MAYHEM no necesita presentación. Tanto por motivos musicales, como extramusicales, la banda noruega tiene la etiqueta de pionera grabada a fuego en su espalda y eso para bien y para mal es algo que pesa. Sin embargo, para mi gusto, los autores de esa obra maestra que es el "De Mysteriis Dom Sathanas", han sabido reinventarse varias veces y mantener un alto nivel. Otra cosa es que los trues de la vida prefieran el sonido chicharrero de "Deathcrush" o no quieran ver más allá del disco en el que se dieron la mano (y otras cosas...) gente como Varg Vikernes y Euronymous, personalidades bipolares de todo un movimiento cultural que llenó el mundo en general y Noruega en particular de pequeños aquelarres y cultos al maligno, por ser reduccionista al máximo. Sin embargo, en sus 35 años de existencia, que se dice pronto, MAYHEM ha parido obras de todo tipo y ha creado escuela, ya fuera en forma avant garde y cacofónica, acercándose a la pesadez del death metal, jugueteando con atmósferas cuasi industriales o recreando el caos musical.
Después de varios meses recordadno el que fuera su disco más celebrado, a Necrobutcher, único miembro original, Hellhammer, Attila Csihar, y compañía (que no es por ser peyorativo, porque la pareja de guitarristas, Teloch y Ghul, son culpables de este sonido en gran medida), se han debido de permeabilizar del espíritu del "De Mysteriis Dom Sathanas", porque al editar "Daemon", sin querer, o queriendo, han parido el que resultaría su sucesor natural... 25 años después. La producción no es la misma, y ni falta que hace, porque de lo contrario habría sido la osadía demasiado evidente. Muchos de hecho les echarán en cara eso, que el disco no suena a cámara hiperbárica, sino que tiene una producción acorde a los tiempos actuales. Pero el espíritu y los resultados son idénticos, vuelve el mismo maleficio y oscurantismo que recreaba aquella joya seminal y también la inspiración para recrearlo. Lo que me pregunto es si esta involución dará al traste todo lo demás... pero eso es otra historia.
"Daemon" es un disco de black metal al uso, y no. Me explico. Es un disco que es black metal al estilo en el que MAYHEM lo hizo en 1994, con medios actuales, dos guitarristas que tienen una calidad técnica superior y un Attila que con este sonido brilla absolutamente y es tanto o más excesivo que en el pasado, pero además más convincente. Los que me lean pensarán que estoy diciendo que "Daemon" es una versión mejorada del "De Mysteriis Dom Sathanas" y estarán recortando mi foto ya para ponerla en un pentagrama y llenarla de agujas... no, no estoy diciendo eso. Son dos discos distintos, sólo que MAYHEM ha decidido sacar con "Daemon" un nuevo disco que recoge su forma de entender el black metal como ellos lo entendieron hace un cuarto de siglo, pero sin olvidar que son músicos con dos décadas y media más de rodaje, que tienen nuevos miembros y que los tiempos han cambiado...
En el terreno individual, los que más llaman la atención son el propio Necrobutcher y Hellhammer, porque ambos están pletóricos de energía e inspiración. El primero, que recordemos no estaba en "De Mysteriis Dom Sathanas" (lo que motivó la presencia histórica del señor Varg Vikernes), asume el papel corpóreo y grueso del bajo en aquélla época, un instrumento que le daba al black de MAYHEM un aire sepulcral inigualable y que Necrobutcher ha logrado recrear. El segundo hace uno de sus trabajos más bestias y agresivos, con una técnica más depurada de la que tenía entonces y con más variedad (no hay más que escuchar la thrasher "Falsified and Hated" y sus parones y cambios de ritmo, que también son lucimiento para Necrobutcher). Pero el que se lleva la palma es Attila. El vocalista inimitable es el punto teatral y fantasmagórico que necesita MAYHEM y aquí lo borda. Todos los histrionismos y derivaciones que domina, están aquí presentes.
El disco se mueve a las mil maravillas tanto por terrenos groovies, como por terrenos veloces (una de mis preferidas en este sentido es "Bad Blood", con un trabajo de los guitarristas excepcional, o la postrera "Worthless Abominations Destroyed", que es como un túnel del viento). Todos los cortes tienen su propia personalidad y algo por lo que destacar y globalmente el disco no tiene ningún momento de bajón. Hasta el repetitivo e hipnótico tema que cierra el disco, "Invoke The Oath", es uno de los más brillantes gracias a los detalles rítmicos de Hellhammer y al papel sin igual de Attila. Pero es que no hay desperdicio en todo lo demás, siendo uno de mis momentos preferidos la sorprendente apertura, "The Dying False King", donde uno ya sabe que se encuentra ante el eslabón perdido de la discografía de MAYHEM con esa línea de bajo arrastrada de Necrobutcher o la épica "Aeon Daemonium".
Cabe preguntarse el por qué de este disco. Si es algo que ha surgido porque sí, o ha venido para aprovechar el tirón de la gira de "recreación" del "De Mysteriis Dom Sathanas". A mi me da un poco igual. MAYHEM no tiene disco malo (ni tampoco igual al anterior) y "Daemon" no es una excepción, es sorprendente que lo editen ahora, pero bienvenido sea porque el nivel compositivo y de atracción generada está muy por encima de la media del género. Uno de los discos del año 2019 para mi gusto.
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