y Sufres" con su estribillo cantado en un castellano inaudible.

Si sólo buscas Grind, quizás salgas decepcionado, ya que no soportarás largos cortes como "Shovel", pero si buscas una base Grind y múltiples sonoridades complementarias, MISTRESS nos lo ofrece con notable alto.

(Crítica publicada también en: http://www.rocktotal.com)

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