Provenientes
de Suecia, pero pudiendo pasar perfectamente por cualquier grupo inglés /
americano de los sesenta y setenta, ASTEROID comienza su andadura musical con
un primer larga duración titulado como la propia banda. Ya desde la portada, y
sin mirar ningún tipo de información de la banda, uno puede adivinar por donde
van los tiros, pero el resultado musical lo confirma, regalando nuestros oídos
con una buena dosis de Rock con toques progresivos, algo de Stoner de los
noventa y muchas dosis de psicodelia.
Aunque
no vengan a descubrirnos nada que no sepamos, en medio del revival que estamos
viviendo de un gran número de tendencias, que surjan sellos como Fuzzorama que
se dedique en exclusiva a sacar del subsuelo a bandas como ASTEROID es una buena
noticia. Parten de los mismos elementos, usan las mismas técnicas (todo lo que
se oye en este disco es tan analógico y envejecido como la propia música) y
abusan de los mismos recursos (prepárate para ver la vida desde un prisma
deforme y cargado de color y olor a sustancias psicotrópicas), pero el
resultado sigue siendo fresco y actual. ¿Tan estancada está la música de hoy en
día para que algo tan añejo como ASTEROID nos suene tan fresco y estimulante?
Sinceramente no lo sé, y tampoco voy aquí a teorizar sobre la falta de riesgo
actual en el mundo de la música, pero es sintomático y a la vez digno de
alabanzas el que un grupo de “jóvenes” hagan un estilo con el que no han
crecido, de una manera que parece que tengas ante tus ojos a ZAPPA, la CREDENCE CLEARWATER
Tan
colorista como la portada es la música de este power trío sueco. Composiciones
variadas, con mayor o menor extensión, pero donde los efectos, las atmósferas
distorsionadas y las alucinaciones musicales llenan cada surco del disco.
Destacando unas voces realmente setenteras en espíritu y forma, la contundencia
de las guitarras, cercanas a grupos pioneros de este revival de los setenta
como KYUSS, y una rica manera de componer y plasmar las ideas, el debut de
ASTEROID se compone de once temas que serán el disfrute de todos los que amamos
este sonido y esta psicotropía artística. Escuchar “The Great Unknown”, con una
distorsión y un hammond que parece un cruce entre LED ZEPPELIN y DEEP PURPLE,
es una sensación única. La desnudez de la música, el calor que desprende y el
profundo sabor a viejo que deja en nuestra boca, genera que tengamos unas ganas
irrefrenables de desempolvar la colección de vinilos propia o ajena de los
setenta que tengamos más a mano.
La
tendencia al progresivo cargado de psicodelia, en el sentido estricto de los
sesenta y setenta, es la nota dominante de todo el disco, y hace que temas como
el citado de apertura, el bluesy “Panoramic Telescope” o el oscuro y lleno de
efectos (un wah-wah único) “The Infinite Secrets Of Planet Megaladoon”, se
pasen en un suspiro. “Silver Leaf” que podría considerarse un homenaje en el
título a BLACK SABBATH (y en la música también), destaca también como uno de
los mejores cortes gracias a sus pegajosos riffs, a su sentimiento Blues y a su
estructura in-crescendo, y finalmente, en el apartado de temas a destacar, no
hay que dejarse a un lado algo tan magnífico como “Strange Trip”, probablemente
el tema más movido de todo el disco, con cierta modernidad en su sonido, pero
sin dejar a un lado la influencia básica de la que bebe ASTEROID, ni tampoco
olvides el magnífico solo de guitarra, nuevamente con wah-wah de “Flowers And
Stones” uno de los cortes más psicodélicos.
En definitiva, si eres amante de la música de los sesenta y setenta, de
la psicodelia, de los tripis musicales, de la paranoia… si quieres ser
partícipe de este revisionismo realizado con admiración y buen gusto, ASTEROID
nos ofrece un debut altamente recomendable. Nada nuevo que aportar, pero la
diversión no falta ni un instante.
(Crítica publicada también en: http://www.rocktotal.com)
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